SECUELA DE MOONLIGHT.| Abigail Westher, después de quedarse en Narnia para reinar junto a Caspian X, se ve afligida por sus sentimientos hacia los hermanos Pevensie, en especial por un cierto azabache que le había dejado con la palabra en la boc...
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CAPÍTULO NUEVE: nueva pequeña mascota.
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— ¡Eustace! ¡Eustace!—, gritaban Caspian, Edmund y Abigail mientras buscaban al mencionado. Pero se detuvieron en cuanto notaron lo que parecía ser un pozo lleno de tesoros brillantes.
—Un tesoro—, balbuceó Edmund y Abigail sintió un nudo en su estómago, reconociendo que su anterior argumento había comenzado por su codicia.
—Problemas—, corrigió Caspian antes que Edmund bajara corriendo al lugar, tomando entre sus manos un zapato quemado.
—Eustace—, murmuró el azabache, reconociendo que era el calzado que el chico llevaba puesto antes de perderse. El trío avanzó, pero volvió a detenerse cuando un manojo de ropa quemada se encontraba en el suelo y Edmund se lanzó al suelo —. ¡No! No, primo.
—Lo lamento—, murmuró Caspian y Abigail colocó su mano sobre su espalda, acariciándola de arriba a abajo.
—Era sólo un niño. No debí haberlo dejado solo. ¿Qué pudo haberle pasado?—, inquirió Edmund, aún revolviendo las prendas.
— ¿En este lugar? Cualquier cosa, y no fue el primero—, señaló Caspian y Edmund y Abigail se giraron mientras el mayor se paraba frente al esqueleto de un Lord —. Es Lord Octesian. Hay que buscar su--, hizo una pausa cuando notó que Edmund y Abigail ya habían encontrado la espada —. Espada.
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Abigail y Edmund se adelantaron a Caspian cuando vieron la balsa en la orilla. El azabache comenzó a desatarla mientras Abigail la empujaba hacia el agua —. ¡Chicos!—, gritó Caspian.
Edmund se giró para ver al dragón y se lanzó sobre Abigail, empujándola hacia el suelo antes que el dragón lo tomará a él en lugar de a la chica —. ¡Edmund, no!—, gritó la morena mientras observaba al chico patalear entre las garras de la terrorífica criatura.
