If I Stay (AxelxCelia)

*Capítulo 9*

La noche transcurrió con tranquilidad. Nada nuevo. Ningún inconveniente desde el hospital. Aquel día no sólo fueron Axel y su padre, esta vez Júlia también los acompañaba. Ambos lo habían prometido, además, la presencia de la pequeña allí podría animar las cosas en cierta forma.

Una vez llegaron Jude los esperaba en la puerta café en mano, se notaba que no había dormido nada, fruto de la preocupación pasada el día anterior. Con el día de hoy ya se cumplía semana y media.

La situación actual no había variado mucho desde el primer día. Celia seguía más o menos igual. Lo cierto era que a causa de lo ocurrido anteriormente lo peor se podía dar por pasado, en tan sólo unos días Celia podría llegar a despertar. Su hermano, Teddy, ya estaba perfecto. Físicamente se había recuperado rápido. El coche había dado por el lado de Celia y su madre, por lo tanto él era el que mejor parado salió.

Eso era en lo físico, en lo mental, estaba destrozado. Apenas comía, no quería hablar, jugar... Nada. Sólo pedía ver a su hermana, día y noche. Y se negaba a aceptar que sus padres ya no estaban, nunca más. No iban a volver a verle en los partidos, ni a llevarlo y recogerlo al colegio, ni darle besos por sus buenas notas... Nunca más, se acabó.

Jude fue el primero en ir a visitar a Celia, debido a su estatus como familiar, mientras, Axel se fue a ver a Teddy.

Axel: ¡Hey peque! ¿Cómo estás? Me han dicho que te has recuperado casi perfectamente.

Teddy: Quiero ver a Celia.

Axel: Ted... Sabes que todavía no puedes, aún no estás... Muy bien.

La verdad era que los médicos no lo dejaban ir a la UCI más que nada por el trauma que podría causarle ver en tales condiciones a su hermana. Celia aún tenía heridas superficiales más que visibles que podrían preocupar notablemente a Teddy y empeorar su salud mental.

Teddy: Pero quiero verla... -lagrimeó- Quiero ver a papá, y mamá, y volver a casa.

Axel: Sabes que papá y mamá ya no están, ya te lo han dicho. Tú mismo lo admitiste.

Teddy: Pero eso es mentira, Celia es la única que me dirá la verdad. No confío en nadie más.

Axel: ¿Tampoco en mí? ¿Crees que te mentiría sobre tu hermana o tus padres, con lo mucho que sabes que la quiero?

Teddy comenzó a soltar hipidos y las lágrimas empezaron a caer cada vez más fuertes. Se lanzó de sopetón al pecho de Axel y se abrazó fuertemente a él rompiendo a llorar desconsoladamente.

Axel, viendo que por fin se lo había creído, lo abrazó de vuelta mientras le acariciaba la cabeza y le soltaba palabras de consuelo. Él no se merecía nada de esto, ni Celia, ni sus padres, nadie.

Minutos más tarde Teddy consiguió calmarse.

Teddy: Quiero verla... Axel, por favor.

Axel: Sabes que no puedes pero... Lo intentaré, hablaré con mi padre, a ver si te deja unos minutos.

Teddy: ¡Gracias!

Un nuevo abrazo tuvo lugar entre ellos, esta vez de felicidad. Axel entonces recordó cuando conoció al pequeño hermano de Celia, aquel niño revoltoso que sólo buscaba jugar al futbol con él para imitarle.

#Flashback#

Axel: Así que tengo un admirador...

Celia: Más que eso, se pasa todo el día suplicándome por conocerte.

Axel: Debe ser un encanto, con la hermana mayor de la que aprende.

Celia: No me hagas la pelota, Blaze, te vigilo.