July 17th [NamJin]

«17072004»

《➶》

— ¿Ya terminaste? Jin, ¡apúrate, por favor! Te ayudé a cargar casi todo y te demoras tanto con unas simples cajas, el chofer del camión ya se va a ir, y yo también tengo que hacerlo, ¡mi vuelo sale en tres horas! —gritaba un poco histérico NamJoon.

— Ya, sí, ya voy.

SeokJin había estado, de forma muy calmada, preparando y echando sus cosas en cajas, ya que se iba a mudar a otro departamento un poco menos desgastado, pero a pesar de todo, estaba feliz porque le quedaba un poco más cerca de la Universidad e iba a vivir nuevamente con su mejor amigo, con JiMin.

Por otro lado, cuando fue la graduación de la Escuela, NamJoon logró conseguir una beca para ir a estudiar a Inglaterra, ya que desde siempre le había interesado el idioma de ese país. Ya llevaba un año estudiando allá, pero venía siempre que podía a Seúl. Él sentía que no podía dejar de lado a sus familiares, ni mucho menos a sus amistades.

El castaño -al fin- apareció cargando sus dos cajas más preciadas, las echó al camión y se fueron a lo que sería el nuevo departamento. Al llegar, se encontraron con JiMin, quien ya estaba desempacando todas sus cosas mientras YoonGi le ayudaba.

NamJoon ayudó a bajar los muebles pesados del camión lo más rápido que pudo, ya que quedaba poco tiempo para que se tuviera que devolver a Inglaterra.

— ¿Quieres que te acompañe al aeropuerto como siempre? —preguntó SeokJin, aunque ya sabía la respuesta.

— Claro, pero vamos rápido, sólo me queda una hora. No puedo creer que te hayas demorado tanto en empacar dos pequeñas cajas. —reclamó el rubio.

— ¿Sabías que los libros necesitan ser bien cuidados?

— Sí, sí, ¿vamos ya? —pidió NamJoon, recibiendo un golpe en su hombro.

— Eres un completo desconsiderado. —dijo a modo de broma SeokJin.

YoonGi y JiMin ya habían terminado de descargar y desempacar las cosas del último, así que ambos se acercaron y se despidieron de NamJoon con un afectuoso abrazo, ya que no sabían hasta cuándo lo volverían a ver. SeokJin se acordó de algo, así que fue a lo que se podría llamar cocina, hizo el sándwich de pollo que siempre le daba a NamJoon cuando viajaba, lo guardó, tomó su celular, un poco de dinero para el autobús y ambos se fueron a la parada de autobuses.

NamJoon seguía pareciendo un verdadero histérico, ya que por culpa de SeokJin casi siempre terminaba llegando cuando faltaban apenas diez minutos para que el avión despegara. Ambos se habían subido al transporte apenas llegaron a la parada, se bajaron a los quince minutos después, y caminaron con prisa.

— ¿Te puedes apurar? Jin, por favor, siempre me haces lo mismo. —replicó NamJoon cuando entraron al aeropuerto.

— Y tu siempre eres tan amargado. Mira, ¡aún faltan treinta minutos! Vamos, no corras, me canso muy rápido, Joonie. 

— ¿Joonie? Sólo mi mamá me dice así, Jinnie. —recalcó NamJoon la última palabra como si fuera un tipo de venganza.  

— ¿Jinnie? Qué triste, a mí nadie me ha dicho así. —dijo SeokJin, haciendo ademán de secarse una invisible lágrima.  

— Encantado de ser el primero entonces.  

El castaño paró su andar de repente, aunque siguió unos segundos después porque ya no le impresionaba mucho que NamJoon le dijera esas cosas. Desde que se habían conocido que se trataban así, con indirectas que nunca han sido lo suficientemente directas. O ellos no han querido captarlas. 

— Rogamos a los pasajeros del vuelo Al1132, con destino a Inglaterra, que se presenten en la puerta de embarque lo más pronto posible. Gracias. Rogamos a los pasajeros del vuelo Al1132, con destino a Inglaterra... —se escuchaba por los parlantes.  

— Supongo que ya debes irte, NamJoon.

— ¿NamJoon? Me gusta más "Joonie" ahora. Y sí, debería hacerlo. 

— Avísame cuando llegues, como sea pero hazlo, ¿sí, Joonie? 

— Te avisaré, siempre lo hago, no deberías preocuparte por eso. Nos vemos en unos meses más, Jinnie. 

Ambos estaban frente a frente, NamJoon sostenía con una mano una pequeña maleta y con la otra sostenía la mano de SeokJin. La cercanía entre ellos siempre había estado, pero ninguno de los dos quería interpretarla de otra forma por el simple miedo de no ser correspondidos, o de arruinar esa tan bonita amistad que habían formado en apenas un año debido a esa promesa que hicieron en el puente. Finalmente, se abrazaron con todas sus fuerzas, se acariciaron sus cabellos y se susurraron un par de cosas.  

— Estoy seguro que este semestre seguirás esforzándote para lograr ser un profesor de Inglés, Joonie. Mucho éxito en todo. 

—  Gracias, y yo estoy seguro que este año vas a encontrar a alguien. —dijo NamJoon con un poco de tristeza, pero estaba convencido que su mejor amigo era alguien que se merecía lo mejor del mundo. 

— No creo, y tampoco me interesa hacerlo. Y ten, ¡para que no te dé hambre durante el viaje! —exclamó SeokJin, disolviendo el abrazo y cambiando de tema para entregar el sándwich. 

— Gracias, y espero con todas mis fuerzas que tu también te esfuerces para sacar esa carrera de Gastronomía adelante, ¡todos deben saber que cocinas de maravilla! Hasta pronto, Jinnie. 

— Hasta pronto, Joonie.  

Y NamJoon se fue, mostró su boleto y se encaminó por un largo pasillo, pero cuando iba a mitad de éste se dio la vuelta -como siempre lo hacía-, y vio que SeokJin lo miraba con cierto brillo en los ojos, se sonrieron e instintivamente levantaron uno de sus brazos para mover su mano a modo de despedida. Aquello era lo que siempre hacían en el aeropuerto desde que NamJoon había comenzado a estudiar.