Es normal estar un poco loco

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¿Se estaría volviendo loco? Por más que rebuscaba en su memoria no lograba recordar a esas chicas, a pesar de eso sentía muy dentro de él que las había visto en alguna otra parte...después de meditarlo tanto concluyó que la chica que le habían presentado como Isabelle nunca se pareció a una compañera de clases, ninguna otra chica se parecía a ella.
Esa chica era la personificación de la mujer perfecta en lo sueños de Simon, no tenía las palabras correctas para describirla.
Sintió un dolor punzante en su cabeza, optó por dejar ese tema de lado, suficiente tenía con la banda y el instituto.
Habían cambiado tantas veces el nombre de la banda que se habían quedado sin ideas. Con Eric, Mark y Kirk habían quedado en un club para tocar y tenían que ensayar previamente a la presentación o fracasarían estrepitosamente. Cuando llegó a casa fue a su habitación y se recostó, tuvo el sueño mas extraño de su vida, la imagen de esa chica llamada Isabelle se aparecía en su cabeza una y otra vez...quería hablarle decirle que era la chica mas hermosa que había visto jamás pero no podía alcanzarla.

Al día siguiente se levanto con un dolor de cabeza que no soportaba, llamó a su madre para que le subiera unas aspirinas.
— Simon bebé no te veo bien, creo que sería mejor que te quedes en casa, ya mañana podrás ir a estudiar — dijo su madre.
— Está bien mamá, no iré porque realmente no me siento bien — dicho esto se volvió a recostar y durmió profundamente.
En la tarde lo despertó el sonido de su celular, era Eric quien le preguntaba el porque de su ausencia y si iban a practicar. Como se encontraba mucho mejor que en la mañana le escribió un mensaje rápido y le dijo que si practicarían que los esperaba en su casa en media hora.
Se dio un baño rápido y se apresuró a vestirse para esperar a sus amigos, cuando llegaron corrió a abrirles y comenzaron los ensayos.

— Deberíamos pensar muy bien que canciones vamos a tocar chicos — dijo Mark
— Es verdad, depende del lugar y de las personas que clases de música se toca — habló Eric mientras se disponía a beber un poco de agua
Simon no se había puesto a pensar eso, el lugar que los había contratado era un lugar donde iban en su mayoría gente deprimida a quienes les habían terminado sus parejas y querían ahogar sus penas en alcohol.
— Creó que tendré que pensar muy bien el repertorio chicos — murmuró Simon mientras les pedía ayuda a sus amigos para encontrar canciones deprimentes que sirvieran para los despechados.
Comenzó con una sencilla...

Beauty queen of only eighteen
She had some trouble with herself
He was always there to help her
She always belonged to someone else
I drove for miles and miles and wound up at your door
I've had you so many times but somehow I want more
I don't mind spending every day
Out on your corner in the pouring rain
Look for the girl with the broken smile
Ask her if she wants to stay awhile
And she will be loved
And she will be loved...

Y luego de muchas canciones para despechados dieron por terminado el ensayo. Se quedaron un rato más hablando del instituto y como no de chicas y Eric dio inicio a su ataque.
— Simon deberías pensar mas en salir con chicas que estar pendiente de "Star Wars" —soltó Eric con su típica sonrisa burlona.
— No tengo tiempo para chicas, además sabes que soy tímido y la única chica que ha estado toda mi vida y con la que he podido hablar sin tartamudear es... — no supo que decir, su mente se había nublado como por arte de magia, sabía que iba a decir un nombre pero no lo recordaba...y antes de que lo creyeran loco por hacer semejante pausa dijo lo mas obvio — mi hermana.
— Pero no te casaras con ella, tienes que salir a conocer a alguna, si quieres te puedo presentar alguna de mis primas — sugirió Kirk
— No, gracias...buscaré por mis propios medios.
Los chicos se marcharon luego de unas horas mas, como era tarde y tenia clases Simon fue a dormitorio directo a dormir, ya mañana tendría que ponerse al día en las clases que no estuvo.

Un particular olor llegó a sus fosas nasales, era dulce y muy muy tentador...quería llegar a el, saborearlo y saciarse hasta el cansancio. Lo quería, lo anhelaba más que nada y cuando por fin lo tuvo cerca se dio cuenta que había deseado la sangre del cuello de una chica a la cual no supo reconocer, se levantó sobresaltado por aquel loco sueño y su cabeza dolía más que ayer. Otro día de descanso no le sentaba mal, después de todo el nunca faltaba y era viernes, tenia que estar perfecto para el día siguiente en el que se presentaban. Ignoró las llamadas de Mark y Kirk, Eric había enviado un mensaje, no quería ser molestado por nadie solo bajó a comer y a darle explicaciones a su madre de porque no se había levantado antes para ir a estudiar y como no lo vio bien de aspecto lo dejo pasar, de ahí directo a su habitación a hacer algún maratón de un anime antiguo hasta que llegara la noche y pudiera dormir tranquilamente.
"Simon, Simon, Simon...ven a buscarme, estoy aquí"
"¿POR QUÉ ME DEJASTE?"
¿Otra vez esos sueños? No podía ser posible que se estuviera volviendo loco, el siempre fue un tipo cuerdo o eso creía. ¿De quien era esa voz tan triste y por que le reclamaba un abandono que el no cometió? Todo estaba tan confuso, vio su reloj que se encontraba en la mesa y este marcaba las 2am. ¡Dios! Que tarde que era se dispuso a tratar de conciliar el sueño y esta vez no soñó con chicas gritándoles, sangre o el rostro de la chica que le presentaron dos días atrás, se lamentó por el ultimo pues aquello sería un buen sueño.

— Buenas noches a todos los presentes, con ustedes "Sin nombre".
Simon rió ante tal afirmación, cuando le dijo al dueño del club que no tenían nombre no pensó que se lo tomaría tan a pecho.
Luego de muchas canciones tomaron un descanso para después salir y tocar la última de su repertorio de despecho.
— Simon ya no debes faltar al instituto han enviado mucha tarea — dijo Mark
— Lo sé Mark, no te preocupes es solo que estos días han sido extraños, tengo miedo de estar volviéndome loco
— ¿Loco? A que te refieres con... — Kirk no pudo continuar porque los llamaron al escenario.

Oh, my love, my darling,
I've hungered for your touch a long, lonely time,
Time goes by so slowly and time can do so much.
Are you still mine?
I need your love,
I need your love,
God speed your love to me.

Lonely rivers flow to the sea, to the sea
To the open arms of the sea
Lonely rivers sigh,
"Wait for me, wait for me"
"I'll be coming home, wait for me!"...

Mientras interpretaba esa hermosa melodía se percató en el público de un movimiento extraño, sentía la mirada de una chica, se sentía familiar...no podía parar de cantar pero trató de buscarla con la mirada.

Oh, my love, my darling,
I've hungered for your touch a long, lonely time,
Time goes by so slowly and time can do so much.
Are you still mine?
I need your love,
I need your love,
God speed your love to me...

Al terminar todos los asistentes aplaudieron, se disponía a bajar del escenario pero Eric lo detuvo.
— Ahora que la he visto aquí, lo he confirmado mi querido amigo Simon — dice Eric, al mismo tiempo que codea con una mirada pervertida a un atónito Simon — ¡Te lo tenías bien guardado amigo!
— No sé de que me estas hablando, Eric.
— ¿Como que no? Entonces...¿Quien es la preciosa chica de cabellos tan negros como la noche?
— ¿Isabelle? ¿Donde está?
— Entonces si la conoces, que gran mentiroso eres mira que no me la creí cuando vino ayer al instituto a buscarte diciendo que solo era tu amiga, si claro...¿Como no te has dignado en presentarnos esa belle...
— ¡Tengo que irme y no te atrevas a molestarla! —dicho esto Simon sale como alma que lleva el diablo, esquivando a la gente.
¿Quién más podría ser? Solo conocía a una chica con cabellos tan oscuros como la noche misma, detuvo sus pensamientos y su andar cuando la vio a unos metros frente a él mirándolo con esos ojos tristes, los mismos como el primer día en el que la chica con el pelo color zanahoria los presentó. Trató de acercarse los mas rápido que pudo pero ella salió cual relámpago a la salida del club, para cuando Simon estuvo afuera ella había desaparecido.
Esa noche al acostarse mantuvo presente el recuerdo de Isabelle, su imagen se quedó en su mente...sus labios rojos como la sangre combinaban con su vestido y su mirada tan profunda lastimó su corazón. Soñó con la esperanza de volverla a ver, tal vez su locura era causada por ella, tal vez por el deseo de querer acercarse más mucho mas a aquella mujer de ojos tristes.

Fuera de mi ligaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora