___ siguió flotando en su nube de Helio camino a la cafetería. Pensar que tenía suerte era poco. ¿Lo era? ¿Desde cuándo su vida había dejado de ser una pesadilla y convertido en un agradable sueño? Seguro desde que se dio cuenta que estaba enamorada. Justin la sorprendió abrazándola por detrás y le dio un beso en la mejilla. Ella lo miró con el rabito del ojo y le regaló un fugaz beso en los labios, luego le sonrió. Justin notó la belleza de su rostro. Y de un modo casi extremo, amaba verla sonreír. La amaba a ella. Aunque, eso no era nada nuevo ¿Cómo podría sentir algo tan lindo y notarlo tan tarde? Suspiró aliviado y agradeció que no hubiera sido demasiado tarde para él.
-Por tu cara – le dijo y le toco la nariz con la punta de su dedo índice – pienso que son muy buenas las noticias que tienes para mí, eh… - ___ asintió riendo aun mientras buscaba una mesa libre en el amplio espacio de la cafetería. No se imaginaba la cara que pondría Justin cuando le dijera su buena noticia y es que, últimamente estaba tan acostumbrada a contarle todo, que la ponía de buen humor. Seguramente terminaría por abrazarla como siempre lo hacía o simplemente besarla.
La mesa de la izquierda estaba desocupada y no había mucha gente ese medio día, lo que era raro pero poco importante, Justin se sentó primero y ella después.
-¿entonces…? – Comenzó - ¿Qué es eso que te llena de alegría? - ____ frunció los labios - ¿Qué soy tu novio? – Bromeó – o no, ya se, Que hoy cumplimos dos semanas y media juntos – ella rio.
-No, Justin, es algo increíble.
-Dime a ver.
-Ian Ducasse me llamó – a la sola mención del nombre, la sonrisa en el rostro de Justin desapareció como por arte de magia. Ese tonto “tengo mucho dinero Ducasse” otra vez, se había olvidado completamente de él desde la última vez que lo había visto, la vez en que le dijo que ___ era su novia. La idea de que la llamara, le desagradaba en demasía. - ¡Tiene una nueva oferta para mí! - Continuó la castaña desbordando entusiasmo por todo su cuerpo, jamás pensó, que él por lo que había pasado el día del hotel, volvería a creer en ella, pero allí, estaba, brindándole una gran oportunidad. Y esta vez era distinto, porque no era cualquiera, era “E&T” y ese solo hecho lo cambiaba todo, lo hacía diferente ya que ellos no te hacían cambiar el estilo, ellos no buscaban cambiar a la futura estrella, ellos te tomaban tal cual eres y hacían de eso un nuevo estilo, y eso, precisamente eso, era lo que ella quería. Dejó de reír y se tornó algo confundida al momento de notar que no todo era felicidad en la cara de Justin, levantó una ceja - ¿No te alegra? – concluyó.
-No me gusta que ese tipo te llame – le soltó fríamente, No le respondió la pregunta - ¿Por qué le recibes llamadas? - ___ frunció el ceño ¿Acaso estaba bromeando?
-¿Te estas escuchando? – Le dijo sorprendida. No, sorprendida no, era más que eso, ahora estaba completamente llena de seriedad – Justin, me ha brindado una oportunidad en “E&T” ¿Sabes lo que es eso? ¿Cómo no le voy a recibir llamadas?
-Ahh, entonces no te molesta que te llame.
-No.. No he dicho es – se defendió - y la verdad que ¿Qué tiene de malo que lo haga? ¿Cuál es el problema, a ver? – Justin frunció el ceño y ella dejó escapar un poco de aire.
-¿Cómo que cual es? – Reprochó él - ¿Te gustaría a ti que yo le recibiera llamadas a Laine? - Wao. La castaña se quedó con la boca abierta, esto era… el colmo del cinismo.
-¡Claro que no! – Renegó – y no es lo mismo
-¿Por qué no lo es? – vacilo Justin.
-¿Por qué? – se rió falsamente llegando a sentir que simplemente no lo entendía. - Ohh, será porque Ella fue tu novia, la besaste y la querías ¿Acaso Quieres más? Ian y yo nunca hemos tenido más que una relación de trabajo y amistad.
