Lentamente y con algo de molestia, sus ojos fue abriendo para que así se diera paso a la luz. Parpadeo con rapidez y a el brillo cegador se pudo acostumbrar, ya después vio solo sobre ella una manta trasparente de delicada tela parecía envolverle. Movió su cabeza despacio mientras rechinando algo debajo se amoldaba a sus distintas posiciones, pequeñas punzadas de un dolor leve le advirtió que desistiera antes de hacerse algún daño.
Sus ojos fueron hasta los límites permitidos de visión, luego volvió y trato de mover su cabeza a un lado y acompañando a la acción una mueca de dolor en su rostro apareció, pero valió la pena y su vista se amplió más que en esa cortina que le rodeaba pues en un costado hacían un arco que le permitió ver hacia otro universo.
─ ¿Dónde... dónde estoy?
El siguiente paso fue tratar de hacer que su cuerpo le respondiera, pero fue difícil ya que al tratar sintió algo que le quemaba los músculos. Estaba entumecida y sus piernas parecían dormidas como aquella picazón insoportable hasta que la sangre volviera a circular como siempre.
─ ¿Qué pasó? ¿Esto debería estar pasando?
Volvió un momento a su posición inicial, solo hasta que los recuerdos surjan y refresquen su conciencia con aquellas piezas que faltan en su rompecabezas. Fue algo duro y trabajoso dar sentido a esas miles de imágenes que rondaban su cabeza, era todo un revoltijo su mente y las ideas estaban en un orden ilegible.
─ ¿estoy muerta? ¿Esto es el cielo o... el infierno? ─ llevó una mano hacia su mecho y en el tacto los latidos de su corazón sintió
Morir fue la palabra y sus memorias se ordenaban con rapidez, sus ojos se cristalizaron y de ellos las lágrimas brotaron, el recuerdo de aquella noche fue algo duro que golpeo sus sentimientos. Pero no había tiempo para lamentarse lo que ya estaba hecho, el destino era cruel pero nada se podía hacer con él.
─ debo salir de aquí lo antes posible
Nuevamente y ahora con más determinación, le ordenó a su cuerpo poner la marcha para tratar de salir de ahí y saber qué es lo que sucedió exactamente. Suprimió aquellos dolores y al fin colocó un pie fuera de las cortinas hacia ese suelo, pisó firme y en posición de sentada quedó dándose cuenta que donde antes estaba acostada no era nada más que una simple cama.
Un momento y se vio así misma descubriendo sus ropas poco usual que jamás creyó llevar puesto alguna vez, y es que de sus hombros hasta sus pies le cubría un hermoso vestido en una sola pieza con pliegues elegantes y detalles en dorado, algo que usaría una dama o una princesa.
─ Esto me pondrá las cosas difíciles ¿Dónde estará mi ropa?
Dejó eso de lado u trató de ponerse de pie, casi cae por un momento pero tomando respiraciones largas equilibro bien su cuerpo. Otra vez con sus ojos estudio su entorno aunque no había mucho que procesar, pues todo parecía indicar que se trataba de una simple habitación que alguna alma caritativa le proporciono para un necesario descanso.
Trató de caminar pero cuando quiso levantar su pie derecho este quedó estancado provocando cayera sobre sus manos, rápidamente miró su pie percatándose de algo, pues si antes había pensado que alguien le había ayudado ahora estada en duda y el grillete que la sostenía atada de su pierna daban una idea bastante contraria. Su pie estaba atado con un grillete y una cadena que estaba anclada a la pata de la cama, sus movimientos estaban definidos por el largo de la cadena y este no era mucho. Ella trató de hacer jalar para liberarse pero incluso la cama parecía estar atada al piso.
─ Esto ya no me está gustando ─ ella se puso de pie y suspiró
─ a nadie le gusta
Ella reaccionó con sorpresa por aquella dulce voz, miró tan rápido como pudo buscándola por toda la habitación, hasta que por fin sus ojos se encontraron con aquellos dueños de esa melodiosa vocecita. En su rostro una enorme sonrisa apareció, mientras aquella apurada corrió hasta estar cerca y sin demora en un abrazo se fundieron.
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Amor Entre Dos Mundos
FanfictionSin lugar alguno donde refugiarse, Yui no pudo huir de los recuerdos que le atormentan, ahora sus recuerdos cobraron vida haciendo su sufrimiento u tormento aun mayor. ¿Decidirá entonces salvarse así misma, o salvar a la mujer que tanto ama?.