Negativo

Capítulo 11

Al fin y al cabo, Max consiguió convencerme y estoy aquí, en el grupo de ayuda, rodeada de mujeres, y esperando que hable la monitor que nos guiará en todo este proceso. Para ser sincera, no queria hacer esto, solo lo hago por Max.

-Muy buenos días chicas, mi nombre es Megan y seré su guía de ahora en adelante. Este grupo las ayudará a todas a guiarlas por el camino de la perseverancia en nuestra búsqueda y no ir por el de la frustración como nos ha invadido a todas. Primero que todo, creo que nos vendría bien conocernos y hablar sobre nosotras.- no mira a todas nosotras para proseguir.- ¿Alguien quiere ser la primera en presentarse?.

Se instala un incomodo silencio, entre nosotras nos miramos como queriéndonos animar a ser la primera en presentarse... bueno, aquí voy.

Levanto mi mano en señal de saludo y hablo. -Hola, mi nombre es Sophie, y actualmente estoy embarazada de tres semanas.- todas se quedan bastante sorprendidas, ya que este grupo es para madres que han perdido a sus bebés y yo estoy contando que estoy en cinta.

-Sophie, ¿estás segura que te metiste al grupo correcto?.- me pregunta Megan confundida.

-Claro, y sé qué tal vez no me pueden entender o tal vez si, pero aún que este embarazada, ya he tenido tres abortos antes, y siento que este bebé seguirá el mismo camino que los otros.

-Estoy en tu misma situación.-comenta una chica de unos veinte años, tiene el cabello rizado con un precioso color caoba y unas mejillas tan llenas que me dan ganas de apretarlas.- Mi nombre es Olive y estoy embarazada de cinco semanas.- dice y nos sonríe de una manera lastimosa.- he entrado aquí por que ya he perdido 2 bebés y no quiero que el que llevo ahora terminé igual, aún que tengo esperanzas de que llegue a termino.

-Bien.- dice Megan.-¿Alguna otra que este embarazada?.-Nadie más levanta la mano, bien solo somos dos embarazadas.

Cada una decide dar el paso y contar sus historias de como llegaron aquí, algunas tienen historias muy fuertes y mis mejillas rápidamente se llenan con lagrimas, aún que se las atribuyo a las hormonas locas del embarazo, rayos, estoy muy sensible.

El ambiente se vuelve más cómodo y todas comenzamos a conversar entre nosotras. Siento mi celular vibrar en mi bolso, lo dejo sonar unas 3 veces cuando decido sacarlo y ver quien es. Me alejo del grupo y contesto la llamada.

-Hola Sophie, ¿Que tal?- Es Nicole.

-Hola mami, muy bien ¿y tu?.-Se ríe.

-¿Estamos en esa parte de nuestra relación en la que nos llamamos papi y mami?.- Ahora soy yo la que suelto carcajadas.- Hablemos de lo importante aquí, quería saber si Max mañana te daba permiso para acompañarme a comprar las cosas que faltan para la habitación de mi bebé?.

-Numero uno, Max no me controla, numero dos, mañana trabajo y numero tres, acepto.

-Me parece, ¿que te parece a las 7:30 en el centro comercial?.

-Vale, vale. Que no me hago de rogar, tengo que irme, cuídate y cuida a mi sobrino, te quiero.

-Claro, también te quiero. Mandale saludos a Max, nos vemos mañana.-Doy por terminada la llamada y me reincorporo al grupo, donde ya claramente no hay tensión entre nosotras, me siento nuevamente y me dedico a conversar y reír de cada ocurrencia que dicen. La verdad es que no fue tan mala idea venir aquí.

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Luego de dar por terminada la reunión, voy camino a casa después de haber comprado comida china para la cena. Siento que si me sirvió para compartir mi experiencia y escuchar la de las demás y saber que no soy la única mujer en el mundo que ha pasado por esto.

Saludo al guardia y sigo caminando hasta llegar a casa, al revisar mi bolso y no encontrar las llaves, toco la puerta. Espero que Max este en casa.

Para mi buena suerte, es Max quien me abre.

-Uhh nena, pensé que llegarías más temprano, parece que te divertiste.- Canturrea, para luego poner sus manos en mi cintura y bajar su cabeza para besarme. Soy un tanto baja para el, por lo que yo tengo que ponerme en puntillas o el baja su cabeza para besarme.

-Muero de hambre.-Me quejo entrando con las bolsas.

Saco la comida de las bolsas y Max trae los platos para servirla. Algo que de inmediato me cautivo de Max, fue que ambos sabemos movilizarnos en cuanto las tareas del hogar y en general en nuestra vida en común. Jamas le he tenido que pedir ayuda en algo, porque el lo capta y lo hace, somos un gran equipo.

-¿La pasaste bien, te sientes bien?.-Me pregunta Max con preocupación.

-Bueno, al principio fue un tanto incomodo, pero después la pase genial, tengo que admitirlo. El embarazo aún no me tiene mal, he tratado de pensar lo menos posible en ello.- suspiro-No me quiero encariñar.-Max toma mi mano por encima de la mesa y la soba antes de besarla.

-No puedes hacer eso, Sophie. El bebé...-lo interrumpe su teléfono, lo saca de su bolsillo y mira la pantalla.- Es Nicole.-Dice y contesta.

-Hola hermanita.-No alcanzo a escuchar lo que habla por lo que sigo comiendo.-¿Que sucede Nicole?, ¿rompiste fuente?- Me levanto de la silla rápidamente al escuchar eso y comienzo a buscar las llaves del auto.- ¡Voy a matar a ese hijo de puta!.-Grita Max y me detengo en mi búsqueda, él jamas es grosero. Es ahí donde me doy cuenta de la gravedad del asunto.

Max corta y me explica la situacion mientras salimos de casa. No doy credito a lo que me dice, y quedo en shock. Él va a tomar el control del auto, lo aparto, y yo tomo el asiento del conductor, espero a que suba Max y arranco el auto en dirección a la casa de Nicole.

Lo que esta pasando, absolutamente nadie se lo esperaba.