Family Planning(hana Yori Dango)

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Capítulo Quince: Ataque Preventivo

— ¿De verdad? —preguntó Kaede impasible. No parecia sorprendida, era como si estuviera enterada de todo.

— Si —declara Tsubaki lealmente cruzando los brazos de manera desafiante — ¡Tirarla a la calle es como hechar a un miembro de la familia Doumyouji!

— No, esta bien, Nee-san — murmuró Tsukushi débilmente. La presencia de Kaede era muy intimidante y la hacia sentirse muy pequeña. Toda la adrenalina de su reciente aventura habia sido drenada — Me marcharé, realmente no me quiero quedar aquí con tu madre alrededor…

— Espera Tsukushi —dijo Tsubaki gentilmente — Me encargaré de esto, solo ve a tu cuarto. Tsukasa, acompañala.

— Vamos —soltó Doumyouji secamente. La agarro de la mano y antes de salir se giro a su madre y le lanzo una mirada mordaz — No harás que se vaya, si ella se va, yo lo haré también.

Una vez dentro de su cuarto, Tsukushi se sintió un poco más tranquila. La presencia de Kaede que tan desalentadora, tan escalofriante. Era como una pesadilla embotellada dentro de la figura de una mujer de mediana edad.

— ¿Estás bien, Makino? —dijo Doumyouji, mirándola con preocupación. La sentó en la cama y la sostuvo en una posición cómoda.

— Estoy bien —mintió Tsukushi — Para ser honesta, no quiero quedarme aquí.

— No, quiero que te quedes —dijo Doumyouji agarrando su mano, como si su palabra fuera a resolverlo todo.

— Sabes que con su SP alrededor ella averiguará todo tarde o temprano —suspiró Tsukushi acariciando su estomago falso.

— De hecho es más seguro aquí —la tranquilizó Doumyouji — Si te marchas inmediatamente, seria mas sospechoso.

Tsukushi sonrió ligeramente a Doumyouji, que por su parte se puso nervioso. La llegada repentina de Kaede a Japón la impresionó. No esperaba que estuviera aquí tan pronto. Conociéndola, aumentaría aún más la vigilancia a su alrededor, y su secreto sería revelado muy pronto.

¿Pero, el quid del asunto no era conseguir que Kaede aprobara su relación, aun si fuera por tales medios? ¿No era esto por lo que ella había estado fingiendo estar embarazada desde un principio?

¿Y si Kaede realmente aprobara su relación? ¿Tendría ella que casarse con Doumyouji inmediatamente? ¿Y su futuro? ¿Todavía pondría asistir a la universidad, como había sido su sueño todos estos años? ¿Conseguir un trabajo? ¿Volverse independiente, y solo depender de sí misma?

Su torrente inquietante de pensamientos fue roto por Tsubaki que llamó suavemente a la puerta.

— ¿Puedo entrar, Tsukushi, querida?

Tsubaki entró y se sentó al lado de Tsukushi.

— Por el momento, todo está resuelto. Tama y yo logramos imponernos para que te deje quedar aquí. Tama aun le está dando un sermón mientras hablamos.

— Gracias —dijo Tsukushi suavemente — Pero no era necesario buscarse tanto problema. Prefiero estar en casa.

— Tienes miedo de Mamá, ¿no es así? —dijo Tsubaki — Puedo decirte, que eres como era yo. Yo también le tenía miedo. Pero debes vencer ese miedo, porque estarás relacionada a ella para el resto de tu vida.

Tsukushi lamentaba que Tsubaki estuviera tan asegura de que ella se casaría con Doumyouji, porque ella sería la más lastimada si su relación llegara a fallar, o si no les permitieran casarse.

— Pienso que usted tiene que salir un poco de la casa. ¿Quiere escaparte de ella, verdad? No te preocupes, de todos modos ella apenas está en casa —dijo Tsubaki de modo tranquilizador — Ah, sea como sea, tu permiso para estar ausente se termina hoy. Tienes que volver a la escuela mañana.