Capitulo 8

303 21 0
                                    

Me tomo bastante tiempo para que Max me tomara atención, luego que todo volviera a la normalidad nos tomamos nuestro tiempo buscando el regalo perfecto para el bebe.

Max quería algo simple, pero yo no estaba de acuerdo con el.

No era algo tan difícil y aunque fuese gracioso, nunca lograbamos ponernos de acuerdo, pero después de todo los polos opuestos se atraen, ¿no?.

-No me gusta esto, ¡cielos!, parece un gallinero lleno de plumas, ¡no quiero que mi sobrino luzca como un gallinero!-dijo Max sosteniendo el primer disfraz que le había encontrado que lo había encontrado precioso.

-Como no te das cuenta que es un disfraz de pollito, cariño, obviamente tendrá un parecido a un gallinero-dije. Max me miro con burla, para luego dejar el enterito en el mostrador.

-No comprare eso, es horrible. Tienes gustos muy raros, no se como rayos me case contigo.

-No sera porque me amas- dije agitando mis pestañas.

-Aja, claro

-¡Oye!-dije y golpee su brazo con mi puño, a lo que el se quejo pero luego puso su sonrisa. Me aleje de el al sentir mi teléfono vibrar dentro de mi bolso, rápidamente lo tome y sonreí al ver el nombre de mi madre en la pantalla.

-Hola, mi cielo- dijo mi mamá. Mi mamá era la mejor sin duda, siempre me apoyo en todo al igual que mi padre y al ser hija única siempre los tuve cuando los necesitaba.

-Hola mamá, ¿que tal todo?,¿ y papá?- pregunte mientras le señale el teléfono a Max, él asintió y se fue por otro pasillo seguramente por el regalo.

-Todo muy bien, cariño. Tu padre esta muy bien también, solo que extrañándote al igual que yo.

-Lo siento por no ir a visitarlos, pero han sido semanas con mucho trabajo- dije ignorando el tema del embarazo. Mis padres obviamente sabían todo sobre mi tema de infertilidad y al igual que a mi, les afectaba mucho y esta vez preferí no decirles nada.

-Esta bien, solo que te extrañamos.- dio un gran suspiro antes de seguir hablando.-Sabes que siempre Max y tu son bienvenidos aquí.- Mis padres tenían una gran granja y la compraron solo con el fin de cuando yo tuviera hijos, ellos crecieran allí y pudieran disfrutar de una vida llena de virtudes que te entrega el campo y sin caos como los hay en la ciudad. Que irónico que tal vez eso nunca se iba a cumplir.

-Yo también los extraño mucho, ya verán que pronto iré de visita. Debo cortar mamá, Max y yo estamos buscando un regalo para el bebé de Nicole.

-Ah...bueno que les valla bien,y mandale saludos, te amo hija.

-Yo más, nos vemos- dije y corte la llamada. Inmediatamente comencé a buscar a Max y valla sorpresa me encontré. 





-

NegativoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora