Idealizame. [Kunikida Doppo x Tú]

Primer latido.

-¡...(N)!
-Ah, Naomi.
-¿Nos vamos ya a la agencia?
-Si, debo entregar estos cuadernos al profesor ¿te alcanzo en la entrada?
-Claro.
-Bien, entonces iré rápido.

Mi nombre es ...(N), soy estudiante de preparatoria y tengo un trabajo de medio tiempo en una agencia junto con mi compañera y amiga Naomi. Es una agencia de personas con habilidades y por habilidades me refiero a poderes. Cuando llegué pensé que no podría adaptarme como debía pero con el tiempo fui comprendiendo que es un buen lugar y que sólo era tiempo el que necesitaba para acostumbrarme.

Después de ir a dejar los cuadernos me reúno con Naomi en la entrada para ir a la agencia y entonces nos dirigimos hacia allá.

-¿Te ocurre algo? -dice Naomi.
-¿Eh? ¿porqué lo dices?
-Has estado un poco desanimada hoy.
-Ah, si, es sólo que..
-¿Qué?
-Los exámenes de matemáticas son lo peor ¿sabes?
-Ahh, así que era eso.
-Aunque intente de estudiar y comprender, no puedo.
-Mhh..
-¿Qué pasa?
-¡Ya sé!
-¿Qué? 
-Kunikida-san.
-¿Kunikida-san?
-Él fue profesor de matemáticas hace mucho ¿sabías?
-¿De verdad?
-Si, deberías pedirle ayuda.
-¿Crees que me ayude?
-Ah.. no lo sé, pero no sabrás si no lo intentas ¿no?
-Cierto..

Cuando llegamos está Dazai-san y Kunikida-san en la oficina, les saludamos y pasamos a terminar un poco de papeleo que nos quedó de ayer.

-Deberías ir ahora a decirle, ...(N).
-¿Ahora?
-Si, puede que después salga, ve, ve.
-Pero, tenemos mucho trabajo aún.
-No te demoraras mucho, anda.
-Está bien, está bien, iré.

Dejo los papeles sobre la mesa y voy a donde está Kunikida-san, observó unos segundos como teclea en el computador y noto que Dazai-san ya no está entonces me acerco un poco a él.

-Ku-Kunikida-san.
-¿Si? -dice sin mirarme.
-¿Puedo pedirle un fa-favor?
-¿De que trata?
-Esto, los exámenes de matemáticas son bastante difíciles y yo.. supe que usted fue profesor enton-
-¿Quieres que te ayude?
-Ah, si, si no es mucha molestia. -susurro.
-No lo es.
-Gracias.

Él levanta su mirada hacia a mi y me entrega unos papeles.

-Lleva eso y lo guardas en la carpeta número tres.
-Si.
-Ah, muchacha.
-¿Si?
-Me dices cuando quieres empezar las clases ¿bien? para anotarlo.
-Claro, espero que no interfiera mucho en sus planes.
-Si lo anoto no habrá problemas.
-Claro, entonces, muchas gracias Kunikida-san.
-Está bien.

Me alejo de él y vuelvo a observarlo por un momento desde la puerta que da a donde está Naomi, espero que su ayuda en esto de frutos en los exámenes. Entro a la oficina y dejo los papeles que me dio en la carpeta.

-¿Y bien, que dijo?
-Dijo que si.
-¿De verdad? que alegría.
-Si..
-De seguro te irá bien con su ayuda.
-Eso espero, me esforzaré.

El día de trabajo termina y yo estoy guardando mis cosas cuando siento a alguien abrir la puerta.

-Ah, Kunikida-san, pensé que ya no quedaba nadie.
-Debo cerrar la agencia, esperaba a que terminaras pero estás demorando bastante.
-Ah, lo siento, es solo que pensé que sería bueno ordenar también las carpetas de acá abajo.

Abro la puerta del mueble para mostrarle y él se acerca para ver.

-Quedo bastante ordenado, te felicito.
-No es nada, es mi trabajo después de todo.
-¿Entonces ya acabaste?
-Si.
-Bien, vamos entonces.
-¿A do-donde?
-Es tarde, puedo pasar a dejarte a tu casa.
-N-no es necesario, Kunikida-san.
-Lo es, vamos, estamos perdiendo minutos.

Él sale de la habitación y yo tomo mi bolso para salir detrás de él. Salimos de la agencia y espero a cerca del auto a que él cierre.

-La noche será helada. -susurro.
-¿Dijiste algo?
-Ah, no..
-Estoy seguro de que sí.
-Ah.. solo decía que está noche será helada.
-Es cierto, bien, entremos.