Papá (Harry Styles)

Capítulo 7.

Me encontraba con Gemma y Lou disfrutando del concierto de los chicos, con la compañía de técnicos de sonido y demás. Era la penúltima canción según nos habían dicho y creímos oportuno volver al hotel antes de que acabaran su espectáculo por motivos de seguridad.

Mi pequeña se encontraba profundamente dormida entre mis brazos mientras la mirada de Gemma se posaba en ella. La miré y me sonrió.

- ¿Puedo cogerla? - me dijo algo insegura, como lo hacía su hermano frecuentemente. Yo tan solo asentí con una sonrisa en mi cara mientras con cuidado de que Noa no despertara aquella chica la cogía en brazos - debe ser complicado con tu edad tener que cuidar a una niña tan pequeña.

Mi mirada se dirigió a Lou y sonreímos las dos.

- Lo es - Gemma acariciaba la mejilla de Noa - pero ahora mismo no cambiaría por nada el tener que hacerlo - ella asintió y segundos después Lou empezó un nuevo tema de conversación.

Llegamos en pocos minutos al hotel y Lou se despidió de nosotras porque parecía realmente cansada, mientras Gemma y yo nos dirigimos a la habitación de Liam. Tampoco sabía muy bien donde iba a dormir esa noche y no quería que Gemma se sintiera incómoda por ello. Aquella chica tumbó a Noa en una de las camas para después dirigirse junto a mi a la puerta de aquella sala, sentándonos justo en la entrada, manteniendo la puerta un poco abierta.

- Me gusta que hagas feliz a mi hermano - esas palabras provocaron que empezara a jugar con los dedos de mis manos - las dos le hacéis ser él mismo y necesitaba ser así desde hacía tiempo.

- Él provoca lo mismo en mi - asintió - creo que no me veo sin él ahora mismo, el estar distanciados tanto tiempo ha hecho que me diera cuenta, aunque la verdad creía que no íbamos a arreglarlo ya.

- Si dos personas se quieren como lo hacéis vosotros es imposible que estén separadas - yo solo la escuchaba mientras me daba su opinión - y seguramente no te lo habrá dicho pero él también se dio cuenta de eso - se giró hacia mi y me apuntó con el dedo divertida - lo que pasa es que sois unos orgullosos, en eso os parecéis demasiado.

Reí porque tenía razón, el orgullo estaba consiguiendo distanciarnos. Los minutos pasaban y los chicos seguían sin aparecer.

- ¿Crees que tardarán mucho en venir? - me preguntó mientras apoyaba su espalda en aquella pared - estos días siempre me he quedado dormida esperando a mi hermano - sonreí.

- ¿Tienes sueño? - ella asintió - puedes irte a descansar, yo creo que haré lo mismo, ha sido un día largo el de hoy - las dos nos levantamos para después despedirnos.

Entré en aquella habitación y me cambié de ropa para estar más cómoda, cogiendo mi móvil antes de dirigirme a aquella gran cama junto a Noa. Dejé aquel dispositivo en la mesita de noche y cerré mis ojos lista para dormirme profundamente.

Segundos más tarde pude notar, aún algo dormida, como habrían la puerta y entraban en aquella habitación. Liam intentaba no hacer ruido mientras se deshacía de su ropa, pero aquel intento fue bastante fallido. Me incliné hacia delante sentándome en aquella cama, dándome cuenta así que aquella persona no era mi hermano.

Froté mis ojos y reí observando aquella imagen. Harry se dirigió hacia mi antes de deshacerse de su camiseta.

- ¿Creías de verdad que iba a dejarte dormir con tu hermano después de un mes y medio sin vernos? - dijo antes de tumbarse en aquella cama y acercarse a mi. Sus manos rodeaban mi cintura y un inocente beso se posó en uno de mis hombros.

- No sabía cuando llegaríais - dije antes de girarme y quedar frente a él - tampoco quería que fuera incómodo para tu hermana.

- ¿Para mi hermana? - asentí y rió aferrándome a él - mi hermana sabe ya que no soy un niño - suspiré y rodé los ojos haciendo que empezara a reír. Dirigí una de mis manos a su boca, tapándola.