Si Los Chicos de Die Mannschaft Fueran Chilenos

El Confesionario de Marc

Los chicos se encuentran sin profesor, por lo que todos están haciendo desorden. Entre todo el caos, Marc armó una especie de “Confesionario” improvisado en su puesto, poniendo una cortina (que había sacado previamente de las ventanas de la sala) sobre su mesa. Bernd lo ve y se acerca.

Bernd: Marc, ¿qué haces?

Marc: Bienvenido al confesionario. ¿Querí confesar algo?

Bernd: Bueno.

*Bernd pone una silla y se sienta de frente a Marc*

Bernd: No puedes decir nada.

Marc: No diré nada, lo prometo.

Bernd: Es que Marc, tú eres súper... Cahuinero

Marc: Te doy por firmado que sólo soy así con las copuchas de los profes.

Bernd: Bueno. Confieso que me canso de ser mateo. Es estresante.

Marc: ¿Eso nomas?

Bernd: Por ahora.

Marc: Ay Bernd, tú no tienes secretos oscuros. Es imposible. Eres un ángel.

Bernd: Si quieres secretos oscuros, prueba confesar a Mario.

Marc: ¡Tienes razón!

Bernd: Bueno, me retiro.

*Bernd se va a sentar a su puesto*

Marc *gritando*: ¡Mario, ven!

*Mario llega al confesionario de Marc*

Mario: ¿Para qué sirvo?

Marc: Para confesarte.

Mario: ¿Confesarme? ¿Mis secretos?

Marc: Sí, con confianza.

Mario: Bueno *se sienta* confieso que tengo sueños eróticos con Marco, le hago de todo, y cuando despierto tengo la media espada...

Marc*sorprendido*: ¿Qué?

Mario: Te la creíste *se ríe como ardilla*

Marc: Ya po weón, confiésate.

Mario: Confieso que me gusta leer y soy más nerd de lo que creen.

Marc *en shock*: ¿Pero cómo es eso si estás que repites?

Mario: Lo hago por Marco, es mi mejor amigo y si a él le va mal a mi también.

Marc: Wow, sabía que tu amor de amigo por Marco era grande, pero nunca imaginé que era taaaaan grande como para casi repetir por él.

Mario: Tú no le digas a nadie.

Marc: Lo prometo.

*Mario se va a conversar con Marco. Mientras tanto llega Thom y se sienta en su puesto al lado de Marc*

Thom: ¿Qué haces, compañero?

Marc: Confieso gente.

Thom: ¿Te volviste cura?

Marc: Ni cagando sería cura, soy ateo, además tendría que renunciar al porno.

Thom: Cosa que no harás nunca.

Marc: Exactamente. Bueno, ¿quieres confesar algo?

Thom: Confieso que soy un extraterrestre y el marcianito de la cumbia es mi hermano chico *se ríe* Naaah, confieso que shippeo demasiado a Bernd y a Brandt, y a Marco con Mario.

Marc: Yo igual weón, Bernd con Brandt se ven excelente juntos, y Gotzeus es la perfección, es como shippear a Bob Esponja con Arenita.

Thom: ¿Lo dices porque a Marco le gusta el color amarillo y Mario parece una ardilla?

Marc: Tú me entiendes.

*Chocan los puños y continúan conversando. Como cinco minutos después llega Manu*

Manu: ¿Aquí está el confesionario?

Marc: Sí, dígalo con confianza.

Manu: Perdón por la expresión, pero nuestro profe jefe me cae como las pelotas.

Thom: Eso pasa con todos en el curso.

Marc: Pero yo lo tengo comiendo de mi mano.

Manu: Y confieso que quiero ser como tú, Marc. Eres seco, mandas a todo el mundo y no dejas que nadie te mande a ti, tienes el carácter más bacán del curso, eres un ídolo.

Marc *sonriendo*: Aw, Manu, me halagas. Es cierto que no dejo que me manden. En esta vida debes mandar más y obedecer menos.

Manu: Con esa actitud serías un gran profesor.

Marc: ¿Profe? ¿Yo? Jamás, no me puedo convertir en aquello que juré destruir.

Thom: Que Marc sea profe es tan imposible como que Marco y Mario dejen de quererse.

Manu: Todos sabemos que eso no va a pasar jamás.