Fantasia o Realidad.

6-Pochoclos.

Luna no decía ni una sola palabra, al escuchar a Joaquín su mente procesaba si era real o si se lo estaba imaginando. Él no apartaba la mirada expectante de Luna, ella no respondía y ninguno era capaz de dejar de mirar al otro.

-Luna termina con este jueguito de miradas y respondeme, quien es Daniel?

-Para qué queres saber eso?- su voz apenas era un susurro, no se animaba a recibir una respuesta. Era increíble, eso era realmente una escena de celos o la imaginación ya estaba atravesando todos los limites?

Los ojos de Joaquín de a poco iban perdiendo la frialdad y apartando la mirada le respondió.

-Porque soy tu amigo y no me gusta enterarme por Santiago que andas saliendo con alguien.

El corazón de Luna iba cada vez más rápido y de repente un torbellino de sentimientos se juntaron en su boca y querían salir, salir y mostrarse frente a Joaquín.

-Apenas lo vi dos veces, no es nadie...antes no te importaba con quién me veía, ni te molestabas en preguntar quiénes eran.

Él se acercó a Luna lentamente y ella totalmente inmóvil recibió su abrazo

-Lo que pasa es que soy tu amigo y quiero cuidarte, sabés?

Sin pensarlo ella se alejó, enojada al escuchar esas palabras, no quería su amistad, ya no era capaz de aceptarla.

-No necesito que me cuides, yo sola puedo- respondió en tono seco, y mintiéndole se dio media vuelta y entro a la casa totalmente frustrada.

Luna apenas entró y las voces de Valentina y Santiago se dejaron de escuchar. Sin ni siquiera mirarlos se sentó en el sillón y siguió mirando la película sola. A los minutos Joaquín entró con escoba en mano y sin ninguna expresión en su rostro se puso a juntar los pochoclos al lado de Luna.

Ella hacía de cuenta que él no estaba y cada vez que se acercaba a su lado del sillón trataba de alejarse, no quería ni que la toque. Joaquín no entendía para nada su actitud y tratando de sacarle una sonrisa. Empezó a molestarla tirandole los pochoclos que juntaba. Luna no podía ignorarlo más y le siguió el juego, juntando los pochoclos que él le tiraba y el living de repente estaba mucho peor que antes. Ni los almohadones se habían salvados de ser tirados en el suelo.

Santiago al escuchar las carcajadas de Luna y Joaquín no entendía nada,minutos antes los había visto y ella no parecía de muy buen humor.

Estaban los dos rodeados de pochoclos, y ninguno podía dejar de sonreir. Ellos solo podian entenderse o eso creian.

Se los quedo mirando desde la puerta, parecían dos nenes chiquitos jugando alrededor del sillón queriendo atraparse el uno al otro. Luna le dio alcance a Joaquin por atrás y lo abrazó fuertemente, sin soltarse él se dio media vuelta para quedar cara a cara con Luna pero al percatarse de la presencia de Santiago se alejó sintiéndose incómodo.

-Seguimos mirando la peli?- Valentina entro a la habitación y no entendía el desastre de almohadas y pochoclos del suelo- se supone que los pochoclos se juntan.

-Sí...estábamos en eso- le respondió Luna mientras soltaba a Joaquín totalmente avergonzada.

Santiago intentaba esconder su risa, ver a sus dos amigos de esa manera a sabiendas de lo que Luna sentía, hacía que se cree en su cabeza un futuro para ellos dos. Pero al mismo tiempo rogaba para que esa relación no modifique a su grupo de amigos, aunque al darse cuenta de lo mucho que se estaba adelantando prefirió no pensar más a futuro y ayudar a limpiar el living.

Terminaron de ver la película y no se sabía decir quien había llorado más si Santiago o Valentina, los dos demasiados sensibles con las peliculas. Luna no dejo escapar ni una sola lágrima, sus amigos sabían lo mucho que ella odiaba llorar, demostrar su tristeza. Los cuatro se pasaron la noche recordando sus últimos recitales juntos, hablando de bandas y jugando a las cartas. Luna ya había olvidado el episodio en el patio con Joaquin, pero Valentina en su cabeza ya tenía una lista de preguntas sobre lo que había pasado y Santiago no se quedaba atrás.