Sad Pill

¡Una Venezuela de posibilidades!

VENEZUELA

No quiero utilizar nombres, puedo hacerlo, pero me niego ello, esta vez vengo contarles una historia que causa dolor en mi pecho, soy tan solo otro muchacho inmaduro, que esta forzado a madurar, forzado a crecer apresuradamente ¿para que? Para nada, yo vivo en Venezuela un país en el cual tengo que despertar cada mañana viendo a los ojos a mi mama la cual desesperada hace todo por mí y por mi hermano, ella quiere que tengamos que comer, a veces incluso deja de comer ella para poner un bocado en nuestras bocas para así soportar otro duro día, después de esa terrible escena tengo que ir a la universidad vivo lejos así que tengo que salir muy temprano, con miedo ya que en las calles cualquiera puede matarte para quitarte el simple dinero del pasaje, por si fuera poco las personas que deberían protegernos son los mayores ladrones, las manifestaciones contra un podrido gobierno no cesan y hacen más difícil todo pero es necesario que alguien luche, por un futuro dicen, he visto como caen muchachos muertos de mi edad o incluso más jóvenes, caen por la lucha de una supuesta libertad que quizás no llegue, el alma se me parte al pesar que el día de mañana ese muchacho en el suelo pueda ser yo o peor aun mi hermano, indiferentemente de que haga el a este país lo a adsorbido el desastre, no solo el gobiernos las personas nos acostumbramos a matarnos unos a otros, a ser egoísta, conformistas, este es un país donde el pobre tiene que ser toda la vida pobre, no tienes derecho a superarte, ni siquiera tienes derecho a comer así que creo que eso da mucho que pensar.

Saben creo que perdí el sentido de lo que digo pero es que hoy estoy tan cargado de emociones que no como expresarlas, hoy me desperté igual que siempre para ir a trabajar, desperté con hambre, molesto porque anoche no nos alcanzó para cenar, yo soy un muchacho y sin pensarlo me molesto con mi mama como si ella tuviera la culpa saben, ella de inmediato saco una papa hervida la última papa hervida y me dijo eso era para el almuerzo pero tú vas a trabajar tienes que comer ¡malditasea! discúlpenme la maldición pero es que la impotencia que sentí fue tanta que apreté tan fuerte los puños que sentí que la venas se me iban a desbordar, mi cara se llenó de lágrimas y al voltearse mi mama tome la papa hervida y se la di a mi hermanito ya que el, la está pasando peor que yo, mi hermanito pierde las esperanzas diciéndome que no comerá esa porquería que él tiene hambre y como le digo lo contrario si es claro que tiene razón, me considero alguien inteligente, pensante, pero el pensar no me ha servido de nada este país, o mejor dichos las personas de este país nos están matando, no hay protestas que valgan, el gobierno sigue siendo corrupto, las personas siguen siendo ignorantes, conformes en la pobreza, puede que este gobierno caiga porque nada es eterno, pero las personas aquí son una mierda, no todos, me gusta creer que aún hay gente buena, pero la gente buena está muriendo de hambre, a la gente buena la están asesinando en la calle, la gente buena se está pudriendo en odio al ver la cara de su mama triste porque no tiene para darle que comer a su hijo.

No sé cuál es el punto de esto que escribo solo quería tomar mi lápiz y si así como si fuera un afilado cuchillo cortar frases, frases que quizás a nadie le importen, quizás ustedes no pueden sentir esta situación y no se las deseo, solo pido que valoren las oportunidades que tienen y luchen por sus sueños, sé que soy un cínico al pedirles esto ya que poco a poco he abandonado mi esperanza y mis ganas de seguir día a día, pero saben cada mañana que me levanto y veo a mi madre luchando sin importar que aunque me entristece, ella es la chispa que me hace luchar otro día pero me voy cansando de que día a día solo vuelva para ver su cara triste, solo conseguir peleas en mi hogar provocado por el miedo, por la desesperación, Venezuela es un país bello donde una vez hubo sueños ahora solo quedan pesadillas interminables, estoy cansado de este insomnio así que yo vivo cada día solo para tener oportunidades no aquí si no en donde sea, porque donde sea que yo pueda volver a ver feliz a mi madre ese será el lugar que yo ame, soy débil y cada día deseo rendirme, pero en el fondo de mi corazón aun confió en la gente buena, confió en los valores y confió en que mis sueños no serán olvidados, creo en la Venezuela de posibilidades y no de ladrones.

No había prometido escribir algo para hoy pero quería desahogarme, no pregunten si lo que aquí escribo en verdad es mi día a día, porque no lo es, esta es la vida del venezolano... espero que todos puedan leer esto y sigan soñando que nadie asesine sus sueños, porque este es un mundo de posibilidades.