LoveMe LeaveMe * 2Ja3 *

J.inyoung

Jaebum aún perplejo por la situación intentaba conversar natural pero sus palabras se trancaban, tartamudeando algunas veces. Realmente no entendía para nada la situación y necesitaba urgente saber qué demonios estaba sucediendo entre ellos dos.

- Park ¿Hace cuánto no nos vemos?

- Mmm ¿Tres... años?

- S – sí...

El chico sofisticado le dio una sonrisa amable y extendió la mano para saludarlo oficialmente.

- Un gusto nuevamente Im Jaebum.

- Claro...

Los chicos se dieron la mano y con una mirada un poco incómoda quedaron en silencio, intenté relajar el ambiente ofreciéndoles comida y bebestibles.

- ¿Entonces vino?

- Oh, Sí estaría bueno, muchas gracias Youngjae. – sonrió.

Jaebum se levantó del sillón y acercándose a la cocina americana destapaba la botella y yo sacaba las copas del estante, Park, mientras esperaba, miraba su celular. Por lo bajo JB me habló.

- Oye...

- ¿Hm?

El chico sexy vigiló a Park de que no nos viera y rápidamente apretó mi trasero, me quejé dándole un codazo en su estómago y éste tosió riendo, Jinyoung nos miró curioso, yo reí nervioso y seguí ordenando la bandeja con los recipientes y el alcohol.

- ¿Sucede algo?

- N – nada, a propósito del vino, andas en auto... ¿Llamarás a un conductor reemplazante después?

- No lo sé, tal vez... ¿Pueda quedarme aquí?

Park presionó con su mirada a Jaebum y una sonrisa traviesa comenzaba a revelarse, quedé impresionado por el nivel de confianza que comenzaba a conocer entre los dos, no sabía exactamente qué historia había tras ellos pero estaba seguro de que Jaebum después me lo contaría, mientras tanto conocería a ese chico y disfrutaría del momento, confiaba en JB.

- Y... bueno... Youngjae...

- ¿Mm?

- ¿Vives con Jaebum?

- N – no, sólo soy visita, yo me quedo en los dormitorios universitarios, es más, en poco rato más debo marcharme. –sonreí.

Jaebum se apegó más a mi lado y empujándome suavemente dijo sonriendo.

- Mmm No no te vayas, ¡Quédate esta noche!

Me sonrojé e intenté disimular mi nerviosismo tomando un trago de soju.

- ¡Por qué me dices eso! ¡Estás ebrio!

- Los fines de semana te quedas...

Im Jaebum tenía bastante alcohol en su cuerpo y Park estaba casi igual, no paraban de balbucear y reír.

- Y bueno, en realidad desde err.... ¿Cuándo fue? Ah, sí, desde la secundaria, en taller de música conocí a Jaebum...

- Ahh... ¿D- de verdad?

Ambos tenían sus mejillas rojizas y se apoyaban sobre la mesa con una sonrisa media estúpida, sólo asentían a todo lo que les decía y yo estaba al límite de perder también mi dignidad, aun así, dejaba permitirlo puesto que al otro día tenía clases y además debía llegar lúcido a los dormitorios.

- Oye, ¡YOUNGJAE!

Me sobresalté y sorprendido me di cuenta que el chico erudito comenzaba a hablar informal y tenía más confianza con nosotros, realmente el alcohol lo estaba afectando más de la cuenta.

- ¿S- sí?

- ¡OYE!

- ¿?

- Eh... ¿Q – qué relación tienes con este idiota?

- ¿Perdón?

Park tomaba otro sorbo y cuando tragó se levantó de la silla y se tiró en el sillón, apuntó a Jaebum quién estaba completamente dormido sobre la mesa.

- Ese chico es un tonto ¿Sabes? – sonrió ebrio

- D – de acuerdo.

Me acerqué a Jaebum y toqué su hombro para despertarlo suavemente, se quejó e intentó alejarse para que no lo molestara más.

- Mnnnhhh, déjame dormir...

- Vamos, te llevaré a la cama.

- Cuando quieras nene – rió por lo bajo.

- ¡Oye!

Lo ayudé a levantarse y caminamos hasta su habitación, lo solté sobre la cama y rebotando alcanzó a tomarme del brazo arrastrándome a su lado, de inmediato me besó y sentí su sabor a Martini, un poco dulce y a la vez amargo, me separé de él y tomó mi nuca para acercar su rostro al mío abrasando mis labios una vez más, esta vez, estaba más caliente y su respiración agitada sobrellevaba mis deseos de entregarme una vez más, estábamos ebrios y eso era entretenido, pero no estábamos solos... era realmente incómodo.

- Jaebumie, no ah...

- Vamos, estás duro –sonrió astuto.

- ¡Déjame!

- Nh... ¡No!

Im tocándome por todas partes me daba besos en el cuello y metía su mano bajo mi ropa, comenzaba a sentir cosquilleos y se aceleraba mi corazón. Entre sus caricias miré el techo y logré recordar que debía marcharme para no tener problemas en los dormitorios, asi que, velozmente me levanté y Jaebum casi inconsciente me dio una débil palmada en mi trasero.

- ¡Choi YOUNGJAE! Mmm, nhhhh, no te vayaaaas, yo Te am –

- Mi ojos comenzaban a brillar por aquella frase que siempre esperaba de él, sin embargo justo en ese momento se había tirado sobre la almohada para dormir.

Salí resignado de la habitación y Park estaba fumando, un poco más claro mientras observaba la vista de la ciudad nocturna exhalaba el humo y comenzaba a dialogar.

- ¿Ya te vas? ¿Qué tal si miramos juntos la vista nocturna? ¿No es genial aquí? Yo elegí este apartamento...

Por un momento me quedé observándolo y un breve silencio hubo entre los dos.

- Sí... debo irme, ¿Te quedarás o te vas?

- Me quedo, más rato pediré un conductor.

- Oh, claro, entonces... ¡Adiós!

- ¡Adiós Choi Youngjae!