Destino

Punto débil

JIMIN

Han pasado alrededor de dos horas, lo único que han dicho son cosas insignificantes, a veces sus palabras llenan un vació, a veces solo crean otro hueco.

Palabras dolorosas han salido a la luz, algunas son tan insignificantes, otras están fuera de lugar, a pesar de todo han hablado, claro esta que han hablado con mentiras.

Seguimos en la sala escuchando absurdas palabras, no he vuelto a hablar, pacientemente espero un punto en el que este satisfecho.

-Y bueno niños que mas quieren-- dijo Taeyang mientras nos miraba a ambos sin preocupación alguna, se sentía seguro de si mismo después de hablar tan pacíficamente. 

Ambos quedamos callados por un momento, tal vez habíamos creído aquella absurda mentira.

-Por que nos ocultaron todo esto-- hablo Jungkook entre dientes.

-Queríamos empezar desde cero-- Respondió mi madre volviendo a tomar la mano de aquel señor.

-No se dan cuenta de que son malos padres-- hable fríamente notando sus manos.

Ambos quedaron callados.

Note la expresión fría que mostraba Kook,tal vez el no estaba satisfecho, tal vez el sabia mas que yo y por eso seguía a la defensiva.

Entrelace mis dedos  y jugué un poco con mi mirada, quería ver si los intimidaba, y si era así claramente nos mentían, no tengo otra forma de hacerlo, ya me siento débil. Ellos siguieron rectos, para nada desviaron su mirada de nosotros.

Jungkook empezaba a mover su pierna, tal vez solo concentraba su temblor en esta, después de unos segundos suspiro profundamente incomodandonos a todos.

-Yo me largo-- Jungkook pronuncio estas palabras como si fueran las ultimas. Segundos después salio de la casa tirando la puerta fuertemente.

Ese golpe me hizo reaccionar, claramente desperté de mi fantasía, mis ojos ya veían diferente las cosas, mi corazón nuevamente se aceleraba y mi cuerpo temblaba.

-Quiero que te vallas de la habitación-- mire a mi madre fríamente-- quiero hablar a solas con este señor.

-Por que quieres eso... --respondió mi madre mientras apretaba la mano de aquel señor.

Dirigí mi mirada  a sus manos, ellos claramente notaron esto y se soltaron.

-Hazlo-- tome mi tono serio y lo emplee en esta situación.

-Vamos yo hablare con tu hijo-- dijo Taeyang en pocas palabras mientras miraba a mi madre.

Ella asintió con algo de miedo, se levanto de aquel cómodo sofá sin dirigirme la mirada, su cuerpo débil y tembloroso se dirigió a la cocina sin decir alguna otra palabra. 

Me aparte de aquel rincón acercándome mas a el, trataba de controlar mi temblor por mas difícil que fuera, mi respiración era entrecortada, mi pecho aun dolía, sin embargo caminada como lo hacia siempre, confiado.

-Y bien-- dije mientras aun caminaba-- quiero que ahora me hable con detalles sobre el accidente-- aclare mientras me detenía, estaba a solo unos pasos de el.

Inmediatamente asustado se levanto del sofá con algo de dificultad.

-Vamos Jimin que mas puedo decir-- su tono cambiaba, tal como lo había hecho cuando Jungkook pregunto sobre esto.

-Entonces dígame sobre las golpizas-- coloque otra pregunta con la cual volvía a dejarlo intranquilo.

Mi mirada era firme, en cambio la de el estaba perdida. Rápidamente miro hacia la cocina, supongo que en busca de mi madre, ese era su refugio, alguien que también ocultaba la verdad.