Capitulo 15

380 45 5
                                    


CAPITULO PARA MAYORES DE 18 AÑOS.

Dos semanas después...

Despierto por unos besos en el cuello. Y por su inconfundible colonia, se que es James. Mierda, este chico me pone a cien. De repente, tengo calor, pero que empezar a calmar mis hormonas. Si bien no tuve relaciones sexuales estos dos meses, justamente ahora, la calentura me está pasando factura.

¿Me parece ami o yo me desperté pervertida en el día de hoy?

Te mueres por estar con el.

Cállate.

Me doy vuelta para tomarlo por los hombros y ponerlo debajo mío. El me mira sorprendido por lo que acabo de hacer y lo entiendo. Hoy me levanté más juguetona que nunca.

Clavo una sonrisa de satisfacción al acercarme a su cuello para dejar un suave beso y sentir como se estremece ante mi tacto.

- Buenos días James.

- Si que son buenos días pequeña.

De un salto salgo de la cama para ir al baño para asearme. Me doy la vuelta y solo veo a James sentado en la cama y mirándome con la mandíbula desencajada. Por lo que río y me dice:

- ¿Es que no me vas a dar un puto beso?

- Lo siento cariño, pero sabes que antes de besarte tengo que lavarme los dientes. No querras besar a una muerta ¿No?

Sin dejar a que me responda entro al baño y cierro la puerta. Puedo escuchar su risa desde aquí y se que amanecer de esta forma es lo mejor que me ha pasado.
Una vez que lave mi cara y cepille mis dientes se que mi cabeza no tiene solución, por lo que me lo acomodo con las manos para que quede un poquito mejor.

Un una vez que salgo del baño y voy a la habitación el alma se me va a los pies.

James sin remera.

James con su torso marcado

James con un café en sus manos.

La jodida perdición.

- Cariño si no secas tus babas que están por caer entre tus hermosos pechos, se mojará ese hermoso vestido pijama.

Me causa gracias ver cómo han pasado ya dos semanas en que estamos intentando que la relación funcione. Luego de ese día en el que me dijo que le gustaría formar una relación conmigo, no le contesté, por miedo a que en un momento de vulnerabilidad me equivocarse, pero a medida que pasaron los días me di cuenta de que siento cosas por James que antes no sentía por Lucas, el es atento, cariñoso, divertido y muchas cosas más.  Entre ellos, está la palabra caliente.

No dudó un segundo esta vez en abalanzarme sobre el para darle un dulce beso que el no tarda en responder. Siento como me aprieta la cintura para que sienta su dura erección.  Oh la-la

Sin perder más tiempo agarra de los bordes de mi vestido y me lo saca por la cabeza quedó solamente en ropa interior por lo que para ser justos le saco su pantalon y veo su boxer negro con un bulto bien grande.

Mamá mía...

Sin tantos preambulos prosigue a sacarme mi sujetador y mis pequeñas bragas. Me hace acostar y empieza lentamente a pasar su lengua por mis pechos por lo que agarro su boxer y lo tiro para abajo para que se lo termine de sacar el. Agarro su erección y hago lo mismo que me hace el, lo tortura lentamente. Arriba, abajo. Siento como la respiración de los dos cada vez se hace más pesada. Así que una vez que terminó de darle la atención a mis pezones que quedaron duras como piedras, con mi mano en su erección lo llevo a mí entrada.

Pone sus manos al lado de mi cabeza y me penetra con fuerza, se que no le gusta despacio por lo que araño su espalda.

Ah - Ah - gimo.

-Pequeña - Levanto mi mirada - Así está mejor, mírame siempre que hacemos el amor.

Sonrió como un boba por lo que acaba de decir. Pero vuelvo a gemir con fuerza cuando lo hace más rápido. Me encanta cuando lo hace así.

- ¿Te quieres dar vuelta?

Sin darme tiempo a pensar me quedo en cuatro patas frente a el. Con James podemos divertirnos de cualquier forma, pero en el sexo, es un salvaje.

Entra de una estocada en mi y me quedo con ganas de más. Quiero mas.

- Ja-mes - gimo- Más fuerte.

Siento como acelera sus movimientos y me aprieta más con sus brazos en mi cintura, es la puta gloria.

No sé cuánto tiempo pasa que empiezo a sentir el orgasmo por lo que cuatro embestidas más me corro. Y el, conmigo.

Me acuesto esperando regularizar mi respiración, siento como James se acuesta a mi lado y pasa su brazo por debajo de mi cabeza y con la otra hace círculos en mi espalda.

- Así quiero amanecer siempre. - me dice en un tono bajo.

- ¿Con un polvo mañanero?

- No corazón. Quiero amanecer contigo así siempre... A mi lado.

——————————————————

Capitulo corto pero picante... Más tarde subo otro..

Espero que les guste.

Un beso.

Sin ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora