Capitulo 4

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Pov Taylor

Realmente había dormido bien los rayos de luz entraban por mi ventana y para mis ojos era difícil adaptarse a la claridad.

Debía levantarme temprano para que mi odiosa vecina no me encontrará desnudo antes de irme al instituto, luego recordé que era sábado y mi plan seria seguir durmiendo.

Así que acomode a la chica a mi lado y la abrase aún mas acercándola a mi pecho.

Y ahí me di cuenta de que alguien estaba en mi cama era eso o me lo estaba imaginando toque nuevamente en cuerpo al lado mío y claro estaba que era una chica con unos buenos senos.

Finalmente abrí mis ojos y ahí frente a mi con mis manos en sus pechos estaba un cuerpo borroso con cuidado quite mis manos de la chica y palpee en la mesita de noche mis lentes me los puse y ahi en mi cama estaba Leila mi fastidiosa vecina.

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Bam!!!!salte de la cama y grite.

Ella comenzó a despertar y cuando sus ojos encontraron los míos se puso roja como un tomate y salto de la cama.

-Tú-le dije que demonios haces en mi habitación y en mi cama conmigo.

Leila no dijo nada y se dio la vuelta dándome la espalda.

Eso hizo que me enfureciera

-oye mirame cuando te hablo,no puedes entrar a las habitaciones de las personas y dormir con ellas -le dije.

Aun no hubo respuestas por parte de Leila.

Enfurecido fui hasta ella y de un tirón la puse frente a mi y cuando lo hice grito como loca.

-¡¡¡TIENES UNA ANACONDA AHI!!! QUITALA QUITALA QUITALA.

yo seguía sin entender que le ocurría a esta loca y solo la observe confundido.
Leila se tapó los ojos cogió una almohada y me la lanzó.

-e tenido suficiente de tu pack no lo quiero ver y menos en la mañana -dijo

Mis ojos se abrieron como plato y sentí mi cara hirviendo probablemente estaría mas rojo que un tomate y para mi desgracia estaba teniendo una ereccion matutina.

-Leila eres una insolente la culpa es tuya por entrar en mi habitación-dije gritando.

Ella no dijo nada corrió hacia la ventana y sin mas puso un pie fuera y luego otro y luego ¡pum! Un ¡crack! se escucho abajo.

Dios mio! me asome a la ventana y ahí estaba ella tendida en el suelo y por lo que se podía observar un hueso no estaba en su lugar eso era lo mas preocupante.

Me puse unos bóxer ,unos jeans y una camisa azul que estaba por ahí, baje las escaleras de mi casa tome las llaves del auto y fui hacia leila. La encontré tendida en el suelo desmayada y con un brazo roto.

La cargue en mis brazos con cuidado de no lastimar su brazo roto y me dirigí al garaje por el auto ,la acomode en el asiento del copiloto y me subí sin mas rumbo al hospital.

Mientras iba lo mas rápido que podía la observe.
-por que rayos estas vestida de negro -dije a la desmayada Leila.

Llegamos al hospital la cargue en mis brazos nuevamente y busque ayuda rápidamente un doctor examino a Leila le enyeso el brazo roto y me dijo que despertaría en cualquier momento.

Y este no era el fin de semana que tenia planeado mis buenas calificaciones y excelente asistencia se debía a mi esfuerzo y dedicación al estudio me merecía por lo menos un descanso.

Jamas pensé que este fin de semana mi odiosa vecina me encontraría desnudo y luego tuviera un accidente por lo cual me vería arrastrado a auxiliarla.

Pensándolo bien la hubiese dejado ahí tal vez algún vagabundo la hubiese encontrado.

Mientras pensaba estupideces y miraba a una Leila dormida en una camilla ella comenzó a moverse.

-Leila me escuchas-dije

Ella parpadeo un par de veces y luego se puso roja como tomate.

-donde estamos Taylor-dijo tartamudeando

En el hospital cuando emprendiste tu huida de mi habitación no notaste que no había escalera y caíste al suelo, debido a eso te has roto el brazo y tuve que traerte aqui-le explique a Leila.
Trató de entender lo que le había dicho y asintió sin decir nada mas.

-bien-dije ya hice lo que debía así que me voy.

Me levante pero su mano se poso en mi brazo no se por que pero el tacto de su mano deteniendome me hizo sentir extraño.

La mire y hablo.

-Podrías por favor llevarme a casa-dijo- Se que quieres explicaciones y te las daré solo llevame a casa.

Asentí y la ayude a bajarse de la camilla, salimos del hospital le abrí la puerta para que entrase en el auto y seguidamente me dirigí al asiento del conductor .

-Bien Leila es hora de que me expliques de camino a casa , ¿qué rayos hacías en mi habitación? Y ¿por que vistes de negro?-dije y luego introduje las llaves y nos fuimos directo a casa.

Leila me miro trago saliva y comenzó a hablar.

¿PUEDE UN NERD ROMPERTE EL CORAZÓN?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora