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El día había terminado antes de que pudiesen darse cuenta. Esa misma noche tanto Shigeo como Ritsu y Hoyuelo no pudieron conciliar el sueño, cada uno por diferentes razones. El sol había anunciado el amanecer de un nuevo día, pronto la alarma sonaría y de esa forma los hermanos Kageyama comenzarían a alistarse para ir al instituto. Faltaban 10 minutos, casi nada para que la alarma despertara al hermano mayor de su agradable sueño. Un pequeño ruido se presentó dentro de la casa, una de las puertas de las habitaciones estaba siendo abierta y era la de Ritsu. El menor de ambos se había alistado antes de tiempo y todo por que no había podido dormir, se quedó en vela mirando al techo o simplemente tratando de dormir, lo cual no logró durante toda la noche. Al estar listo antes de los 10 minutos de que el contrario se despertara decidió tomar sus cosas y encaminarse a la puerta de entrada.

Ritsu, ¿a dónde vas? .—Una voz lo detuvo cuando finalmente había logrado abrir la puerta—

Pensé que estabas cuidando de mi hermano... —Ni siquiera le volteó a mirar—

Si lo cuidaba, pero escuché un ruido y vine a confirmar mis sospechas.

Hoyuelo... quería decirte algo .—Bajó la mirada al suelo—

¿Qué pasa?.

Lo pensó por unos minutos, era como si no estuviese seguro si decírselo o no. Soltó un pesado suspiro y decidió no decir nada respecto a eso.

Olvídalo. Solo... vuelve con mi hermano .—Salió finalmente de casa pero antes de cerrar la puerta decidió agregar algo más— Y... si pregunta por mí dile que tenía que llegar para pasar unos apuntes.

Si, esa era la única excusa que podía pensar. Hoyuelo sin tener de otra solo asintió mientras dejaba ir al menor. Nuevamente el silencio se había apoderado del lugar, fue solo cuestión de minutos para que la alarma sonara y despertara al mayor.

Buenos días, Shigeo .—Hoyuelo subió con rapidez a la habitación— ¿Cómo te sientes?.

Me siento... un poco mejor .—Murmuró frotando sus ojos— El dolor aún permanece al igual que el resto de las extrañas sensaciones, pero han disminuido... o al menos... eso creo.

Había murmurado aquello ultimo, ni siquiera estaba seguro de su propia respuesta. Ante eso el espectro solo suspiró con pesadez para luego dejar la habitación para que Shigeo pudiese alistarse. Podría uno notar con facilidad que el esper tardaba más de lo que normalmente lo hacía, estaba claro que todavía no se encontraba en una condición estable como para ir al Instituto pero no le importaba en lo más mínimo.

Shigeo, ¿seguro que irás? .—Hoyuelo preguntó al ver que estaba por terminar de alistarse—

Ya falté el día de ayer. Además, (T/n)-chan quería ir al parque conmigo después de clases .—Siguió alistándose—

Aha... recuerda que no es una--.

No es una cita, ya lo sé .—Lo había interrumpido— Pero de igual forma iré, quiero verla.

Podría decirse que la única razón por la que Shigeo quería ir era por que ansiaba ver a (T/n), nada más. Las clases no importaban, y más allá de solo verla, quería asegurarse de que ella no era la responsable de todo lo que le había estado ocurriendo. Con las pocas fuerzas que pudo recuperar en aquella noche tomó sus cosas para luego dirigirse a la puerta de entrada pero no sin antes gritar el nombre de su hermano menor, pensando que aún seguía en casa.

¡Ritsu, baja! .—Seguía gritando cada vez más impaciente—

Ritsu se adelantó, dijo que tenía apuntes que tomar y... eso .—Hoyuelo intentó cubrir al antes mencionado—

Impossible ❀ Mob Psycho 100Donde viven las historias. Descúbrelo ahora