Essayer (I want you for me 2da parte)

Capítulo 8

POV NAYEON

No pienses, no pienses. -Me decía a mí misma.

No pienses más.

-Tenemos que hablar. -escuche una voz gruesa.

No tengo deseos. -Conteste groseramente a papá.

-A mí eso no me importa, igual me escucharas. Esa ventana la cambiare ya no se la haré tan fácil a tu amiga.

Es mi novia papá. -Vi a papá levantar su mano, pensé me golpearía... pero respiro profundo y quizás lo dejo pasar, él seguía tan enojado conmigo, tan enojado por no haber llegado con Jeongyeon como me lo pidió y tan enojado por estar enamorada de una mujer. -Pues por poco tiempo. -Continuó.

¡Papá!

-Ella no es buena persona para ti. ¿no ves lo diferente que son?

¿Tú qué sabes? Si nunca estas en casa. -Me atreví a contestarle a mi padre.

-¿Ves? Antes no me hablabas de esa forma, esos abusos verbales seguro los has aprendido de ella.

-Papá... ¿te estás escuchando? Es estúpido lo que dices, ya yo no tengo quince años, que me dejo influenciar por los comportamiento de quienes me rodean, aparte Mina no es quien tu crees es una persona tan distinta que siquiera te has tomado el tiempo de conocer. 

-¿Recuerdas bien de donde vino? -Me dijo él. 

Ya he escuchado suficiente. -No pensaba perder más el tiempo con papá. -¿Puedes salir de mi recamara?

-Yo no soy uno de tus hermanos, que puedes decirle lo que quieras Nayeon. Me debes respeto. -Tenía sus venas tan sobresalidas en su frente que me demostraba que estaba enfadadísimo. 

Creo que me sobrepase echándolo de mi recamara y creo que él también lo estaba haciendo pero de un momento a otro sin darme cuenta todo se salió de control.

¿Qué estas buscando? -Le preguntaba mientras revolvía mis cosas de mi peinadora.

¡Papá! -No escuchaba mi llamar.

¡Papá! -Grite esta vez.

-¡Las encontré! -Me decía mostrándome las llaves de mi auto.

¡Papá no puedes! Es un regalo.

Mamá apareció de pronto.

-La señorita aquí presente, al parecer se cree igual que nosotros, para gritarme y reclamarme, pues si se cree eso que trabaje y se gane su comida.

-Devuélvele la llave a la niña, eso seguro fue cuestión de momento. -Le decía mamá, tratando que se calmara papá.

-Que no y aquí no desayuna mañana, si no lo paga antes. ¡Ah! y falta ver si es una niña aún.

Bote una risa amarga, no podía creer que mi padre dijera eso.

-Sabes que varias noches ha metido a la malandra esa a esta habitación, sin respetar nuestro hogar.

¡Papá! Las cosas no son así. -Dije finalmente, después de haber aguantado bastante, no sé si papá estaba siendo demasiado duro conmigo o si simplemente quizás tenía la razón de enojarse pero a la final era también su culpa por no permitirse conocer a Mina. 

Pronto ya estaban mis hermanos viendo todo.

Papá y mamá salían juntos, mamá no intervino más por mí, al parecer lo de la ventana también la irrito.