Acéptalo, así fue...

Capítulo 48

Tengo los dedos entrelazados esperando en la sala en la que me dejaron, no puedo parar de limpiar el sudor de mis manos en mi pantalón y de morderme las uñas, estoy que me muero de nervios y no sé ni porqué.
Todo esto no se compara cuando lo veo pasar una reja acompañado de dos oficiales, tiene la vista baja y puedo notar que se a dejado crecer la barba levemente, la cual no le queda nada mal. No sé qué hacer, no sé que decirle, no sé cómo justificar que no he venido por más de ocho semanas porque no he sido capaz, no creo que lo entienda.

Lo veo en el transcurso de la reja a la mesa, el cuando por fin se percata de que soy yo, luce completamente sorprendido, sus facciones se relajan casi al instante.

-Alison- dice casi en un suspiro, recordándome a esa vez en la que logramos escapar de esa cabaña en la que John me tenía secuestrada-Creí...creí que nunca vendrías.

-Pues tendrás que acostumbrarte- Logro decir en un hilo de voz.

-¿A que se debe tu visita en este bello lugar?- Sonríe burlón refiriéndose a la cárcel, lo que sólo logra que mi mente tenga dudas. ¿Cómo será estar aquí?.

-Perdón...- Suelto sin pensar, refiriéndome a que no he venido a verlo- El niega con la cabeza con una media sonrisa.

-No esperaba que me visitaras- Lame sus labios antes de seguir hablando- Tal vez una parte de mi lo creía posible, pero la otra parte comprendía que lo único que ibas a querer era olvidar toda esa basura.

-No es eso, yo quería visitarte pero no era capaz, he tenido pesadillas y...

-¿Pesadillas?- Me interrumpe- ¿Que clase de pesadillas?.

-Son diferentes cada noche, pero todas son sobre...John, sobre todo lo qué pasó- El parece preocupado mientras le cuento todo esto, pero me sorprende mi manera de desenvolverme al contarle todo.

-Es un trauma que tienes- Me explica- Varias personas pasan por eso, y solo hay dos opciones, tratar de superar todo tú sola o buscar ayuda.

-Veré que hago más adelante...

-Alison, estoy bien, y ahora que tú me visitas- Suspira sonriendo- Estoy más que bien- Yo asiento no muy convencida.

-Lo digo de verdad, ahora solo quiero que sonrías, ¿Si?- Hace todo lo posible para hacerme sonreír, y lo consigue haciéndome un par de bromas que me sacan una carcajada.

Hablamos aproximadamente una hora sobre cosas que nos han pasado, el me dice que no está nada mal como pensaba, que como John es un hombre muy respetado y él formaba parte de sus hombres, no le han hecho nada. Además le tienen todos miedo a Logan por enfrentar a uno de los hombres más importantes, según muchos de aquí dicen.
Al último un oficial nos dice que se a acabado el tiempo y yo le prometo a Logan que la siguiente semana lo visitare, ya que es un día de visitas a la semana.

Melissa está afuera sosteniendo un libro esperándome, en cuanto me ve lo cierra para salir apresurada a mi dirección.

-¿Como fue todo?, ¿Todo bien...?, ¿Está bien...?, ¿Estás bien...?- dice una pregunta tras otra sin parar, yo suelto una pequeña risa. Aliviada de que todo salió más que perfecto.

-Todo estuvo muy bien- En cuando comenzamos a caminar le hablo acerca de cómo estuvo todo, y de mi plan de venir cada semana a visitarlo.
Después de tener un debate de que hacer en el resto de la tarde decidimos ir a la librería en la que nos conocimos, ese lugar al que solía ir cuando mi vida era completamente normal.

-No puedo creer que ya haya pasado casi un año- Digo más para mí misma que para los demás, Scott y Dylan nos alcanzaron a mí y a Melissa. Para pasar el rato fuimos a una pequeña cafetería.

-El mejor año de mi vida- Dylan sonríe tomándome la mano, si que lo fue, omitiendo la parte de todo lo malo. Pero sin duda fue lo mejor conocerlo.

-Solo faltan los resultados de mi examen para ver si pasare de año con ustedes- digo algo desanimada, fue mi primer año de preparatoria y ahora solamente faltan dos para que entre a la universidad. A partir de aquí podré hacer mi vida normal, podré estar en la calle sin tener miedo y sin sentir que alguien me mantiene vigilada todo el tiempo, al menos eso es lo que espero.

-¡Lo pasarás, Lewis!- Me anima Scott dandole un sorbo a su chocolate caliente- ¿Tienen un plan para el verano?.

-Tenía pensado en que podríamos ir los cuatro a algún lado- Propone Melissa- Algunos días en la playa, de campamento, no lo sé...- Una pequeña emoción me recorre de pies a cabeza de solo pensar en que pasare el verano al lado de Dylan.

-Nos merecemos un tiempo de paz y tranquilidad después de todo lo que sucedió, sobre todo tu Ali- Miro a Dylan agradecida, si que lo necesito. Alejarme de todo y no preocuparme por nada, que mi única preocupación sea pasarla bien y disfrutar.
Nada de preocuparme por qué un maniático este suelto por ahí buscándome y amenazándome.

Y aquí me encuentro hablando con unas de las personas más importantes para mi, hablando cosas sin interés, haciendo bromas y haciendo planes para el verano.
Se siente tan bien estar así, quisiera poner en pausa este momento de mi vida y darle play dentro en un buen tiempo.
Después de todo lo que tuvo que pasar en mi vida, ¿Al fin es hora de seguir adelante y dejar todo atrás?.
No sé la respuesta de eso, nadie sabe lo que pasará mañana, en un mes, o en unos años, pero al menos se lo que yo quiero, y lo que quiero es seguir adelante, dejar todo atrás...ser feliz.

Después de estar un tiempo los cuarto hacemos planes para que se nos unan nuestros padres, Dylan llama a Rebecca, Melissa llama a Richard y a Megan y yo hablo a mamá. No tardan mucho para llegar, por supuesto vienen con ellos el pequeño monstruo y Jenni.
Si antes era genial ahora todo era perfecto, ahora sí todos los que me importan están aquí, disfrutando y conviviendo.

-¿En que piensas amor?- me susurra Dylan al oído.

-En lo feliz que estoy de que estemos todos juntos- sonrió contemplando a todos, como si fuera uno de esos sueños de los que nunca quisieras despertar.