El periodo de descanso ha comenzado, aún no puedo creer que sólo han pasado dos días desde que salimos de la escuela... Muchos de mis compañeros han empezado a visitar a sus maestros, para ir familiarizándose con las actividades. Yo por otro lado... Sigo indecisa, no estoy segura de qué es lo qué quiero o porque profesión me inclino más... Tengo algo de incertidumbre, y siento el peso de las expectativas de los demás sobre mis hombros... Aunque también sé que ellos desean lo mejor para mí y lo que me haga feliz...
Así que como ya es costumbre, camino hacia el lago para ver a mi hada favorita y despejarme un poco.
Cuando llegó, noto que ella ya está esperándome en la orilla del lago, así que corro hacia ella.
-Hola mi pequeña Maia -acaricia mi cabello y besa mi coronilla
-Ya no soy tan pequeña Thali- suelto una risilla
-Tonterías, para mí, siempre serás mi pequeña, mi niña- Thalia se ríe- soné como toda una madre
-Bueno eso es porque te has convertido en mi madre- el abrazo lo hago más fuerte
-Oh mi niña- se le quiebra la voz y noto que su expresión muestra que está conmovida por lo que le dije, así que me alejo un poco y le doy un beso en la mejilla
-Ahora vamos a casa, quiero una de tus deliciosas tisanas -ella vuelve a reírse y avanzamos hacia su casa
Una vez en su casa, Thali me pregunta qué es lo que me sucede, a lo qué suspiro y comienzo a contarle sobre la profesión que debo escoger pero que no estoy para nada segura, le cuento de mis dos opciones y lo que esperan que sea, que no deseo decepcionar a nadie, pero tampoco sé exactamente qué hacer... Thali me abraza, acaricia mi cabello.
-Mi pequeña niña, debes hacer lo que tú deseas, lo que dicte tu corazón, lo que creas es correcto para ti, no te preocupes por lo que los demás digan o quieran para ti, eso es algo que debes elegir, porque si cumples las expectativas de los demás, podrías arrepentirte el resto de tu vida por no hacer lo que tú deseabas y lo que te apasionaba. Así que olvida esos detalles y centrate en lo que deseas - suspiro y me quedo abrazada a ella.
-Gracias Thali, es algo que me faltaba escuchar...- ella ríe y besa mi frente.
-Sabes que siempre tendrás en mí, una amiga, una consejera que te guíe cuando así lo necesites, eres mi niña después de todo- sonrió, me separo de ella y le doy un beso.
-Y eres la mejor haciéndolo- ella ríe y comienza a hacerme cosquillas. Después de un rato de jugar y bromear con ella, comemos postres y tomamos sus tisanas, además de que le ayudo a preparar su vestido para el festival del solsticio de verano, lo cuál es algo que me encanta.
Una vez que terminamos, me despido de ella y regreso a casa. Mi humor ahora está elevado y decido pensar en lo que realmente me gusta, y lo que podría hacer. Sin embargo, antes de llegar a mi casa noto una extraña sombra saliendo de los árboles, me quedo estática, preparada para salir corriendo si es necesario.
-Hola Maia- Jake saluda, me relajo
-Me asustaste...
-Lo siento- dice encogiéndose de hombros y acercándose a mí.
-Sucede algo?
-No... Bueno... Quizás, podemos hablar?
-Sí, quieres entrar a mi casa...-no término la frase, cuando él me interrumpe.
-No, no deseo despertar a tus abuelos, podemos caminar... Me gustaría más.
-Está bien, pero pareceremos almas en pena- suelto una risa para aliviar la tensión que se ha creado
-No es como si no lo hubiéramos hecho antes- ríe él también y sé que tiene razón, desde que descubrió que iba con Thalia, desde entonces ambos nos hemos escapado a ir a verla y terminamos vagando los dos en la noche.
-Bien, hacia dónde quieres caminar?
-Podemos ir hacia el risco, el que está cerca del mar? -asiento y comenzamos a caminar.
Mientras caminamos hacia allá, puedo percatarme que Jake está tenso, pensativo y qué algo le molesta, sin embargo, decido esperar a que lleguemos para abordarlo. Así que decido contarle sobre el vestido de Thali y el festival de solsticio de este año, y que será especial porque la Luna llena caerá el mismo día. Le cuento además que para ese día estamos invitados y que Thali tiene una sorpresa para mí, y que sé que su sorpresa es seguro un vestido, pero el como será, es la verdadera sorpresa.
Al llegar al risco, veo como la fase creciente de la luna se refleja en el mar y la brisa del choque de las olas crea un arcoiris.
-Se ve hermoso no crees?- preguntó a Jake
-Si, bastante y eso que aún no es la fase llena... Sabes, me gusta venir aquí a pensar, reflexionar o sólo observar el horizonte, cuando sale el sol... Es increíble... Me calma... En si, venir aquí me gusta.
-Y es por eso que venimos? Qué quieres decirme...? Qué sucede? Te noto tenso... -Jake se gira hacia el mar y evita el contacto conmigo.
-Maia... Es sólo que... Sabes que mi hermano está enfermo... Y por esa causa, mi abuelo cree que no es apto para dirigir a la familia, así que... Voy a irme, en unos días, me iré a vivir con mi abuelo y estudiaré allá, para convertirme en la cabeza de mi familia -al escuchar eso me quedo sin palabras y siento como si me destrozarán el corazón.
-Oh...- es lo único que logró decir, Jake gira y al verme, parece sorprenderse, estira su mano y la lleva a mi cara limpiando mis lágrimas, me quedó anonadada, pues no sé ni porque estoy llorando
-Lo siento Maia... Yo no deseo ir, quiero quedarme aquí, contigo... Pero, son órdenes de mi abuelo.
-Entiendo, es lo que debes hacer... Y es por tu familia, y también por tu bien, si... Debes irte... Está bien- mi voz se quiebra, Jake me jala hacia él y me abraza. No sé porque me duele tanto, no lo comprendo... Sólo sé que él se irá y con él una parte de mí.
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Horizonte
Short StoryCuento corto Maia es una joven que después de perder a sus padres conoce a Jake, alguien que viene a cambiar su vida... Sin embargo, el destino los separa, y ella suele ir a caminar a la playa viendo hacia el horizonte, esperando que él retorne