I'm a Girl (Malec)

Capítulo 8

¡Que viva el amor del duro! 7u7

-¿Todo, absolutamente todo, ha cambiando en ti?-Preguntó señalándola de arriba abajo.

Magnus asintió.

-Absolutamente todo. ¿Quieres tocar?-Preguntó señalando uno de sus pechos. Izzy alzó una mano apretando con los dedos el pecho de Magnus.

-Que suaves y están firmes.

Magnus se sentó a su lado ante la atenta y perpleja mirada de Alec.

-Espera, el sujetador engaña.-Dijo Magnus con una sonrisa. Eso lo había comprobado como hombre y ahora como mujer. Se quito la camiseta y luego el sujetador, dejando al aire sus pechos.

-¡Vaya! Son muy monos. Aunque tienes la aureola muy pequeña.-Opinó Isabelle.

-¿Tú crees?-Magnus se los miro.- Yo creo que es un tamaño adecuado, tampoco es que los vaya a lamer alguien más que Alec.

La cabeza de Izzy giró como un resorte, clavando sus negros ojos en su hermano que parecía estar en otra galaxia.

-¡¿Ha habido sexo?!

Alec parpadeo un par de veces antes de mirarla.

-¿Dónde?-Cuestionó el moreno.

-¿Os habéis acostado?-Preguntó esta vez mirando a Magnus, pues al parecer su hermano estaba en Júpiter.

-Sí, unas tres veces.

-¿Y cómo fue?

-Yo me divertí.-Aseguró Magnus.

-¿Alec?

Alexander estaba demasiado ocupado fijado su mirada en los pechos de su novia. Eran redondos y de color caramelo, eran lo suficientemente grandes como para hipnotizarlo y lo suficientemente pequeños como para que cupiesen en sus manos. La aureola era oscura, y para él tenía el tamaño perfecto, haciendo un perfecto circulo alrededor de los pezones, también oscuros.

-Yo diría que él también.-Rió Magnus.

***

Isabelle miró a Magnus. Lucía un increíble vestido violeta, con encaje en la encaje superior del cuerpo tapando únicamente lo necesario. La cola comenzada en la cadera, marcándola con una curva de vértigo. Era de vuelo y tenía una raja en un lateral permitiendo ver una infinita pierna color miel. La pantorrilla estaba decorada con cadenas de plata y cristales. Todo eso acompañado por unos zapatos de tacón altísimos de color plata, a juego con la cadena de la pantorrilla y la lágrima que colgaba de su frente.

-¡Wow! Estas de infarto.

-Siempre querida.

El timbre del loft sonó e Izzy salió corriendo para abrir a su novio. Simon le dio un corto beso en los labios, llevándose algo de carmín.

-¡Estas preciosa! Aunque eso no es una novedad.

Izzy rio.

-Y tú estás muy apuesto.

Tomados de las manos caminaron hasta la sala. Simon frunció el ceño al ver una mujer allí. Llevaba un vestido especular, el pelo largo y negro suelto en ondas y con pequeños toques de tinte morado. Miró a Izzy que se fue a la habitación de Magnus y Alec, para ver si este último necesitaba ayuda con algo.

-Emm... Hola.-Saludo Simon.

La mujer giró la cara y lo miró. Era extremadamente preciosa y la sonrisa que se había dibujado en su cara lo aseguraba aun más.