Capitulo 4.- Dos glorias (Parte 1)

396 19 3
                                    

Queridos niños, aquí les dejo una parte de este el cuarto capitulo de mi pequeña historia. Espero que lo disfruten tanto como a mi me frustro escribir las pocas palabras dispersas que tengo en la cabeza.

Algunos temas escolares sumados a unas practicas forzosas que hace un par de semanas estoy realizando no me dejan escribir a mis anchas, les juro que eh llegado con la mente llena de ideas y en el momento que me encuentro frente al computador todo se elimina automáticamente, escribo un par de palabras, unas cuantas oraciones y ya no doy para mas.

Debo admitirlo: Estoy pasando por una crisis existencial.

Pero no por ello dejare de hacer esto que tanto amo, que es escribir.

Respecto al capitulo... Pues... Ya sabrán por que se llama "Dos glorias"

Les dejo una canción que hoy me prendió lo suficiente para merecer encontrarse aquí.

"No sirve de nada" de Ricardo Arjona.

Besos y abrazos.

Luc <3

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------


Debo admitir que sentí una gran decepción al no escuchar alguna pregunta de Daniel sobre Lalo, ni siquiera algún reclamo por la dichosa apuesta; no esperaba que fuera de chismoso, pero sí que le comentara para que me convenciera de cumplir con lo prometido.

Por otro lado, las cosas no iban mejorando tan rápido como se me hubiese antojado, no me quedaba otra alternativa más que un progreso lento pero seguro.

Mayo comenzó con un calor insoportable y las vacaciones llegaron a su fin, y con ello el temor de los alumnos de último año: La graduación.

Cada aspecto de la gran ceremonia se revisaba minuciosamente con la finalidad de que todo saliera de acuerdo a lo según planeado por la dirección, lo cierto era que poco me importaba en aquellos instantes.

Al recibir la invitación formal para la glamurosa ocasión tuve una pelea interna con aquella que deseaba ver a mis padres juntos o aquella que se estaba decepcionando de mi padre.

Gano la parte que los quería juntos, después de todo eran mis padres y no se podían negar.

Guarde el elegante sobre y le llame a mi padre para pedirle que fuese esa misma tarde a la casa.

Triste mi sorpresa cuando no se presentó. Llore cuando no me respondió el teléfono esa noche. Me moleste cuando me reclamo por no decirle el motivo de la convocación.

Ellos habían acordado que los domingos serían los días que pasaríamos junto con mi padre, de nada servía tenerlo en casa a las cuatro de la tarde cuando la cita era a medio día; desatención que compensaba con dinero y más regalillos.

Cuando la inestabilidad de mis padres fue excesiva, solo deje el sobre en la mesa en espera de ser encontrado por alguien a quien le interesase.

-¿Por qué no nos habías mencionado la clausura?- Mi madre entro de golpe en mi habitación reclamándome a gritos por no haberle enterado.

Amor Puro: Un juego de niños (Yuri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora