Giros Del Destino- One Direction

Capítulo 37- Monstruo

Narra Dennys

Llego a casa y subo a mi habitación, no entiendo como es que cada día lo que siento por Harry crece más y más, me doy una pequeña ducha y me pongo mi pijama de Bob Esponja, agarro mi MackBook y entro a Wattpad, una aplicación donde los adolescentes escriben sus novelas y las comparten, es genial, me pongo mis gafas y me acuesto en la cama a leer, Sky se hace ovillo a mi lado y todo queda en silencio.

Luego de un rato la puerta se abre y entra mi hermano, se sienta en la silla de mi escritorio y se queda observándome.

Harry: ¿Qué haces?

Yo : Leer- digo sin despegar la vista de la pantalla.

Harry: ¿No te cansas?- pregunta y niego- ¿Por qué viniste tan temprano?

Yo: No habían clases, sólo un show para los chicos que saben cantar, fui a ver y me salió una tremenda sorpresa.

Harry: ¿Qué?

Yo: Harry me dedicó dos canciones hermosas- digo sonriente- Es tan lindo.

Harry: ¿Estás pensando en darle una oportunidad?

Yo: Lo estoy pensando seriamente y creo que se la daré.

Harry: Eres patética, ¿cómo se te ocurre volver con un tipo que te pegó los cachos?- pregunta enojado- Ese tío es un gilipollas.

Yo: Eso no es de tu incumbencia- gruño.

Harry: No entiendo lo que buscas en él, un hombre que te fue infiel con tu peor enemiga, no se ha hecho responsable por su hijo y es un maldito monstruo.

Yo: ¿De qué hablas?- pregunto haciéndome la desentendida.

Harry: Sabes bien de lo que hablo, es un chupasangre asqueroso.

Yo: ¿Cómo sabes eso?- pregunto poniéndome de pie.

Harry: ¿Cómo crees que lo sé?

Yo: Eres un lobo- digo mirándolo con repugnancia- Tú eres el monstruo.

Harry: Tu hijo de seguro va a ser una bestia como su padre- gruñe con rabia.

Estampo mi mano en su mejilla mientras siento las lágrimas calientes en mis mejillas, ¿cómo se atreve?, puede meterse conmigo, con Harry, con lo que sea pero con mi hijo no.

Yo: No te metas con mi hijo idiota- gruño.

Harry: No quise decir eso...

Yo: Lárgate, déjame sola- digo dándole la espalda.

Lo escucho suspirar y se va, me siento en la cama y empiezo a llorar, ¿por qué todo tiene que ser tan difícil?, mi hermano es un lobo y ahora ellos nunca se llevaran bien, y no por culpa de Harry, si muriera todo sería más fácil. Abro el cajón, saco mi navaja y la pongo en mi muñeca, ¿por qué diablos hago esto?, ¿me resolverá mis problemas?

No.

La lanzo lejos y sigo llorando, no sé porqué hago estas cosas, sólo debe importarme lo que yo y Harry sentimos, me pongo unos vaqueros, una polera negra y mis converse, me lavo la cara y cepillo mi pelo hasta que queda presentable, salgo y me monto en mi auto ignorando los llamados de ese idiota, manejo hasta donde Gigi y toco el timbre, ella sale y me le lanzo encima a abrazarla.

Gigi: Hey, ¿qué pasa?- pregunta abrazándome.

Entramos y nos sentamos, me pasa un vaso de agua y se queda observándome.

Gigi: Ahora me dirás lo que te está pasando.

Yo: Llegué a casa y subí de inmediato a mi habitación a leer, Harry subió y comencé a platicarle sobre lo que pasó con Harry y que estoy pensando en darle una oportunidad y me dijo que soy patética, empezamos a discutir y sacó a relucir que Harry es un vampiro, le pregunté que cómo sabía eso y me di cuenta que es un lobo, le dije que el monstruo era él y me dijo que mi hijo sería una bestia como su padre.

Gigi: Será pendejo- gruñe- Ven aquí.

Me abraza y logro calmarme un poco, da la hora del almuerzo y prepara unos sandwiches de queso, comemos mientras hablamos de diferentes cosas y mi celular suena.

Mamá.

No contesto y lo apago, no quiero hablar con nadie.

Me da sueño y casi me obliga a ir a su habitación y dormir, me pongo a pensar en lo difícil que será convivir entre ellos ahora que son rivales por así decirlo, empiezo a llorar hasta que me quedo dormida.

(...)

Despierto al escuchar la puerta abrirse y veo a Harry entrar a toda velocidad y Gigi detrás de él con aire de enfado, me refriego los ojos y me inclino sobre mi codo.

Gigi: ¿Qué no entiendes que la dejes en paz?- gruñe.

Harry: La que tiene que dejarme en paz eres tú, sólo quiero saber como esta- dice sentándose a mi lado.

Gigi: Ya la viste, puedes largarte. ¿No crees que es algo cruel  de tu parte condenarla a todo esto sólo por quererla contigo?

 Harry: Lo sé pero simplemente no puedo dejarla ir, no quiero y no puedo.

Gigi: Eres patético.

Yo: Gigi tranquila- digo sentándome- Estoy bien.

Me mira dudosa y nos deja a solas, miro a Harry y puedo ver la preocupación en su rostro.

Harry: ¿Qué pasó?, te he buscado por todas partes.

Yo: ¿No pensaste que quizás no quería que me encontraran?

Harry: Puedes irte de la ciudad, del país, del universo, puedes esconderte debajo de una roca y siempre te buscaré y no me detendré hasta encontrarte.

Mis ojos se cristalizan y comienzo a llorar como una niña, él siempre ha sido el que ha estado conmigo en las buenas y en las malas aparte de mi madre, se acerca y me abraza haciendo que moje su camiseta, le devuelvo el abrazo y estrujo su camiseta entre mis manos.

Harry: Tranquila mi amor- susurra sentándome en sus piernas.

Me quedo observándolo y noto que sus ojos ahora son negros.

Yo: Tus ojos son negros.

Harry: Nuestros ojos cambian de color dependiendo de las emociones, cuando tenemos hambre se ponen rojos, cuando nos sentimos tristes, enojados o algo así se ponen negros. Pero no estoy aquí por eso, quiero saber que te pasa.

Yo: Mi hermano dijo que nuestro bebé iba a ser una bestia igual que tú.

Harry: ¿Le dijiste lo que soy?

Yo: No, él es un lobo y no sé como lo supo.

Harry: Se salva porque es tu hermano, nadie habla mal de mi familia- dice con el ceño fruncido.

Yo: No le hagas caso, sólo lo dice por su naturaleza.

Harry: No es eso, ¿por qué demonios se mete con un bebé que ni siquiera ha nacido y que es su sobrino?, cada día entiendo menos a esas bestias.

En serio se ve molesto, no puedo creer que halla llegado este momento, recuerdo lo asustada que estaba sobre el embarazo, pensé que me abandonaría y míralo, ni siquiera somos novios y me sigue apoyando.

Harry: ¿Qué te parecieron las canciones?- pregunta y sonríe.

Yo: Fueron muy hermosas, Penny lo sabía todo ¿verdad?

Harry: Sí, le encargué vestirte y alejar de ti a cualquier pretendiente, lo hizo a la perfección.

Yo: No, ¿cómo se le ocurre decirle a ese chico lindo que tengo VIH?, eso fue injusto.

Suelta un gruñido y me abraza fuerte, tiene esa maña cada vez que se pone celoso y debo admitir que se ve adorable.

Harry: El único chico lindo que puede coquetearte soy yo.

Yo: Vaya ego.

Harry: Al igual que la única chica linda que puede coquetearme eres tú.

Yo: Y Leilyn.

Harry: Ahí volvemos con lo mismo- dice rodando los ojos haciéndome reír.