|Carolyn| - Andy Biersack.

Nueve - Best friend?

-Carolyn- se escucha levemente una voz llamandome.Estoy al fondo de un hoyo oscuro.

No logro alcanzar la salida, comienzo a llorar.

¿Dónde estoy?, no puedo ni verme los pies de tan intensa oscuridad.Es horrible, me siento asfixiada.

-¡Carolyn!- gritan mi nombre ahora.

Abro los ojos, despertando.

Andy está sobre mí, mirándome con preocupación.Mis mejillas estan mojadas y de mis ojos no dejan de salir lágrimas.

-Andy- musito, rodeando su cuello con mis brazos.

Estoy temblando, pero empiezo a calmarme cuando escucho la voz de Andrew cantandome.

You're not alone...

We'll brave this storm...

Let's face today...

You're not alone...

Ese pequeño verso me hizo llorar aún más.Él me a consolado desde que llegó aquí.

*

Dos semanas mas tarde.

¿Dónde se había metido?, estoy buscando a mi ángel desde hace como una hora y media, pero ya fui ha todas partes a buscarlo, a veces creo que no quiere estar aquí, aunque lo dudo, el chico no me deja ni un segundo.

Me doy por vencida.

Tomo mi mochila y emprendo camino a casa después de un largo día de escuela.Es bastante estresante, hoy quería lanzarle una piedra a la profesora de química, tanto de Ca, H, Br y Cu me tienen bien mareada.No es que la odie, tan sólo no me agrada...en nada.

Oh, y también al maestro de ciencias de la vida.¿Acaso nos estará insinuando que somos zorras?, pues parece que si.Menciona algo sobre "deben cuidarse, por que siempre ocurren, los niños no deseados", "las mujeres son las más propensas a insinuar el sexo".

¿Esta loco?...

Debo caminar mucho para llegar a casa, me había acostumbrado a ir en Julie todos los días, agarrada a la cintura de Andy.Comencé a patear la piedra que se me cruzó.

De pronto escuché unos gemidos que provenían del callejón.Como toda metiche me fijé para ver de quienes se trataba.

Inmediatamente me arrepentí de haber asomado la cabeza.

Andy y Thalia, besándose con demasiada desesperación.Él la toca por todas partes, casi como si fuera la última vez que tocaría a una chica.

Siento un apreton al corazón, es como si algo se rompiera en mil pedazos dentro de mi ser.Pero, Andy solamente es un ángel al que mandaron a protegerme, nada mas.

No puedes quererlo, Carolyn, no debes.

Me repetí eso muchas veces, hasta que me calme y salí rápidamente ahí.Corrí todo lo que quedaba de camino y llegué con la lengua de fuera, parecía perro.

-Hola, hija- salió mi madre de la nada y casi escupo el agua que servi en el vaso- ¿Andy no viene contigo?.

-¡No!, no quiero que menciones a ese imbécil en mi cara- espeté, dejando el vaso en el lavadero.

¿Por qué siento tanto coraje?.Ya me repetí quinientas veces que ese tipo sólo es un caído que debía hacer un trabajo de caridad para poder quedarse en el cielo.

Él sólo piensa en sí mismo.Siempre fue así.

Él no me quiere.