- ¡Arriba! - escuché repetidas veces.
Abrí los ojos perezosamente para descubrir a mi hermano en frente mía, gritando, lo que hizo que me asustara y pegara un saltito.
- ¡Debes levantarte! - gritó mientras me destapaba.
Yo solo volví a taparme mientras gruñía, pero Hobi volvía a destaparme.
- Tengo todo el día, ¿piensas despertar?
- La cama me pide, no,no, la cama me ruega que me quede con ella. ¡No puedo traicionarla! - dije dramáticamente.
Mi hermano se tumbó encima mío.
- ¡Me vas a matar! - dije intentando escapar -¡está bien, saldré!
J-Hope sonrió triunfante mientras se levantaba y yo cogí aire exageradamente.
- Toma, anda - me tendió dos pastillas y una botella de agua - una para la resaca y la otra te la recetó el médico.
Me tomé las pastillas con dificultad ya que eran bastante grandes.
- ¿Cómo durmió la princesa durmiente emborrachada? - dijo mientras caminábamos a la cocina.
- Con los ojos cerrados, ¿y tú?
Reí por su reacción la cual duró escasos segundos debido a que él también empezó a reír.
- Yo igual - dijo una vez estuvimos dentro de la cocina.
Hobi se empeñó en hacer tortitas ya que hoy era sábado. Lo sé, suena extraño, pero déjame explicártelo. Desde bien pequeños, todos los sábados nuestros padres nos hacían tortitas para desayunar. ¿A qué ahora no parece tan raro?
No hubo ningún problema hasta que... bueno, abrió el primer ingrediente. Con decirte que tanto Hoseok como yo acabamos con el pelo lleno de huevo, la cara de harina, la ropa de mantequilla, y los zapatos, en mi caso zapatillas, encharcadas de leche, creo que es suficiente como para que veas cuan desastroso fue aquello.
Mira que Hobi se empeñó en hacer las tortitas solo... Y ni siquiera se puso salvar una tortita, todas quemadas.
- Recuérdame que no te deje cocinar nunca más - dije mientras trataba de limpiar un poco la mantequilla - y que me compre zapatillas nuevas - reí.
- Cuando estés enferma y me pidas que te haga sopa, no pienso acceder - dijo haciéndose el ofendido.
- Se lo pediré a Jin - dije mientras le sacaba la lengua para luego correr y encerrarme en el cuarto de baño principal y darme una ducha bien larga, todo lo que llevaba encima no se quitaba en cinco minutos.
Una vez ya estaba bien limpia, vestida y arreglada, salí, lo recogí todo y me senté en el sofá.
Al poco rato, apareció mi hermano ya arreglado también, pegando saltitos y canturreando, el cual se sentó a mi lado.
- ¿Quieres ir a dar una vuelta? Hará tiempo que no paseas por aquí - dije alegre.
- ¡Helado! - gritó como un niño pequeño.
- ¿De verdad quieres desayunar helado? - reí.
- Aburrida- dijo con una mueca que enseguida quitó - ayer los chicos se quedaron en casa de Jin a dormir, puede que aún sigan allí.
- ¡Vamos a avisarles entonces! - dije alegre mientras le estiraba del brazo y lo llevaba conmigo en dirección a la casa de Jin.
Fuimos a paso ligero a casa de Jin, aunque tampoco demasiado.
- Tae dijo que mamá también estaba viva... ¿dónde está? - me digné a preguntar.
- Ella prefirió quedarse, por lo que pudiera pasar. Intenté llamarla, pero no lo coge.
Al legar a casa de Jin, llamamos al timbre varias veces y se pudo un escuchar quejidos y un gran "¡qué alguien desactive el timbre, por favor!", después de unos minutos, abrió un Jin despeinado y en pijama.
- Buenos días - saludó Jin alegre mientras se frotaba un ojo - ¿cómo llevas la resaca?
- Bastante bien para lo que bebí - reí nerviosamente.
-No deberías ni haber rozado la botella -dijo mi hermano para luego pegarme levemente en el hombro.
- ¡Oye! - me quejé.
Jin río levemente y se hizo a un lado para dejarnos pasar, no sin antes revolotearme el pelo rápidamente.
Al entrar a la sala, Jimin y Namjoon estaban durmiendo en el suelo, estirados a más no poder y Jungkook estaba hecho una bolita en el sofá también durmiendo ya que V estaba espatarrado, ocupando la mayoría de este.
- Al parecer los animaste a beber a ellos también, me quedé sin soju - dijo riendo.
- ¿Y luego me llamáis a mí borracha? - dije haciendo un puchero.
Hobi me sacó la lengua.
- ¿Y Suga? - hablaron por sí solos mis labios.
- Después de llevarte a casa no volvió - dijo Tae adormilado mientras se sentaba .
Espera... ¡¿Qué?! ¡¿Me llevó él?!
- ¿Vamos a dar una vuelta y desayunar algo? - dije cambiando de tema.
- Claro, aunque... primero hay que despertar a las bestias - dijoJin intentando sonar temible, cosa que fracasó ya que empezó a reír.
Bueno... ni aunque no se hubiese reído, no hubiera sonado temible, ¡Es Jin! el mismo Jin que la mayoría de su armario es de color rosa, al igual que el conejito de encima de su cama y que niega de esta forma que es una princesita muy diva:
Quedamos pensativos unos instantes y no hizo falta ni siquiera hablar, cuánta telepatía, ¿cierto?
Jin y yo fuimos a la cocina a disolver el contenido de los sobrecitos encargados de quitar la resaca y mi hermano fue a despertar a los demás, la tarea más difícil.
- Me sorprende que el pequeño Kookie también haya bebido - dije divertida mientras iba rellenando vasos con agua y se los pasaba a Jin para que mezclara la medicina con esta.
Una vez todo estaba listo, los llevamos a la sala y le entregamos un vaso a cada uno.
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¡Primera parte del maratón! Sé que dije que lo subiría entre ayer y hoy, pero realmente estuve ocupada y no tuve tiempo de escribir mucho. Así que terminaré de subirlo este fin de semana... ¡mil disculpas! Aún así espero que os haya gustado.
Esta vez, la pregunta no es sobre nada relacionado a BTS, bueno, en parte sí, ¿Los capítulos os parecen cortos? Dejad en los comentarios si así están bien o deberían ser más largos.
Eso es todo, ¡muchos besos y hasta pronto!
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SIEMPRE FUISTE TÚ (Suga y tú)
Fanfiction~PORTADA HECHA POR Iam_Celeste~ " - Desde que llegó todo el mundo en este instituto le conoce, es algo así como... - Jin quedó pensativo unos segundos - el chico malo. " " - Iré al grano, tenemos mucho trabajo por hacer hoy. - dijo el Sr.Choi y lueg...