Carta 1

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Diciembre del 2016.


Hola A.

Hoy te vi en la escuela, estabas jugando fútbol con tus compañeros de grupo, entonces mi amigo te gritó:

Se vale llorar.

Cuando por accidente te golpearon en la entrepierna, tu me viste, luego a él y sonreíste.

¿Por qué lo haces? Sigo pensando que esa sonrisa es para mi. Y no es así. Sales con alguien más y yo estoy rota por dentro.

¿Recuerdas acaso como nos conocimos? Yo sí, nunca lo olvidaré.

Era febrero, habían pasado meses de mi ruptura con mi ahora ex novio. Mi amigo llegó al aula de inglés y me dijo que me quería presentar a alguienY si, ese alguien eras tú. Todo el día se la paso molestándome con eso hasta que en la salida me llevó contigo. Me diste un beso en la mejilla y yo me tuve que ir porque mi amiga tenía que llegar temprano a su casa.

Al día siguiente mi amigo te llevó hasta mi salón, que estaba enfrente del tuyo, y ahí comenzamos a hablar, no sabía que decirte, estábamos nerviosos. Entonces tus amigos llegaron y me saludaron con un beso en la mejilla, algo inusual, uno de ellos tomó mi mano y me hizo caminar unos cuantos pasos, tú me seguiste. Al final ellos se fueron y bromeaste sobre quemarte con el sol y me hiciste caminar de nuevo a la sombra, lamentablemente timbraron y ambos nos fuimos a nuestro salón, una vez ahí mis amigos comenzaron a quererme juntar contigo, me decían que eras buen partido, mi ex novio que estaba cerca nos estaba escuchando y yo como aún me dolía nuestra ruptura y no le perdonaba que ya estuviera con alguien más, empecé a decir que si, que eras guapo y que me gustabas. ¿Gracioso, no?

Hoy cuando te veo no puedo evitar sentirme mal, pero no puedo hacer nada. Ella te hace feliz. Y yo nunca podría interponerme entre ustedes.

Me despido por ahora A.


Saludos.

CARTAS A ÉL © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora