Ni lo pienses [Bill Cipher X Dipper Gleeful]

Capítulo 3

El día estaba muy tranquilo, sin ninguna molestia de parte de Bill Cipher hacia Dipper. El castaño rogaba por que ese demonio no apareciera en esos momentos. Quería descansar después de haber peleado casi por una hora con Mabel.

Realmente no sabe como esa mocosa era su hermana... O bueno tal vez si, pero lo que no encajaba entre ambos era la obsesión que tenía ella por el enano de Gideon.

Suspiró cansado al tan solo recordar aquello.

Acaso quieres que te ayude   - y si, la voz de cierto triángulo amarillo se hizo escuchar.

Bill   - un tono molesto acompaño al momento que mencionaba el nombre del intruso, ni siquiera quería verle aún si estaba acostado boca-arriba.

Dipper    - contesto de igual forma el rubio, por qué ahora cada vez que venía se presentaba con su forma humana. El mayor sin vergüenza alguna subió a la cama y pasó sus piernas a los lados de las de Dipper, sus manos a los costados de su cabeza y disfruto de la vista bajo él -  Como me encanta verte así... Tan tranquilo, tan lindo... Tan sumiso - acaricio cada palabra en susurros cercanos al oído del chico.

Esa fue la gota que derramó el vaso, con un movimiento de la mano del Gleeful alejo a Bill tirandolo hacía atrás, dejándole acostado en la cama. Cuando lo tuvo en aquella posición aprovecho para subirse sobre él.

Dipper, Dipper, Dipper, si que eres terco - Bill lucía tranquilo, jodidamente tranquilo con lo que sucedía. Aún si aquel movimiento tan repentino lo había tomado por sorpresa, lo tomo de los más normal. Con una sonrisa de lado encaró al contrario, lo molestaría.

Pero si Bill no se dejaría, Dipper Gleeful tampoco. El chico se deslizo del abdomen del mayor hacia abajo, de manera lenta queriendo provocarle. Sintió bajo de él, el miembro del rubio, y sin espera alguna empezo a moverse lentamente.

Sabes Bill, dos podemos jugar este juego   - dijo queriendo referirse a qué así como el podía jugar con él, el también podia. Siguió moviendo las caderas de adelante hacia atrás, era extraño la sensación que tenía, pero no se detuvo.

Bill se mantuvo con una expresión tranquila, una ligera sonrisa en su rostro - Y créeme que lo disfruto    - de manera descarada pasó sus manos por las piernas del menor. Después de todo nadie le dijo que no podía tocar.

Esa acción solo hizo molestar a Dipper, quién volvió a pasar su mano por la gema de color azul. Unas cadenas aparecieron tomando las manos de Bill y colocándolas hacía arriba, evitando así cualquier otro movimiento; cosa que le hizo sonreír al ver que por fin había logrado su cometido. Bill estaba serio.

... Se me había olvidado que tenías esa gema   - El mayor reviro los ojos e hizo una leve mueca.

Dipper movia las caderas sobre el miembro del rubio, seguiría con el plan de provocar a Cipher. Así que agarró la camisa amarilla del contrario y empezo a desabotonarla.

Bill le miro atento, no movia sus brazos para intentar soltarse, su cuerpo se mantuvo quieto midiendo cada acción del chico sobre él - ¿Lo disfrutas?   - no pudo evitar preguntar. Había sonreido cuando sintió el movimiento cesar.

Un grito interno por parte del castaño y una maldición mental fueron su respuesta.

Al parecer no     - se respondió a si mismo de manera burlona.

Parecía como si le hubiera vuelto a ganar, como si no pudiera evitar que el demonio triangular se burlara de él. Pero volvió a moverse, aunque esto fue algo inconsciente.

Te mostraré quien manda   - mascullo por lo bajo al tiempo que se levantaba.

Dió una mirada como despedida al tiempo que abría la puerta y salia. Dejo a Bill esposado a la cama, la razón, su amiguito se había despertado. Llegó un momento que durante los movimientos sintio algo duro bajo su trasero.

¡¡Dipper!! Vuelve aquí y haste cargo de lo que ocasionaste     - El rubio sacudió un poco sus manos. Vio como el chico regresaba y se asomaba por la puerta, una sonrisa adornando su rostro.

Obligame   - y sin más volvió a salir de la habitación.

. . .

Puede que la situación ya no fuera tan graciosa. Bill se deshizo de las molestas esposas y un bulto entre sus piernas le recordaba que seguía ahí.

Chasqueo la lengua con molestia, no podía hacer un pequeño movimiento de mano y terminar con su tienda de campaña bajo sus pantalones, esto llevaría más; pero no lo haría ahí y tampoco podía ir en busca de Dipper con las leves punzadas que sentía en la entrepierna. Con molestia se levantó de la cama y desaparecio en una nube de humo amarilla.

Apareció en una de las habitaciones en su mansión, se hizo cargo del problemita, pero sin evitar recordar las palabras del Gleeful.

Si quieres que te obligue, lo haré  - sonrio de manera retorcida, no terminaría este trato sin haberlo cogido aunque sea unas 8 veces, por lo menos...

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Lamento la tardanza para actualizar

Pero me emocione viendo free!! Unas tres veces y luego los ovas y...

Y con los exámenes, tareas, proyectos, yaoi, se me fue el tiempo, lo siento

Nos estamos leyendo...

    Y recuerda la realidad es una ilusión,
   El universo un holograma, compra oro,
                             ¡¡Adiós!!