Capítulo 33

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Sam

Habían pasado 3 meses desde que paso aquello...y un mes desde la muerte de Any... ahora las cosas eran diferentes , después de todo lo que había ocurrido nada volvería a ser igual.

Dean

Estaba siendo torturado por los demonios en el infierno, pero después de un parpadeo, abrí los ojos y desperté dentro de un ataúd, con un encendedor prendido que alguien convenientemente había dejado para mi. Tarde unos segundos para que pudiera hacerme la idea de que estaba vivo otra vez, pero enterrado bajo tierra.

-Ayúdenme, ayúdenme. - gritaba con las pocas fuerzas que me quedaban, pero nadie llego en mi rescate. Me di cuenta de que no estaba en un ataúd normal, estaba en un ataúd fabricado a mano así que pude quitar un madero, dejando que la tierra cayera sobre mi cara y todo se puso oscuro otra vez.

Luche con todas mis fuerzas para obtener aire, y logre sacar mis manos de la tierra e impulsar mi cuerpo completo. Me quedo adolorido unos segundos en el suelo, pero el inminente rayo del sol me obligo a levantarme. Una vez de pie, me pude dar cuenta de que estaba en un campo vacío, rodeado únicamente por un montón de troncos secos, que tirados sobre el pasto formaban un circulo perfecto

Estuve caminando un par de kilómetros hasta que llegue a una tienda de autoservicios, una tienda milagro colocada a la mitad de la nada. Corrí desesperado hasta ella y me encontré con que estaba cerrado.

-¿Hola? -pregunte, con la esperanza de poder encontrar a alguien que me auxiliaría, pero al no ser así, rompí el vidrio de la puerta y me metí infraganti.

El estridente calor, había hecho que me muriera de sed, por lo que me tome como 2 botellas de agua para hidratarme y se encontré un periódico del día actual, lo cogí con la idea de informarme sobre los hechos recientes y entonces vi la fecha:

Jueves, 18 de septiembre del 2008

- ¿Septiembre? - me pregunte impactado, tenia la sensación de haber pasado mas de 50 años lejos de casa y ahora me daba cuenta de que solo habían sido 3 meses, lo que significaba que el tiempo en el infierno corría de manera diferente al del mundo

Pase al sanitario para lavarme la cara y quitarme toda la tierra ya que estaba en el espejo decidí revisar mi cuerpo, el que hasta donde recordaba había sido desgarrado por los perros infernales antes de que me llevaran al infierno. Revisé mi pecho y espalda, todo estaba bien, sin ni una marca. Observe mi hombro derecho, y me encontré con que tenia una horrible mano quemada en el.

Cuando me iba a marchar, el televisor del establecimiento se encendió ,la apague pero luego la radio y otros aparatos se encendieron por si solos.

Creí que un demonio estaba detrás de lo que sucedía, así que cogí sal y la puse en la puerta y ventana pero tras hacerlo, empezó a escuchar un ruido horrible que destruyo todos los cristales del lugar. Me tiré al suelo para cubrirme los ojos y oídos, pero todo ya había vuelto a la normalidad.

Estaba asustado, pero sobre todo confundido por los hechos recientes, así que salí corriendo de la tienda hacia el teléfono de monedas y llame a Any. Sin embargo nunca respondió, y la operadora no paraba de decir: Lo sentimos, el número al que usted llamo ha sido desconectado.

Así que observé el lugar y me di cuenta de que no estaba lejos de casa de Bobby así que camine como pude hasta llegar a casa de Bobby, entonces toque su puerta, el abrió me miro y cerró luego volvió a abrir y me echo agua en la cara, estire mi brazo para que lo cortará, entonces me miro y me abrazo, yo me sentía algo extraño por eso...después de lo que viví, un abrazo.

-Pero ¿Cómo es posible? - Pregunto Bobby

-No lo se...¿Dónde esta Any? ¿y Sam?, quizás Sam hizo algo -

Una Vida Sobrenatural (Dean Winchester Y Anahí) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora