-Hermanita, hermanita ¡Despierta! No te mueras... ¡n..n..no me dejes solo!- grita un pequeño niño a su hermana la cual estaba tirada boca abajo, el niño la mueve intentando ver si reaccionaba, era la octava vez que su padrastro la tocaba y golpeaba por no dejarse.
-M... me duele...- abre los ojos y ve a su pequeño hermano llorando, este la abraza con todas sus fuerzas.
-¿Fue papá cierto?- la pequeña trata de tranquilizarlo tomando su mano.
-No... so...solo me caí y me pegué en la cabeza- trata de levantarse, evita llorar por los dolores de los golpes provocados por aquel hombre.
-¿Mamá dónde está?- el niño se queda callado por unos segundos.
-Salió a trabajar al bar hace unas horas- la niña golpea su cabeza al saber eso, escucha el sonido de la puerta abrirse.
-¡Mocosa!- era la voz de la madre quién venía furiosa.
-Es hora de jugar a las escondidas en el sotáno hermanito, cuento hasta diez y tienes que llegar allá y cubrir tus oídos- cierra sus ojos y empieza con el conteo, al abrirlos ve a su madre enfrente y esta la abofetea con fuerzas tirándola al suelo, la pequeña trata de levantarse pero la madre se lo impide.
-Te dije que limpiaras la calle, por eso tu padre me llamó y se volvió a ir de casa ¿Ahora quién va a traer dinero a casa? Eres una maldita, por tu culpa estoy así, tu padres nos abandonó ahora- le suelta varias patadas en la espalda, evita llorar y gritar por su pequeño hermano.
-Ese... ese hombre no es mi padre...- menciona casi en susurro.
-El te ha criado desde bebé ¿Así agradeces?- jala de sus cabellos con fuerza.
-Deja de drogarte y buscar un buen empleo...- rompe en llanto.
La madre se hecha a reír y se sale de casa en busca del hombre, a los minutos sale el pequeño de su escondite y ve a su hermana sentada con las rodillas arriba cubriéndose el rostro.
-¿Hermanita por que no me has buscado?- esta se seca las lágrimas antes de levantar el rostro.
-Estaba aún contando ¿No ves?- intenta sonreír y su hermano la abraza.
-Entonces perdí...- se escucha que alguien toca la puerta y tras el toquido las voces de unos niños pequeños gritan.
-¡Yuni! ¡Jinkyu! Vamos a jugar- el pequeño sale disparado a abrir la puerta, entran a la casa formaditos en fila; Inseong entra cargando en brazos a Chani quién quería bajarse a jugar con su osito de peluche, Hwiyoung estaba dando sus primeros pasos gracias a la ayuda de Youngbin, este ve a Yuni con golpes en el rostro pero se queda callado para no alarmar a los demás, Zuho y Dawon peleaban por unos dulces, Taeyang y Jaeyoon conversaban sobre las clases.
-¿A que vamos a jugar?- Pregunta Yuni bajando del sofá.
-A la mamá, te toca cargar a Chani, me dijo mamá, la tía se emocionó al escucharlo decir mamá- Inseong le pasa a Chani y esta le hace caras para que se ríera.
-¡Mamá!- grita Chani y Yuni sonríe.
*Años más tarde*
-Cantan feo, pero siento que aún falta más, nunca llegarán a ser famosos- menciona un chico alto, este sonríe al ver a una chica con ellos.
-¿Qué te sucede? Solo cantamos e improvisamos para ganar dinero para comer, niño con tenedor de plata- menciona Yuni, este sonríe de lado.
-Una señorita como tú no debería de comportarse así- mueve su mano, esta molesta se acerca a él y le da un golpe con el puño cerrado en el estómago, los chicos observan, uno de ellos se acerca abrázandola y alejándola de él.
-Maldita pobretona- toca su estomago y tose, un hombre se acerca a ellos y coloca sus manos en los hombros del chico.
-Te dije que observaras talento y ahora buscas conflictos- menciona aquel hombre.
-Lo siento señor- el señor sonríe a los chicos.
-Los escuché y saben, me agradó escucharlos, estoy en busca de talento, creo que lo he encontrado y son ustedes- cada uno de los chicos se observan confundidos.
Los días pasaron, la fecha para ir a una dirección que marcaba una tarjeta que les entregó aquel hombre estaba a unas dos horas, todos los chicos se reunieron, solo faltaba Yuni, esta le había mencionado a su hermano que los alcanzaría después de salir de trabajar, ir a casa y bañarse; se encontraba tomando la ducha cuando el sonido de la puerta se hizo presente, sabía perfectamente la hora de llegada de su madre, se horrorizó al ver a su pesadilla en la puerta del baño, el hombre cierra la puerta y esta grita asustada pero nadie la socorre, los chicos volvieron felices y con la gran noticia de que fueron aceptados para asistir a clases y después debutar en grande como grupo; al llegar a casa todos observaron a Yuni golpeada del rostro Jinkyu se acerca asustado al ver a su hermana así.
-¿Qué pasó?- esta lo observa evitando llorar.
-Me resbalé en el baño y no pude asistir a verlos, lo siento mucho- ella sabía perfectamente que si les contaba lo ocurrido, en ese momento saldrían a buscar aquel hombre ñara matarlo a golpes entre todos.
-¿Pero estás bien? ¿Cierto?- menciona Chani preocupado, Inseong va a la cocina de su casa por un poco de hielo, a los minutos llega él y su madre con un botiquín.