Ella estaba frente al espejo siendo arreglada por aquellas personas, cuando estuvo lista, la dejaron sola, observó aquel vestido y lo hermoso que era.
Su madre entro a la habitación felicitandola y diciéndole lo hermosa que estaba, la abrazo y le dijo que aquello era lo mejor para ella, ella no dijo nada.
Le dijo que ella se adelantaria a esperarla en la Iglesia para que todo estuviera perfecto para cuando ella llegue.
Su padre entro y le preguntó una vez más si estaba segura de aquella decision que todavía estaba a tiempo de retractarse, ella lo abrazo fuerte y te quiero papá fue lo que dijo.
Bajo las escaleras mientras observaba como el jardín y la casa estaba adornada para recibir a la gente después de la ceremonia.
Aquella limosina estaciono en la entrada de la casa esperandola para llevarla a aquella Iglesia, subió y después de varios minutos por fin pidió que se pusiera en marcha.
Pensó en todo en cada instante que había pasado con Tomas en todo lo que sentia por el y las lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas.
El vehículo frenó de golpe y escucho al chofer maldecir, abrió la pequeña ventana preguntándole si estaba bien, ella respondió que si y preguntó que había pasado un loco se nos atravesó señorita, pero no se preocupe ya lo soluciono dijo.
Cuando escucho su nombre Lana repetia una y otra vez, ella abrió la puerta y bajo y se encontró con Tomas, pensé que no te alcanzaría dijo.
Lana no puedo permitir que te cases, se que soy egoista por pensar sólo en lo que yo quiero pero te amo y no puedo sacar esto que siento de mi.
Ella lo observó por un instante y se lanzó a abrazarlo feliz cumpleaños le dijo besandolo, el sonrió feliz cumpleaños Lana le dijo besandola nuevamente.
Ella giró y le entrego aquel anillo al chofer pidiendo que se lo entregará a Adolfo y el ramo pidió que se lo diera a su mamá, subió a aquel auto sin saber a dónde irían.
Pero estaba con el, si era su hermano pero también era el hombre que amaba con todas sus fuerzas y aquel día habían cumplido la mayoria de edad eran libres de hacer su vida.
Su mamá se desmayó al ver aquella limusina llegar sin Lana, siendo el centro de atención de todos los presentes.
Ellos estaban en aquel aeropuerto con aquellos boletos en mano, viviremos ahí dijo ella sólo por el momento cuando no nos guste más iremos en otro lugar pero siempre estaremos juntos dijo besandola.
La peor parte fue cuando su madre vio que la empresa y todos los vienes de los abuelos habían pasado a nombre de Tomas, el era el dueño de todo lo que ella tanto anhelaba.
Su padre en cambio sonrio al ver que su padre había preferido heredar todo a Tomas en vez de a él pero era lo más lógico, el siempre fue tan débil y su papá siempre odio aquello.
Estaban en aquella playa recorriendo tomados de la mano, siendo completamente egoístas y sólo pensando en ser felices.