Otorgadores

ZHUI Y FHREI

Sigo a Scarlett durante varios minutos, en un silencio absoluto. Ella lleva manchado su uniforme y esta rasgado en los bordes, es el mismo que llevaba aquel dia en el centro comercial, solo que hoy esta sucio. Nos hemos cruzado con varios de su ejercito a nuestro paso, algunos la saludan, otros solo asienten al verla pasar, solo los mas pequeños se acercan a ver su estado, llego a pensar que la idolatran.

-Necesito llegar a los cuarteles primero.

-Yo no tengo acceso alli.

-No te preocupes, despues de lo de hoy lo tendras.

Acaso aqui todos quien verme confundida? Son tantas preguntas, todas sin respuestas. A lo lejos, veo como algunas llamas siguen alzandose mientras que cortinas de humo corren y barren todo el lugar.

Scarlett se detiene en seco frente al cuartel, esta intacto al parecer y su suspiro de alivio me parece reconfortante de una manera extraña. Escribe un codigo seguido de su scanner ocular, y las puertas se abren dejando salir un poco de aire acindicionado y un olor a limpio. Aqui dentro todo es como cualquier instalación del exterior, paredes y puertas de vidrio, piso oscuro, plantas en cada esquina, etc.

-Tardare un minuto, despues podre responder todo lo que quieras.

Asiento suavemente, aun mi cabeza esta recordando el momento de mi ataque y siento que estoy teniendo una pesadilla. Todos se mueven rapidamente aqui, algunos hablan despacio, otros llevan comunicadores, quisiera poder escucharlos pero me siento agotada fisica y mentalmente. Me dejo caer en un sofa y me permito cerrar los ojos, sintiendo como caigo en un sueño profundo y mis musculos se relajan en el mullido mueble. Al poco tiempo, o quiza han pasado horas, alguien me sacude un poco y posa sus dedos en mi barbilla, los siento huesudos y frios.

-Dices que tiene material para ser ejemplar?-la voz apagada de una anciana llega a mi.

-Quiza pueda ser mas que eso -dice otra, un poco mas fuerte - lo siento en mis huesos.

-Creo que ella puede ser la indicada- ahora es la voz de Scarlett la que habla.

Abro mis ojos y veo como tres pares de ojos me observan fijamente. Efectivamente, dos ancianas encorvadas y con cabello blanco estan a cada lado de Scarlett. Se ven delicadas, fragiles y cariñosas, pero algo en ellas me da a entender que no es realmente asi.

-Oh, ya se desperto.

-Qui...quienes son?

-Renee, permiteme presentarte a Zhui y a Fhrei.

Las dos ancianas me dedican una sonrisa mientras ambas me tienden la mano. Esos nombres me resultan familiares, un lugar en mi mente trata de recordar en donde he escuchado esos nombres. Parece que si tengo razón ya que las tres me estan mirando y esperando a que diga algo.
Al dejar de ver como Scarlett trata de hacerme señas con la cabeza, observo a la primera anciana. Tiene el cabello suelto, blanco hasta los codos, su piel es oscura y esta encorvada, su ojo izquierdo es blanco mientras que el derecho es negro. La segunda anciana tiene el cabello recogido en un lazo, tambien es blanco y su piel es un poco mas clara, su ojo derecho es blanco y el izquierdo es negro. Por un segundo me parecen hermosos pero en ese momento mi cerebro hace click.

-Ustedes dos son... son ustedes?

Ambas se miran y sonrien placidamente, luego miran a Scarlett y le hacen una señal.

-Si, somos nosotras.

Zhui y Fhrei son leyenda, ellas son las Primeras en Otorgar. Pero hace falta una mas, Thyren, la tercera del grupo.

-Te sientes bien para tener una conversacion con nosotras? O quieres ir a descansar?

-Lamento mucho lo que hice... no sabia...

Me miran con lastima y asienten, se que van a regañarme por haber matado a aquellos chicos, pude haber herido a alguien mas y no me resguarde como me habian ordenado.

-No vamos a regañarte, al contrario, estamos agradecidas por haber ayudado.

Comienzan a caminar mientras Scarlett espera a que decida si voy o no con ellas. Las cuatro caminamos hacia una sala apartada de los demas, yo voy siguiendolas mientras me siento afortunada de tenerlas frente a mi, asustada un poco por lo que tendran que decirme. Scarlett ingresa otro codigo y la sala se cierra, dejandonos solo a las cuatro sin los ruidos de afuera.

-Renee, necesitamos hablar contigo, asi mismo responderemos a todo lo que quieras saber.

Me siento en una silla con un respaldar bastante comodo, y observo a ambas ancianas, aun no se como diferenciarlas.

-Yo soy Fhrei -dice la de cabello mas largo. - por lo tanto ella es Zhui, y Scarlett viene siendo la aprendiz de Thyren.

Mi mandibula se desencaja, aprendiz? Que ella no es una Maestra?

-Antes de comenzar a explicarte todo, necesitamos que entiendas, que a partir de hoy ya no eres una simple cadete -Zhui habla muy despacio.

-Ahora ya eres parte de un grupo llamado "Aprendiz para Maestro"

Mi cara de confusión debe dejarles saber que no estoy entendiendo nada de lo que dicen, y es cuando Scarlett decide sentarse frente a mi silla y mirarme tan neutralmente como siempre mantiene su mirada.

-Has demostrado que tienes habilidad para desarrollar los sentidos aun sin llegar al limite establecido, por eso pasas a "graduarte" y tomar clases privadas con nosotras.

-No entiendo! -Estallo - aqui todo es secreto, nunca hablan con claridad, acaso es una clase? Hablar enigmaticamente? Que paso alla afuera?

Mi voz retumba por la sala y una risa nerviosa se escapa de mi.

-Calmate cariño...

La voz de Zhui es tan baja que casi no puedo escucharla, alzo la vista y veo como las tres estan listas para atacarme si llego a perder el control.

-Aun no controlas tu voz ni lo que haces, no somos enemigas. -Fhrey ha bajado la guardia y vuelve a sentarse.

Scarlett no me quita la mirada de encima, sigue estando en posicion de ataque y eso me hiere un poco, deben de verme como un mosntruo. Empuño mis manos a mis costados y trato de respirar mas despacio, necesito respuestas y hoy las voy a conseguir pero para eso debo demostrarles que no me volvere loca y dañar todo.

Zhui se sienta en una silla al lado de Fhrey y Scarlett se relaja un poco.

-Quieres escuchar la historia ahora o quieres hacer preguntas para no entender nada de las respuestas?

Scarlett en serio no es muy amigable y su honestidad puede ser brutal a veces, solo llevo unos minutos con ella y me he dado cuenta.

-La historia.

Ambas ancianas se sonrien entre ellas y se corren un poco hacia mi para comenzar lo que finalmente he estado esperando saber.