Chrishelm

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Voten. Comenten si les gusto.

Camine rápidamente a la casa de mi mejor amigo, hace días que no lo veía, uno, porque se alejo de mi desde que esta de novio y dos, dice que a veces soy un mal amigo, y no sé si sentirme ofendido u algo, pero todo lo que hago es por algo, es mi único amigo, y siempre a estado para mí. Veo su casa de lejos y corro hacia ella, golpeo frenéticamente la puerta y coloco mis manos en los bolsillo de la chaqueta al darme cuenta de que las tengo demasiado frías, muerdo mi labio esperando a que se digne a abrir, al esperar más de cinco minutos ahí parado, con la capucha de la chaqueta puesta y mis manos en los bolsillos, me dispuse a darme vuelta para irme, suspiré y negué decepcionado, era verdad de que no me quería ver, baje la cabeza mirando al piso y comencé a caminar, de repente se oyó como era abierta una puerta y luego como una voz masculina decía mi nombre, no me giré y seguí caminando, seguro eran eran los vecinos que siempre me invitaban a su casa, negué, mordiendo mi labio.

.- ¡Christoffer! .- Escuche nuevamente y esta vez me giré tratando de decirle a los vecino que no iría con ellos esta vez, pero sorprendido me mordí el labio.- ¡Christoffer ven aquí! .- Me hizo una ceña para que me acercara a él, lo pensé y camine hacia él, al quedar frente a él, mire su rostro, estaba más pálido de lo normal y sus ojos estaban hinchados y enrojecidos, se notaba que había llorado, se acomodo su mechón de cabello y se cruzo de brazos, lo mire con mis labios entre abiertos y rodó los ojos.- ¿entrarás? .- apunto con su mano hacia dentro, asentí lento, y entre, me froté las manos y di una mirada hacía la cocina por si había alguien, pero nadie, como siempre que venia a esta casa, me di vuelta para mirarlo y él estaba apoyado en la pared con su mirada indiferente, me miro de pies a cabezas y mordí mi labio nervioso.- ¿que haces aquí chris? .- Pregunto tosco y sin titubear.

.- yo... yo, lo siento, no debí venir sin avidarte, lo siento.- Hablo tímido, la seguridad que tenia antes de venir aquí, se fue sin saber a donde, sin saber si volvería. William chasqueo la lengua y volvió a acomodar su cabello, frunció sus labios y se acerco a mi, hasta quedar frente a mí.

.- No lo sientas, pero, ¿a que viniste? .- Alza una ceja mirandome, levanto un poco mi cabeza para mirar sus ojos, sus ojos ya no estaban enrojecidos, esta vez tenían un brillo especial, pero no había ningún sentimiento en ellos.

Carraspee.- venía a verte.- Junte mis labios.- hace dos semanas que no sabía nada de , me preocupe, y Noora tampoco me decía nada.- Al decir ese nombre William se alejo de mí y miro hacia otro lugar que no sean mis ojos.

.- yo... o sea, nosotros, dimos fin a la relación, me llamaba la atención otra persona.- Muerde su labio sonriendo de lado. Me sorprendo por sus palabras, no le creía, lo vi jugársela por ella, ¿y que ahora me diga esto? Me sorprendo totalmente y no lo puedo evitar, William me mira curioso y se acerca a mi nuevamente.

.- ¿y quien es la otra persona bro? No me haz contado nada.- rió nervioso y le golpeó el hombro amistosamente, William ve eso divertido y se acerca un poco más, mezclando nuestras respiraciones, entre abro mis labios mirándolo a los ojos. No sé que me pasa o que siento estando así con él, tengo unas ganas de besar esos labios que semanas atrás besaron a Noora, me sentía confundido y tener a William demasiado cerca, no ayudaba mucho, volví a la realidad y sentí mis mejillas levemente acaloradas, mientras relamia mis labios, William al ver eso sonrió leve y paso una de sus grandes manos por mi nuca y comenzó a acariciar el cabello de ahí, mi respiración cada vez más se volvía más rápida, no la podía controlar, escuchaba los latidos de mi corazón en mis oídos, fuerte. William dirigió su mirada a mis labios y luego nuevamente a mis ojos, dio el siguiente paso, se acerco la nada a mi, y saborio mi labio superior, lo lamio y mordió un poco, yo sorprendido aun en shock no sabia que hacer, me sentía más inseguro ahora, todo lo que hacia con las chicas se me había ido de la cabeza, no recordaba, nada pero nada de como se besaba y se daba placer a otra persona. William volvió a besarme esta vez, al prinpicio fue lento y romántico, metio su lengua dentro de mi boca y comenzamos una batalla, pase mis manos por su cuello, hasta llegar a su nuca y lo acerqué más a mi para seguir su beso, mordí su labio y lo escuché jadear, se separo un poco de mi, manteniendo nuestra posición y comenzó a reir.

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