¿Amor U Obsesión? Harley Quinn & The Joker

Capitulo 21

Recordar una pesadilla para luego Vivirla

Luego de pegarle a la rubia, Rick se acerco a nosotros y dijo que no iríamos a el bar.

-Hey Chicas! Calmensen ya son adultas, bueno aunque no se comporten como una- dijo mirandome- nos iremos al bar, ahora!- dijo serio mientras caminaba en la dirección en la que veníamos.

Todos empezamos a caminar hasta que Boomerang anuncio.

-Una carrera al bar- en ese momento todos empezamos a correr, flash iba en el medio o mejor dicho ultimo, ya que seria trampa, yo iba casi adelante, estaba Batsy, Daiana y yo, intente pasarla a Daiana y pude, no podía llegar a Batsy así que di una pirueta hacia adelante, pasando sobre si cabeza y termine delante suyo, me di la vuelta y le Sonreí, seguí corriendo como un correcaminos, hasta que metros antes de llegar a la puerta Flash pasa al lado mio haciendo que el llegue primero.

-GANE- grito a lo lejos Boomerang.

-Pero tu no llegaste primero- dijo Flash.

-Dije el que llegue, jamas dije que el primero ganara- dijo y río a lo ultimo

-Ash, muerete, me mate corriendo para nada- dije frustrada.

-Jajaja, eso por sorda- dijo Deadshot.

-Hay callate, que sin mi tu no estarías aqui- dije dándome la vuelta y entrando al bar, hasta que escucho que alguien me silvo, me doy la vuelta con cara de culo y digo.

-Quien fue el idiota que hizo eso- dije.

-Acaso ya no puedo hacerlo señorita Quinn- dijo mi puddin saliendo de atrás.

-Pues no se señor J- dije coquetamente agarrándolo de la camisa pegándolo mas a mi.

-Emm- raspa su garganta- estamos aquí todavía- dijo Rick mirándonos.

-Si, mejor vamos a un lugar mas privado, ¿no puddin?- dije mirándolo coquetamente.

-Vamos- dijo cargándome como si fuera un koala, me subió, rodee mis piernas en su torso, y subimos las escaleras, ibamos a entrar a la habitación que compartíamos todos pero vimos una habitación con puerta cerrada de color dorado, entramos y la habitación la veía parecida a un club que tenia mi puddin el cual lo vendio, me bajo y fui a ver el armario, y dentro había ropa de mujer, veo los zapatos y encuentro unos zapatos de oro, que casualmente eran los mio, llamo a mi puddin y el encontró su ropa, hasta que me dijo.

-Calabaza, este es nuestro antiguo club- dijo mi puddin- cuando lo vendí, le dije al dueño que guarde nuestra habitación para cuando vengamos- termino de hablar el.

-Bueno puddin, me alegro mucho, pero ahora quiero hacer otra cosa- dije antes de tirarme encima de el haciendo que caigamos en la cama.
Lo beso muy apasionadamente, me siento encima de el y nuevo suavemente mis caderas haciendo que el tenga una muy notable erección, me paro y me quito la ropa muy velozmente, pare la desesperada, aunque en realidad lo estaba, cuando quede en bragas y sostén, mi puddin se para de la cama, y me abraza alzandome, haciendo que mis pies no toquen el suelo, enriedo mis piernas en su torso, luego nos besamos, y como de costumbre, había una alfombra de oso, me baja y se pone al frente mio mientras yo estaba arrodillada.
Lo miro con una risa de felicidad como si estuviera por comer un dulce, y uno muy grande, cuando le bajo el bóxer veo que su pene se pone erecto y lo empiezo a soborear, en un momento el agarra mi cabeza, mejor dicho mi cabello, y lo mueve de adelante hacia atrás. Me suelta del cabello y mientras lo chupo, lo mansturbo, se estaba por venir y meto todo su pene en mi boca, para ser sincera casi me ahogo pero el gran sabor de su semen caliente mejoraba la situación.
Luego el me carga como una bebe, separa mis piernas con sus brazos y procese a penetrarme, pero algo era raro, estaba frío, no me daba besos ni nada, en un momento me agarra de la cintura y me agarra muy fuerte a lo que yo me bajo sobre el.

-Hey, no hagas eso me duele- dije enojada.

-HAHAHAHA- río el -Eso no debería de dolerte como la perra que eres ya estas aconstumbrada- dijo el mirándome fijamente. Mi mundo se vino abajo cuando me dije aquella cosa.

-No me hables asi- dije muy despacio.

-Yo te hablo como la misma zorra que eres, perra- dijo mi puddin.

Luego me quiso agarrar del brazo para continuar pero no lo dejo a lo que el solo se da la vuelta, y en segundos muy cortos siento su mano en mi mejilla. Dolía como la mierda misma pero el dolor de que haya pegado de nuevo era peor.

-Porque- dije en un susurro y entre dientes.

-Porque eres una zorra, perra y así se las trata cariño de mi corazon- dijo en forma de burla.

Me estaba por marchar de la habitación hacia el baño pero siento que el me tira del pelo haciendo que me caiga y mi espalda quede delante de sus piernas.

-Adonde piensas que vas, todavía esto no termino, zorrita- dijo y me levantó del cabello, puso mis pechos contra la cama en cuatro y me penetro vaginalmente, nunca me había hecho esto, solo una vez pero lo había hecho enfadar.

Pensé que jamas pasaría después de años, cuando tenia 16 años, sufrí un abuso sexual en un callejón oscuro, estaba volviendo de la casa de mi novio, en ese tiempo, y tube que pasar por frente de un callejón, pase rápido pero escucho un bee llorar, no se si fue algún instigó materno pero fui a ver, no había nada pero cuando me di la vuelta, ahí estaba, un hombre grande, de unos 20 y tantos, iba bien vestido, se parecía a mi Puddin, pero sin maquillaje y tatuajes. Trate de orme pero agarro muy fuerte mis muñecas, me llevo a una habitación oculta en es ecallejon y allí abuso de mi, llegue a mi cada como si nada, me castigaron por irme de fiesta, si les mentí, y estuve encerrada por unos 2 meses.

Luego de recordar aquella catástrofe en mi vida, siento una gran nalgada que caso me hace llorar, sinceramente mi puddin negaba muy fuerte, tenia la mano muy pesada.