You're eternal my love.
For me you're all there ever was... My one belief,
We share a common energy....No podía permitirme quedarme llorando ahí. Limpié mi rostro busqué mi camino al streetcar. Me sentía tan mal; creía en el karma pero no creí que actuara tan rápido. No sé cómo llegué a la parada y menos cuando me subí al transporte. Constantemente veía a la playera y una triste sonrisa se formaba en mi cara.
-¿Estás bien?- Volteé a ver a una señora de tez morena que estaba sentada junto a mí.
-No- dije a secas.
-¿Puedo hacer algo?- Volví a negar -llorar es bueno, no arregla las cosas pero al menos dejas que las cosas fluyan.- Prosiguió en forma de consuelo.
-Gracias- susurré. Dio un apretón en el hombro.
-Un corazón destrozado no duele tanto como un hueso roto- reí.
-¿En serio?- Pregunté sarcástica y la mujer rió.
-Al menos ya te saqué una sonrisa. Desde mi perspectiva te puedo decir que duele más el hueso roto pero no todos sentimos lo mismo- bajé de nuevo mi vista a la playera y me quedé ahí por varios minutos. Cuando volteé la mujer ya no estaba a mi lado.
Cabizbaja llegué a la casa de Michelle, afortunadamente no había nadie y no tendría que dar incómodas explicaciones a nadie. Me metí a mi habitación y me eché a llorar desconsoladamente. Así se sentía el tener roto el corazón. Pero, ¿por qué me sentía así?, ¿Por qué me dolía tanto?
-Porque la amo- verbalicé después de algunos segundos -por eso duele tanto- sollocé aún más fuerte.
Pero esto era una consecuencia de mi miedo, a pesar del dolor lo veía muy claro. Dejé pasar tanto tiempo, la alejé por tanto tiempo y sólo logré que se fuera. Puede que el cosmos perdone lo que hacemos y decidimos, pero el tiempo no. Entre pensamientos y lágrimas me quedé dormida. Desperté cuando tocaron levemente a mi puerta. Sin muchas ganas me levanté y vi a Michelle quién de inmediato borró su sonrisa al ver mi estado.
-¿Qué pasó, chica?-
-Todo salió terriblemente mal- susurré antes de recostarme de nuevo.
-¿Lo tomó mal?-
-No fue Andy el problema, fue Rachel- suspiré -bueno, no fue un problema, es sólo que me di cuenta que ella ya tomó otra decisión.-
-Oh.-
-Ahora comprendo más a fondo lo que me dijiste antes de tomar mi decisión. El miedo es la peor excusa para no hacer algo- acarició mi cabello.
-Lo siento muchísimo, chica- me encogí de hombros.
-Simplemente tendré que acostumbrarme a esto y a sacar lo mejor- se quedó pensando un rato.
-¿A qué te referías cuando dijiste que ella ya tomó una decisión?-
-Tiene a otra persona.-
-¿Te vio?-
-¿Hace alguna diferencia?-
-Mucha, por supuesto.-
-Ella besaba a otra persona- dirigí mi vista a la ventana. -Sí, me alcanzó a ver pero no me quedé para que me presentara a su novia.-
-¿Cómo sabes que es su novia?-
-Estaban demasiado cariñosas para ser amigas.-
-Sabes muy bien que hay gente que tiene personas con las que descarga sus emociones y no necesariamente están en una relación- negué. No quería imaginarme que Rachel había regresado a sus viejas andadas o no lo quería aceptar. Maldición.
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Twin Flame
RomanceNunca creí en el amor a primera vista. Mi mente no podía concebir el quedar cautivado por alguien simplemente al verlo, era ridículo. No creía en ver a alguien y querer pasar el resto de mis días con ese alguien con sólo ver profundamente a sus ojos...