Laura
Estaba caminando a mi salón, y como de costumbre sacó mis libros que están debajo de mi banca en un pequeño casillero, y como siempre, una nota ahí. La verdad no se cuando empezó a mandarme notas, pero estoy muy segura de que nunca parara, ya es algo constante que quizá el ya ni puede controlar guardar esos pensamientos e insultos hacia mi. Las notas según quién las mande se pueden significar mucho o poco, aún que siendo yo, cualquier nota es importante, pero hay algo que hace diferentes esas notas, algo que hace que me duelan más, es que estoy pérdidamente enamorada de Samir, el chico que me envía las notas.
Estoy enamorada como tonta de el hace como unos 2 o 3 años, el antes casi no me notaba, ahora lo hace mas que nada con esas tontas notas.
