Idealizame. [Kunikida Doppo x Tú]

Quisiera ser.

-Kuni.. ahh..

Mi cuerpo está tembloroso, mis manos están aferradas a su cuello y cierro mis ojos cada vez que sus labios tocan los míos.

-Voy a mo...verte.

Toma mis muslos y los coloca hacia el lado, uno encima del otro, vuelve a entrar en mi, suelto mi voz cuando lo hace pero tapo mi boca por la vergüenza, besa mi hombro y apoya su frente en él, sus embestidas son suaves y lentas.

-Lo siento -susurra. -ya no... aguanto más.

Con una de sus manos aprieta mi muslo, miro su expresión de reojo, su boca está entreabierta y su respiración es cada vez más intensa, derrepente sus embestidas son más profundas hasta que se detiene y saca su miembro de mi.

-Po-por favor.. no lo saque.. -digo. -abraceme.

Mis palabras son tan impropias de mi pero cuando se trata de Kunikida-san solo puedo pensar en no querer soltarle más, quiero poseerlo, hacerlo solamente mío y que nadie más pueda tenerle, me he vuelto muy egoísta.

Sus brazos me rodean y me aprietan suavemente, besa mi cuello y yo entierro mis uñas en su espalda al sentir un calor dentro mío.

-L-lo amo. -susurro.

Mis piernas caen por sus costados y él relaja su cuerpo sobre el mío, su peso me hace sentir tan protegida, estar de ésta forma con él es como un sueño que nunca pensé que pasaría.

-¿Te hice daño? -dice.
-No, claro que no.

Levanta su cuerpo después de un rato y se recuesta a mi lado, su cabello largo está sobre su pecho, tiene sus ojos cerrados y la poca luz que entra por la ventana me dejan ver su perfil por completo.

-Esto.. -susurra.
-¿Eh?
-Esto no está bien. -dice.
-¿Que? -digo levantando mi cuerpo.
-Eres una niña y yo soy un hombre adulto..
-N-no diga eso.
-Vas a crecer y te darás cuenta que solo fue algo pasa-
-No lo diga, ni se le ocurra.. decirlo.

Un nudo comenzó a ponerse en mi garganta, después de que le entregué mi cuerpo y mi alma me dice algo como esto, me parte el corazón, porque eso es lo único que estoy diciendo.

-Muchacha. -dice sentándose a mi lado.
-Usted.. ¿solo quería esto? -digo mirándole.
-...
-¿Solo quería tenerme?
-No es así.
-¿Entonces, entonces porque dice que esto no está bien?

Miro sus ojos y siento como mis lágrimas comienzan a brotar, mis manos aprietan la cubierta de el futon.

-No llores. -susurra.
-Usted.. tiene la culpa.
-Debes entender.
-No.. ¡no! ¿por que ahora, por que no antes de que me entregara a usted?

Él acerca su mano a mi rostro pero yo me aparto, me levanto y comienzo a ponerme mi ropa.

-Lo siento, ni siquiera debí.. -dice.
-Solo.. no diga más.

Escucho como se levanta y viene hacia a mi.

-No irás a ningún lugar.. -estira sus brazos pero no toca mis hombros. -veré si puedo dormir en otro lugar, tú te quedarás aquí.
-Déjeme ir.
-Quedate aquí ¿si?

Desvío mi mirada de sus ojos porque me causan solo dolor. No puedo creer que mi cuerpo y mi alma hayan tenido su primera vez con él, la felicidad que sentí al saber que le quería y que él a mi de la misma forma pero ahora quisiera nunca haber tenido nada que ver con él, es como si hubiese sido utilizada.

-¿Lo harás? -dice.

En silencio me recuesto sobre el futon y me tapo con el, escondo mi cabeza y tapo mi boca para que no escuche el llanto que comencé a soltar sin querer.
Escucho como se pone su ropa y abre la puerta.