La habitacion

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JIMIN

Entonces todo había cambiado era lo único en lo que pensaba, hasta que bajamos de el carro, el señor muy amablemente nos llevo hasta la casa, no tuvimos con que agradecerle, solo le dimos una amplia sonrisa, el fue tan sabio y nos dejo a ambos con dudas e inquietudes, todavía tengo que resolver algo.

-Kook, woo por que siento que me ocultas algo importante-- intento mostrarme calmado.

-Que quieres decir... no tengo nada mas que contar.

-¿La calle de papa?, por que aquel anciano al hablar de aquella calle dijo "su padre". No tiene sentido-- ya empezaba a actuar diferente, sentía que algo faltaba-- es que acaso... no eso no tiene sentido, tu sabes mas que yo, ¡dime algo!-- mi paciencia se agotaba, el actuaba tan tranquilo. 

-Calmate Jimin...

-Quieres que me calme, en serio-- lo tome de la camisa y lo jale hacia mi intimidandolo un poco.

-No quiero, me vas a obligar-- su tono de voz eran tan inusual, se notaba tan calmado, sus ojos en ellos no veía mas que un vació.

Lo solté de la camisa y retrocedí, mi cabeza estaba baja, mis manos temblaban y estaban sudorosas, mi respiración era tan tranquila que daba miedo. Dirigí mi mirada a la casa ignorándolo.

-Quiero que te acuerdes tu, quiero que veas lo que eramos nosotros, no tiene sentido que yo lo cuente como si hubiera sido yo el único que vivió esa historia-- su tono era leve, como si no quisiera que lo hubiera escuchado.

Solo suspire y me resigne, si no me quería contar; solo por que quería que yo viera todo desde mi perspectiva, seria mejor, claro esta, no creería que el trata de mentirme con un inútil cuento de hadas.

La casa estaba desocupada, eso era algo bueno, podíamos invadirla, no teníamos de otra, no vinimos aquí para sacarnos una selfie en mi antigua casa.

Entramos sigilosamente evitando problemas con alguien del vecindario.La casa estaba muy polvorienta, los rincones llenos de telarañas, un silencio abrumador, pero era increíble esta sensación de estar en casa. Subí las escaleras, mis piernas me llevaban, yo solo observaba.  

FLASHBACK 

-No quiero esto, nunca pedí un padre-- mi voz sonaba temblorosa, las lagrimas caían sin parar.

-Yo necesito a un hombre, no puedo vivir sola con tigo, eres una desgracia-- una voz femenina atormenta mis pensamientos.

-Yo no pedí nacer... 

-Lo se, yo fui quien abrió las patas.

-No fue solo una vez que lo hiciste, cuantos hombres ya has traído a la casa.

Dan un fuerte golpe en mi cara.

-No te permito que me trates como basura... desgraciadamente te toco esta madre-- enciende un cigarrillo inundando la casa con un horrible olor.

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-Jimin este sera tu nuevo padre.

-Te dije que yo nunca pedí un padre.

-¡Se respetuoso con el!-- me empieza a mirar como lo peor, queriendo que no la haga quedar mal.-- el sera tu hermanastro.

H-hermanastro...

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