Capítulo 21

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Diego Bustamante

Roberta se encontraba en el piso, y Diego sujetaba su cabeza.

-¿Por que gritaste? -preguntó Christopher a Diego, pero en el instante se cayó al ver a Roberta

-¿Pero que fue lo que pasó? -dijo Dulce preocupada y se inclinó junto a ella. A Dulce se le bajó el efecto del alcohol por el simple hecho de verla tirada

-¡No se! Nos despertamos por un ruido de algo caerse, y Roberta se levanto y de pronto se desvaneció ante mis ojos -dijo Diego

Christopher fue por su botiquín de primeros auxilios y colocó debajo de la nariz de Roberta un algodón con alcohol y esperaron unos minutos.

-¿Diego? -preguntó con dificultad Roberta

-Aquí estoy mi amor -contestó

-¿Que fue lo que pasó? -preguntó Roberta

-Te desmayaste -contestó Christopher retirando el algodón

-¡Roberta! Que susto nos diste -dijo Dulce abrazándola

Roberta se levantó lentamente y observó a todos.

-Christopher... ¿Por que no traes puesta tu camisa? -preguntó Roberta y Diego dejó escapar una pequeña risa

Dulce y Christopher se sonrojaron y evidentemente no dijeron nada.

-¿Por que te desmayaste? ¿Tomaste mucho vino? -preguntó Dulce

-Para nada, ni siquiera me acabe la copa.... Es algo extraño, nunca me desmayo. De la nada me sentí mareada y de pronto vi todo negro -dijo Roberta sentándose en el sofá

-Tal vez fue un día muy agotador para ti... mejor hay que descansar... -dijo Christopher

-Ven amor, veámonos a dormir -dijo Diego tomando a Roberta de la cintura

-¿Juntos? -preguntó Dulce arqueando una ceja

-Si, juntos. No me voy a separar de ella después de lo que pasó... Además, ustedes también ya son novios -dijo Diego y se dirigió al pequeño cuarto

-¿Viste como se pusieron cuando les dije de la camisa? -susurró sonriendo Roberta

-¡Si, somos buenos juntando a las personas! Oye... ¿Segura que estás bien?

-Ya me encuentro mejor, pero oye... mejor hay que cerrar bien la puerta, no quiero que me despierten ciertos sonidos provenientes del cuarto de Christopher -dijo Roberta guiñando el ojo

Dulce María

-¿Quieres que duerma en el sofá? Lo entenderé si es así -dijo Christopher

-Claro que no, ellos tienen razón... tú eres oficialmente mi novio -dijo Dulce colocando sus brazos al rededor de su cuello

-¿Como te encuentras? -preguntó Christopher con las manos en su cintura

-Definitivamente ya estoy demasiado sobria por el susto. Y bueno, hablando de eso.... quiero decirte que, en cierto modo me alivia a que tú y yo todavía no.... es que, definitivamente es algo que quiero recordar y estar 100% consciente, no quiero que solo sea noche de copas -dio Dulce

-Claro, lo entiendo, pero oye, quiero aclarar que yo yo opuse resistencia al principio eh? -dijo Christopher riéndose y Dulce le dio un tierno beso en los labios.

Al día siguiente se prepararon para ir al lago, estaban vestidos de tal modo que parecían otras personas. Se sentaron los cuatro a desayunar y repasaron una vez más el plan. Después de unos minutos, se levantaron d ella mesa y se miraron todos fijamente.

-Creo que... ahora sí va a ser la despedida -dijo Dulce tristemente.

Dulce no podía creer como es que en estos días su venida haya cambiado toda su vida. Los iba a extrañar demasiado, y la entristecía que esto era realmente el fin.

Roberta Reverte

-Supongo que si... Dulce... quiero decirte que... -empezó a decir Roberta

-Me estoy mareando mucho, creo que ahora yo voy a ser el que se desmaye -dijo Diego interrumpiendola con cara pálida y sujetándose del hombro de Christopher

-¡Dulce ve por el algodón que deje en la cocina y ponle alcohol! -dijo Christopher sentando a Diego en una silla

Ella hizo lo que él le dijo y se lo dio a Diego

-Huele esto -dijo Dulce

Roberta se sentó junto a Diego y le daba pequeños golpes en el cachete para que no se desmayara. Al cabo de unos minutos de tensión, Diego recuperó poco a poco su color y se levantó.

-Ya estoy bien, ya pasó -dijo Diego

-¿No estaría ir bien al doctor antes? De verdad me preocupan los dos, primero Roberta y luego tu... -dijo Dulce

-No creo que sea lo adecuado -dijo Christopher mirando solamente a Dulce

-¿Pero por que no? ¡Hay algo mal! -dijo Dulce

-Vamos a mi cuarto, debemos de hablar de algo... ahorita venimos, quédense aquí -dijo Christopher y ambos se fueron

-¿Los seguimos? -preguntó Diego

-Obviamente -contestó Roberta

Christopher Uckermann

-¿Que pasa Christopher? -preguntó Dulce con un tono un poco molesto

-No los podemos levar al doctor

-¿Porque no? No podemos dejarlos ir enfermos. ¿Que tal si se contagiaron de un virus reciente y en su dimensión todavía no es conocido -dijo Dulce preocupada

-Debemos correr el riesgo

-¿Estas hablando en serio?

-Si, ellos no tienen ningún documento de identidad aquí. Uno no puede ir disfrazado al doctor. Dime, ¿Que pasa si los reconocen?

-Se pueden hacer pasar por nosotros, tienen nuestra misma cara

-¡Por eso mismo! Lamentablemente en este medio no tenemos nada de privacidad, y todo se sabe. ¿Que van a hacer tus padres al ver una foto en la que recientemente su hija de hace más de 10 años está en el doctor? En este mundo no pueden haber dos Dulce María ni dos Christopher. Ellos son Roberta Reverte y Diego Bustamante

-¡Podemos tener cuidado con los paparazzi! -dijo Dulce desesperada

-Es mucho riesgo. Mira, hay dos opciones. O no van al doctor, o les decimos la verdad. Tú elige -dijo Christopher

-¿La verdad? ¿Estas loco? ¿Como se los piensas decir? "Hola, oigan ustedes son personajes ficticios, alguien los escribió y los creó, nosotros solo fuimos los actores de una novela en donde les dábamos vida a lo que creen que ustedes existe, y miles de personas conocen sus historias por eso no podemos ir al doctor porque en este mundo, ustedes solo son unos papeles" -dijo Dulce enojada

-¿Que? -preguntó Roberta con lágrimas en los ojos y Diego mirándolos con profunda decepción.

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