Ni lo pienses [Bill Cipher X Dipper Gleeful]

Capítulo 12

Bill tenía un programa cualquiera en la pantalla, solo tenía la televisión encendida para aparentar, todo siendo parte de un plan.

Llevo sus manos detrás de su cabeza y sonrió disfrutando de todo, aún cuando el trato que hizo con Gleeful se vio afectado. Vio como de la cocina se asomaba una cabellera castaña con una gorra con el dibujo de un pino.

- ¿Se fue?   - pregunto con cierto temor el menor.

- Ya   - le hizo una señal para que se acercará - No entiendo por qué te escondiste - sabía que el que se hubiera quedado junto a él habría sido más entretenido, el que Dipper Gleeful lo viera hubiera sido algo divertido de ver.

- Lo escuché molesto  - comento mientras tomaba asiento junto al demonio amarillo - Aparte no creo que le hubiera gustado verme  - el castaño negó al solo imaginar lo que podría hacerle Gleeful.

- Patético  -

La situación se repitió un par de veces más, Dipper Gleeful veía a Bill y a Pino andar juntos hasta que de pronto dejo de ver a su "yo" de la otra dimensión.

-  ¿Qué pasó? Te dejo Pino  - intento sonar burlón, no es como que quisiera saber que pasaba ente ellos.

- Recuerdas que puedo leer tu mente   - arqueo una de sus cejas al tiempo que negaba - Solo nos damos tiempo -

Bill intentaba acomodar los botones de su camisa, era ese tipo de cosas que no debía preocuparse si estuviera en su cuerpo original. Primero le costó meterlos dentro del agujero, luego se dió cuenta que estaban corridos muy arriba.

- Deja   - Dipper se había aburrido de verle luchar contra los botones, de un manotazo quitó las manos contrarias de la camisa y los acomodo uno a uno. Sintió la pesada mirada de Bill sobre él y no pudiendo evitarlo, levantó la mirada encontrandose con aquel color ámbar.

Tanta tensión por su parte, le tenía tan cerca que no pudo evitar acercarse poco a poco hasta atrapar los labios del rubio, su deseo de tenerle se le cumplía. Cuando se separó se encontró con una sonrisa de lado y la mirada divertida del mayor.

- ¿Me extrañas?  - acaricio cada palabra con un toque burlón y deseoso, pero al momento sintió un golpe en la cara.

Dipper se había alejado tan rápido como había tomado una almohada y aventado al rostro del demonio.

- Jodete  - se fue dejándole ahí.

- Por un momento pensé que harían algo en la sala  - Mabel aparecía por el pasillo.

- El me ama, pero no lo acepta  - se encogió de hombros y sonrió divertido hacia dónde se había ido el castaño.

- Dipper nunca ha sido del tipo de persona que espere con ansias enamorarse o que por lo menos le dé importancia a los sentimientos - no recordaba algunas vez que su hermano le contara sobre alguien con cierta emoción como ella lo hace cuando habla de Gideon - La tienes difícil - rio divertida al tiempo que se dejaba caer junto a Bill, luego le escaneo con la mirada - Aunque obtienes varios puntos extras con tu apariencia  - asintió varias veces mientras le mostraba el pulgar arriba.

- ¿Qué tan celoso dices que es tu hermano?   - aún cuando lo pregunto, no mostró indicios de interés, se mantenía viendo al presentador de ese programa.

- ¿Celoso?... Diría más bien posesivo, nunca le ha gustado que tomen algo que es de su pertenencia - luego dió una mirada algo incitadora -  ¿Quieres besarme? -

- ¿Eh?  - El rostro del mayor fue de confusión y más cuando sintió las manos de la chica sobre su cara y un ligero tirón. Cuando abrió los ojos vio a Mabel siendo sujetada por Dipper.

- ¡¿Qué cojones hacen ustedes dos?! - era una clara expresión de molestia, había llegado a tiempo para alejar a su gemela del otro idiota, ya no estaba entendiendo nada.

- Bill está soltero, yo estoy soltera, que crees que hacemos  - Mabel frunció el ceño y quitó la mano ajena de su hombro.

Dipper miró con molestia a su gemela y luego al demonio rubio que le miraba de igual forma.

- Fuera   - fue lo único que dijo antes de llevar la mano a su gema azul y sacar a Bill de la casa.

Cipher se vio tirado en el césped sin saber que había pasado, aparte de ser echado, no entendía la razón.

- Tranquilo, no paso nada  - la chica se recostó en el mueble.

- Por qué llegué, por eso  - le dijo con obviedad, pero la castaña poco le importo.

- Solo lo hice para molestarte  - agarro el control de la televisión y le cambio al canal, si tenía suerte todavía no se perdía su programa favorito - Pero ten encuenta esto Dipper, yo estoy enamorada de Gideon por ello no me fijaría en Bill, pero ese dorito Iluminati en su forma humana es muy bien parecido. Estoy segura que cualquier chica o chico del pueblo no dudaría en insinuarsele - le guiño el ojo -  Aparte conocemos a Bill -

Una sensación en su estómago no fue buena señal.