Amor Entre Dos Mundos

¡¿Libertad?!

La tensión dentro de la habitación subió de golpe, Chinatsu y Akari miraban aquella escena preocupadas de que en cualquier momento se desate una tormenta. El incesante cruce de miradas las chicas podían leer entre líneas y el futuro que les deparaba no era muy alentador.

Guiadas por algo más allá que su propia fuerza de voluntad, Akari y Chinatsu decidieron que debían intervenir antes de que ese juego terminara en una tragedia lamentable. Akari sin que sus amigas les importasen se escabullo fuera de la habitación mientras Chinatsu quedó ahí para impedir todo lo posible que sus amigas llegasen a lastimarse.

─ Kyōko... ─ Yui dijo ─ ¿Qué te ha llevado esta vez a fingir tu propia muerte? ─ preguntó sabiendo que tal vez la rubia respondería con algo estúpido

─ es fácil ─ dijo ella como si no importase ─ el oro de Seitokai

─ ¿oro? ─ Extraño ¿no era el diamante lo que quería? Pero hasta ese punto no era una pregunta fiable ya que la rubia la traicionó

─ permíteme explicarte Yui-nyan ─ Kyōko avanzó hasta una silla que estaba en la habitación y se sentó en ella y cruzaba las piernas ─ te había dicho ya que ese reino tenía un tesoro demasiado bueno para no sentir el impulso de tomarlo

─ ¿hablas del diamante? ─ ya lo había dicho antes pero la rubia no le pareció importar después

─ el diamante que robaste no vale nada, no hay nadie en la tierra que quiera comprarlo, ya que su valor sobrepasa los límites... pero las joyas pequeñas... ─ en algo tenía razón, incluso Yui había pensado en ello pero lo robo porque la rubia planeaba dárselo como regalo a Chinatsu

─ entonces... fingiste estar muerta para robar sin que sospecharan de ti ─ dijo Yui adelantándose a Kyōko. Debía estar impresionada con aquel plan, pero existe ese pequeño problema que le costó la oportunidad de ser feliz y por eso Yui no sentiría más que enojo por la rubia

─ después de "morir" fue muy fácil, incluso el ataúd en el que me pusieron sirvió como contenedor para todas las joyas que pude robar, luego solo era cuestión de que Akari se apareciera en Seitokai e hiciera su "visita" entonces podría salir sin problemas

Yui apretó los puños sintiendo la sangre elevar su temperatura ─ y solo para eso mataste a Chitose ─ dijo entre dientes pues estaba perdiendo los estribos

─ jajaja te la creíste ─ rio burlona la rubia carcajeándose descontrolada ─ Chitose era mi cómplice en Seitokai al igual que su hermana Chizuru, jajaja... Chitose está aquí en este castillo vivita y coleando

¿Qué demonios sucedía? Si Chitose lo sabía entonces ¿Por qué tenía que fingir también su muerte?. Esa rubia tenía más aliados de los que Yui una vez creyó, sin embargo dudaba que Chitose y Kyōko se hallan conocido desde años atrás, pues Yui conoció a la chica cuando estaba en prisión en Nanamori ya que Chitose también era una prisionera más.

─ estás pensando en que esa es una estúpida posibilidad, la que Chitose se ofreciera a ayudarme siendo la mejor amiga de la princesa Ayano ─ no lo había pensado así pero la rubia tenía razón, ¿Por qué Chitose traicionaría a Ayano?

─ No lo puedo explicar, pero si tuviera que adivinar diría que le ofreciste algo que ella deseaba más que nada ─ dijo Yui como posible salida pues aún no había resuelto ese enigma

─ así es ─ afirmo la rubia ─ la libertad

─ ¿libertad?

─ Si libertad, libertad que le fue arrebatada injustamente, libertad de la que solo había soñado, libertad... de la cual tú gozas ahora Yui-nyan ─ dijo Kyōko ─ ahora ella puede tener una vida ¿no es eso grandioso?