Salía de su casa preguntándose si algún día volvería como él quería. Millonario, famoso y con todo el mundo leyendo sus libros.
Antes de salir, en su cuarto, se miró al espejo. Vio al mismo chico desgarbado y bajo de siempre. Cabello castaño, ojos de una mezcla entre el verde y el marrón, y el mismo metro con setenta de hace dos meses. Él no se veía diferente pero así se sentía. Este sería el nuevo capítulo en su vida que tanto espero.
Aun así fue difícil para él, despedirse de su vida y comenzar una nueva. Dejar a su madre y padre solos y no saber en cuanto tiempo los vería.
A la hora de la despedida, su madre lo vio con esos ojos suyos de color miel, en ese momento cargados de lágrimas que hacían un esfuerzo por salir de su pequeño rostro. Su padre era un hombre de pocas palabras, él nunca lo había visto llorar. Era alto, tan alto que Josh le llegaba a la altura de la nariz.
Lo único que lo consolaba y no lo hacía volver a los brazos de su madre era que iría con Matt Sky, su mejor amigo.
Matt era alto, tenía un cabello rubio del que siempre se enorgulleció, y unos ojos tan celestes que podrías verte en ello y parecer un pitufo. Era guapo. Cuando él y Josh iban a alguna fiesta las chicas siempre se fijaban en Matt y dejaban a Josh de lado. Él sabía el puesto que tenía en esa amistad, era el amigo del chico popular, el bichoraro.
En la vereda pudo distinguir el auto de Matt, un viejo camión Chevy del siglo pasado, era el camión o ir en bicicleta al aeropuerto.
Al verlo, Matt bajo para ayudarlo con el equipaje.
-¿Por qué tantos libros?-dijo Matt abriendo sus enormes ojos celestes
-También es un placer verte Matt - replico Josh con sarcasmo
-Siempre es un placer verme, Joshi
En el trayecto en el auto Josh volvió a pensar en su madre, odiaba romperle el corazón así, pero sabía que si no se iba ahora se quedaría estancado en ese pueblo para siempre y probablemente tendría una vida feliz, pero él no quería eso, él quería ser libre. Josh era como una hoja de un árbol, si se iba, no sabrías si regresa.
Sus pensamientos fueron interrumpidos por “Radioactive”. Matt estaba haciendo un ademán de tocar los palillos utilizando el timón del auto. Por primera vez, Josh quiso que Matt lo dejara en paz.