Broken Hearts (EDITANDO)

Mi rubio favorito

Nota: como actualizó hoy domingo, mañana no actualizaré.

***

¿Desde cuando mi vida se a vuelto tan complicada? ¿Yo estoy cambiando? ¿O las personas qué me rodean cambian?

Aleje esos pensamientos cuando el profesor se acerco a entregarme mi examen de química y decía:

"Excelente trabajo: 12"

Al fin una buena noticia. Capaz que este era el pequeño detalle que necesitaba para poder volver hacer la antigua Allison.

- La felicito señorita White. Nunca me decepciona - me felicitó el profesor y sonreí a modo de respuesta.

Debía concentrarme en mis estudios.
Debía concentrarme en mi futúro.
Debía concentrarme en ser una buena novia

Aunque lo de buena novia creo que me cuesta un poco. Pero no es mi culpa si no la de él, no debo ni nombrarlo. Ustedes ya saben a quien me refiero.

Entregue la tarea y luego espere en mi asiento a que sonara el timbre. Al escuchar el característico sonido que indicaba que era el receso guarde todo en mi mochila y salí  caminando hacía mi casillero.

Necesitaba tener un día normal. Por lo menos solo por hoy.

- Hola Fea - escuché la irritante voz del playboy y rodé los ojos en modo de fastidio.

- Tú presencia me arruina la estupenda mañana que iba teniendo - dije sin mirarlo, a continuación cerré mi casillero y comencé a caminar.

- Tú siempre tan adorable - bromeó siguendome.

- ¿A qué debo tu presencia?

- Bueno solo quería pasar a saludarte - me sorprendí al principio, pero luego lo tome como un chiste.

- Okay... que bueno, ya lo hiciste ahora ya te puedes ir.

- ¿Por qué eres tan mala conmigo Allison? - paré repentinamente haciendo que Alex choqué conmigo.

- ¿Yo? ¿Mala? - reí - así es como me comporto con la gente que no me importa.

- En serio me dolieron tus palabras - llevó su mano a su pecho - pero haré como que no te escuche.

- ¿Ahora eres sordo? - pregunté con ironía.

- Eres cruel Allison White.

- Cruel es bueno - contesté sonriendo.

- Irónico ¿no?

- ¿Qué es irónico? - inquirí.

- Amar a quienes nos destruyen... - nos quedamos en silencio

- Que suerte que a mi no me sucede.

- Claro.

- Es verdad lo que te digo.

- Lo sé - contestó a la misma vez que llegabamos a la biblioteca.

- ¿Y cómo se encuentra Jennifer? - pregunté con malicia.

- Muy bien, esta hermosa.

- ¿Y la a compañaste a ponerse nuevas extenciones? - sonreí.

- ¿Debo reírme?- me miro serio - para mi tu estas celosa.