Epílogo

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[— ¡Pero que agraciada manera de deslizarse por el hielo! Desde hacía tanto tiempo que no se veía a alguien como éste chico. 

— Así es, y pensar que éste año es su debut en el patinaje a la edad de 25 años, ¡es realmente magnífico! A pesar de la edad brilla como una estrella joven, se ve que tiene mucha carrera por delante.  

( . . . )

— Esperamos a los jueces para ver la puntuación del joven Chandler, todos apuestan por él como el ganador del oro en éste Gran Prix Final... ¡Aquí está! La puntuación dada para Gabriel Chandler es— ]

— Pff, si que te gusta ver mucho ése vídeo, ¿no es así Huny? — Gabriel rió alegremente sin dejar de ver al frente, manejando un auto de lujo bastante llamativo.

Ahora eran todos unos adultos, se habían graduado de la preparatoria, la carrera que cursaron ambos de administración de empresas realmente no les importó mucho ya que tenían otros planes, como por ejemplo la carrera como profesional de Gabriel y el vivir como mantenido de Hunter.

— ¿Y cómo no? Hace no mucho que rompiste un record mundial, ganaste el oro en todas las competiciones y me avergonzaste en público pidiéndome matrimonio... — Suspiró Hunter, ése día había sido realmente inolvidable.

— Éso último fue adorable, hubieras visto tu cara~ 

— La vi. Está todo grabado.

Gabriel sólo se rió con dulzura sin dejar de ver el camino. ¿A dónde iban? Bueno, a petición del pelirrojo estaban yendo a visitar a alguien en el pueblo... Iban a visitar la tumba de Paolo. Tenían que pasar por el pueblo para llegar al cementerio, a Gabriel le disgustaba la idea pero, ahí iban, un poco molestos ya que Hunter quería golpear a aquellos que lo molestaron pero para no meterse en más problemas no lo haría, todo por la reputación de su prometido.

Pasaron frente a una enorme iglesia, todos se veían bastante delgados, pálidos y algunos hasta enfermos, daban grima, pero eso si: el padre de la iglesia —quien estaba fuera de ésa con unas personas— se veía muy sano, incluso algo obeso. Pueblo extremadamente religioso tenía que ser, ya veía porque todos los que se iban del pueblo no volvían.

Los detuvieron porque se veían como extranjeros, incluso preguntaron si estaban perdidos. Las caras cuando vieron de quien se trataba fueron épicas. Empezaron a gritarle que era un demonio, que había vuelto a maldecirlos, incluso algunos quisieron lanzarle cosas al auto pero Gabriel aceleró justo en ése momento dejándolos atrás en una gran nube de polvo que levantó mientras se reía. 

Al llegar al cementerio estacionaron no muy lejos de donde se encontraba la tumba de su hermano. Éso si, notó varias lápidas con nombres que reconocía, pero no les tomó importancia. Caminaron hasta llegar a la de Paolo, no se imaginó que a un lado de la suya estaría la de Garret y, seguida de ésa, la del hermano menor de Garret que no llegó a conocer en vida. 

— Hola Paolo, ha pasado un tiempo, ¿no? Perdón por no volver a venir a verte... Papá quiso alejarse del pueblo que le quitó a su esposa e hijo... ¿Puedes culparlo? Yo se que no. —Suspiró con una ligera sonrisa. — Perdón. Eres muy rencoroso pero realmente yo quiero disculparme por lo que te hice, ¿sabes? Jamás creí que tenías relación con Garret... Me sorprendió escucharlo de Farjat... ¿Sabes? Ahora es un buen chico, algo tonto pero heh, ya no me molesta. Y bueno también perdón por cumplir tu sueño de vida, aunque a éstas alturas dudo que lo fuera pero... ¡Lo hice! Primer lugar en todo... Y por ti en parte, lo has de saber... También quiero agradecerte pues, por eso, dejarme ganar el primer lugar en el patinaje sobre hielo, conocer al amor de mi vida... Todo. 

Con esas palabras tomó de la mano a su pareja, sonriendo de una manera que hipnotizaba a Hunter. El mayor tomó aire y luego vio hacia el frente.

— Soy Hunter, nunca te conocí pero... Seguramente ya has de haber visto todas las maravillas que hizo tu hermano. No se que hubiera sido de mi vida si no lo hubiera conocido, seguro me hubiera muerto de aburrimiento... Cada día con él es una aventura total y... Normalmente nunca lo digo pero... Amo tanto a Gabriel que es por eso que a pesar de proponerme matrimonio frente a miles de personas yo acepté. 

Las lágrimas de Gabriel no se hicieron esperar; pronto abrazó a su prometido bastante feliz, llorando por lo hermosas que habían sido sus palabras. Tuvo que separarse de él aunque no quisiera.

— Perdón si suena cruel pero... Gracias por haber muerto, Pao... Sabes que te quiero, pero sino fuera por éso nunca hubiera conocido a mi próximo esposo. Y, Garret... Perdón por todas las molestias que te causé en vida. 

No duraron mucho ahí, notaron que hubo personas que los siguieron y querían vandalizar el auto, Hunter tuvo que ir a golpear a algunos ya sin importarle nada. Se fueron de ahí sin importarles ya nada. 

Después de todo, ellos ya no tenían nada que hacer ahí, no tenían nada más que hacer. Tal vez Gabriel pudo presumirle a su madre pero... No, no quería siquiera recordar absolutamente nada de ella. No cuando estaba tan feliz con su novio. 

— Te amo, Hunny. 

— Yo también te amo Gabi. 

Vivieron bastante felices, vivieron bien, Gaster los esperaba con una gran sonrisa en casa junto con un pequeño niño que adoptaron. Realmente era una buena vida. Y todo dejando que su yo dentro de él pudiera ver la luz frente a la persona más importante para su vida.

The Me Inside of Me [HorrorLust]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora