ODIO A LAS NIÑAS

17: "Reencuentro"

Narra Matt

Estaba viendo Drake y Josh en la tele que hay en mi cuarto.

Me empiezo a reír. Pienso que es muy irónico tener dos amigos que son gemelos y que se llamen Drake y Josh.

Si Dragon Ball no existiera, esta sería mi serie favorita.

- ¡Matti! - empezó a llamarme mi mamá desde la planta baja.

Le baje un poco al volumen de la tele.

- ¡¿Que pasa!? - le dije gritando para que me escuchara.

- ¡Ven!

Rodé los ojos.

No entiendo porque las mamás no te pueden decir las cosas sin ocupar que estés cerca de ellas.

Siempre te dicen que vayas a donde están.

Baje las escaleras.

- ¿Que pasa? - dije con un poco de fastidio en mi voz.

- ¡No me hables en ese tono que soy tu madre!

- Perdón perdón

- Bueno... solo que te quería decir que ya casi es hora de ir a Piter Piper Pizza.

¡NO PUEDE SER!

Se me había olvidado...

- ¿No me digas que se te olvidó?- dijo de repente mi mamá

Estoy empezando a pensar que mi mama puede leer mentes...

- Tal vez...

- Ay Matti, estos últimos días andas en las nubes.

Suspiré - lose... y no me gusta para nada estar así.

- De seguro a de ser por esa niña... como se llamaba? Creo que Sara, ¿estoy en lo correcto?

- ¡No es por ella! ... - dije mirándola directamente a los ojos. Empecé a desviar mi mirada hacia abajo, agachando la cabeza y viendo mis pies - y si.. así se llama - susurré.

- Sabes... últimamente sueño mucho con un labial Mac, y también un nuevo rímel de Urban Decay -dijo tocándose con una mano la barbilla, como si estuviera pensando.

- Mamá... - me escuchaba frustrado - ¿Podrías dejar de recordarme por un momento la tonta apuesta que hicimos?

Ella se ríe. 

- Perdón hijo, se que te molesta que diga eso.. ¡pero no lo puedo evitar! - al decir esto último hizo un chillido que sonó parecido a cuando grita Amanda.

Muy estresante.

Bufé. Creo que mi mamá ya imaginó todo mi futuro al lado de una niña... y todo por ella.

Agghhhh!

Ya no la soportó más. Ya tenía suficiente con él... ahora alguien más me quiere hacer la vida imposible.

Excelente.

- Matti! Volviendo al tema. Vete vistiendo que después se nos va a hacer tarde, y ya quedamos Emma y yo en llegar temprano.

Emma es la mamá de Derek. Mi mejor amigo.

Sinceramente me gusta que mi mamá y su mamá se lleven tan bien. De esta manera ellas se quieren ver más seguido, y por lo tanto él y yo también nos vemos mucho.

- Okay okay, ya voy.

Subí las escaleras de dos en dos. Llegué a mi cuarto, agarré lo primero que vi, y me empecé a vestir.

Espero con todo mi corazón dejar de sentirme así. No me gusta. Nada.

La odio. Mucho.

Narra Sara

Sigo sorprendida. No recordaba así a mis abuelos... o mas bien, no los recordaba.

Mi abuela no se ve tan vieja, tiene el cabello rubio con una que otra cana, atado en un perfecto molote. Sus ojos son azules grisáceos. Podía sentir su intensa presencia. Vestía muy formal, muy limpio. Demasiada perfección visualmente.
Mi abuelo de igual manera, no se veía tan viejo. Es de cabello castaño, ojos verdes. A simple vista lo noté un poco menos estricto que mi abuela. De igual manera llevaba ropa elegante.

- ¿No nos vas a invitar a pasar? - dijo mi abuela con tono estricto.

- Ahh, perdón. - me sentí apenada -Pasen... abuelos.

- Cuanto extrañaba escuchar eso, mi querida nieta - mi abuelo por fin habló. Se le veía feliz, sonriente.

Le devolví la sonrisa, y volteé con mi abuela. Al verla a los ojos, sentí que su mirada expresaba.. tristeza.

Fui directamente hacia los dos, y los abrasé. Creo que no se lo esperaban porque los dos se miraron sorprendidos.

- Los extrañé mucho abuelos - dije alegre.

- Y nosotros a ti - dijo mi abuela. Por primera vez, le ví una casi sonrisa.

Se escucharon pisadas en las escaleras. Era mi mamá. Los tres volteamos hacia su dirección.

Le examiné el rostro, y ya no había ningún rastro de que había llorado.

- Hola padres - dijo entre incómoda y alegre.

- ¿Qué son estas horas de bajar? - dijo mi abuela regresando a su comportamiento autoritario.

- Estaba arreglando unas cosas arriba... y por cierto, ya no soy una niña - dijo mi mamá con mirada desafiante.

- ¡Cálmense, por dios! - exclamó mi abuelo aún sin creer lo que pasaba - Hace mucho tiempo que no nos vemos, ¿y empezar a pelear es lo primero que hacen? Que esta vez sea distinto... por favor. No estuvimos buscándolas por años como para alejarnos de nuevo.

Volteó a ver a mi abuela y mi mamá. Después de esas palabras, las dos se relajan, y se voltean a ver.
No entendí a lo que se refería mi abuelo, siento que me esconden muchas cosas, que obviamente después reclamaré que me digan.

- Perdón papá... - la notaba intimidada.

Wow.

Lo veo y no lo creo. Su personalidad cambia mucho cuando están mis abuelos presentes. ¿Qué no me has contado mamá?

Mi abuela se aclara la garganta.

- Bueno... ¿qué tal si nos sentamos? - propuso.

Siento que será un largo día...

Y pensar que en estos momentos podría haber estado en Piter Piper Pizza con mis amigas... y...

Basta.

Lo único bueno de todo esto es que no veré a ese niño tan insoportable hasta regresando a clases.

¿Cierto?