02 Agónico Dolor

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De pie, en la ventana, su cuerpo tiembla por el frio; no, no es el clima, es el frio de la soledad. Sus manos pálidas más de lo normal, posadas en el vidrio de aquel gran ventanal. Sus pies descalzos, el cabello enmarañado, los ojos vidriosos y rojos. La piel de su cuerpo curtida y gastada. Sus pensamientos, una bola de agónicos sentimientos.

-Aquellas mañanas que despierto y tu calor no está, en mi cama, nuestra cama, mi corazón se agita, se acongoja, se debilita. El sabor de la soledad, en un estibo de agonía, el dolor infernal, que me da a probar tu partida.

Te extraño, te necesito, no es amor, es compañía, es cariño, es la costumbre de no estar en la melancolía.

Haz entrado en mi vida, como luz en oscuridad, llenando mis días con lo que podría ser felicidad. Dependo de ti, como el recién nacido depende de su madre, dependo de ti, porque sin ti no se vivir. Te extraño, te necesito, el dolor es fuerte, es latente, cada día es más potente.

¡Por favor! no demores en venir, me muero sin ti. Te necesito a mi lado, sentir tu calor, sentir tus brazos que me protejan con fervor. Sentir tus caricias, tus intensas caricias, aquellas únicas que me llevan al límite de la pasión. Necesito tus labios, embriagarme con tu sabor, con tu cuerpo atrapando el mío, con el poder de tu infinita pasión.

Te necesito, te extraño, me duele el corazón.

Te necesito, te extraño, Soy dependiente de ti amor.

Por favor, ¿cuándo volverás?

Han pasado tres meses desde tu partida, han pasado tres meses de aquella maldita y deliciosa despedida. Necesito tus besos, tu calor, tu piel, sentir aquel poder de lo que mis manos pueden en tu cuerpo ejercer.

Por favor vuelve pronto, que sin ti soy inútil, soy un cuerpo sin alma, sin motivo de valoración.

Contigo soy quien soy, contigo puedo ser yo.

Contigo me pierdo en los mares de la infinita vehemencia de la satisfactoria pasión

Contigo puedo ser apasionada y tierna, Contigo no finjo ser una princesa, contigo no sigo aquel estúpido protocolo, ni etiqueta, contigo soy esa mujer que se deja dominar por sus bajezas.

Me pierdo en tu cuerpo, olvidándome de lo que hay en el exterior. Te pierdes en mi cuerpo, olvidando tu dolor.

Te necesito, pero también me necesitas a mí, te extraño, ya sin ti no puedo vivir.

Por favor regresa pronto, por favor Dios mío, ten piedad de mí. Me duele el pecho, me duele el alma al no saber nada de ti.

Dios, creador de todo lo bueno en este mundo, dime porque tengo que sufrir. Mi vida es un infierno si él no está aquí.

Las lágrimas corren por mis mejillas, el agónico dolor quiere salir. Un grito ahogado me está matando por no dejarlo resurgir.

Caigo de rodillas, mis piernas no quieren sostenerme. Mi cuerpo está débil, mi respiración agitada, mis latidos acelerados, mi mente solo piensa en él. Por favor, dame fuerzas, que a él no le gustaría verme así.

¡Lo extraño!, lo extraño tanto. Necesito más que su cuerpo para satisfacer mi deseo, necesito su ser para poder mantenerme en pie. Necesito de él pues soy un saco de huesos, sin alma sin ser.

El cuello me duele, es como si me estuviesen ahorcando. Las manos me tiemblan, ¡no!, es todo mi cuerpo el que está temblando. Los labios semi abiertos, las lágrimas siguen rodando. Me siento patética, me siento trágica, me siento fúnebre me siento destrozada.

¿Por qué continuo llorando?, no lo sé, si no lo amo, ¿por qué este sentimiento están fuerte?, si yo a él no lo amo.

Mi cuerpo siente deseo, mi corazón pide su guerrero. El cuida de mí, y yo velo por él.

RecuerdameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora