4 días 1/2

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Takao

Fui abriendo poco a poco mis ojos entrando de nuevo a la realidad. Estaba en posición fetal con mi cabeza en la almohada. Tal vez fue porque estaba aun algo dormido, ver a el "amor de mi vida" acostado a lado mio, sin lentes y con una cara tan linda para mí en ese momento. No reaccioné después de un rato, parecía que estuviera en sueños, esos donde era feliz a lado de mi Shin-chan sin nada de tormento a mi alrededor. Lo triste fue que en verdad lo tenía al frente mio. Abrí mis ojos como platos al darme cuenta de la situación y no pude evitar poner rosas mis mejillas.

Después de tranquilizarme correctamente, sin perder el control por tener a Shin-chan a mi lado, me puse a pensar... ¿porqué amaneció a mi lado? ¿acaso se pudo caer de la cama? ¿qué hice anoche?... ninguna respuesta tenía. Solo esa era la realidad, Shin-chan esta a mi lado, acostado, con su desgraciada cara de ángel y punto.

Estaba en una guerra con mi inútil mente hasta que sentí a Shin-chan sentarse mientras se pasaba sus pulgares a sus ojos.

— Buenos días... —Dijo el megane algo somnoliento.

— Buenos d-días, Shin-chan... —Me senté inmediatamente. No sé porque tartamudeo tal vez sonó algo raro...

— ¿Por qué estaba ahí contigo,Takao? —preguntó mientras se paraba para buscar sus lentes que estaban en el escritorio.

— Aunque me preguntes yo tampoco sé...

— Ya veo —suspiró, acomodándose los lentes.

— ¡Kazu-chan, Shintaro bajen a desayunar! —llamó la madre de Shin-chan desde la cocina.

— ¡Ya vamos! —contesté.

Shin-chan se fue a bañar. Mientras que yo estaba que caminaba de un lado a otro por la desesperación.

No traje ropa para cambiarme... Apenas me quedaba algo de Shin-chan. —Pensé.

Mi día iba de lo peor, primero apareció un Shin-chan súper sexy a lado mio y ahora esto... no puede ser. Trataba de calmarme pero no podía mi mundo estaba acabado, yo nunca he faltado a clases —hasta ahora— y no quiero estar después justificando faltas, peormente hacer los deberes que mandan en los días que faltas.

Hasta que mi salvación apareció.

— Kazu-chan —llamó desde la puerta—, tu mamá te trajo tu uniforme ayer en la noche, de casualidad nos encontramos en el camino y me los dio a mí. Así que no te preocupes, si puedes ir al instituto —terminó de hablar, me dio mi uniforme y me empujó hasta la puerta del baño— Anda apurate que vas a llegar tarde —sonrió.

— Gracias, señora —Le devolví la sonrisa, y entré al baño.

~~~

Después de unos minutos salí del baño ya con mi uniforme puesto, me dirigí hacia la mesa donde me esperaba Shin-chan, su madre y Ashley agitando su cabeza como señal de sueño. Había un desayuno parecido al que hace mi familia, pero el aire era distinto.

Terminamos de comer, luego fuimos hasta la puerta principal.

— Yo me voy mas tarde aún no termino mi trabajo —La mamá de Shin-chan nos dio un beso en la frente a cada uno de nosotros. Ashley le dio también uno, Shin-chan se sonrojó un poco y yo le sonreí. Era cómica esta escena.

Ashley iba agarrada de la mano con Shin-chan, hay que admitir que se veían muy tiernos, yo solo observaba en silencio detrás de ellos. Voy a romper el aura armoniosa de esos dos.

— Shin-chan, tienes que ir a dejar a Ashley a su escuela, ¿verdad? —pregunté para asegurarme de que esto es lo que hace siempre los miércoles, jueves y viernes.

¡¡Feliz cumpleaños, Shin-chan!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora