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En la cama se encontraba sentado Seokjin quién ya estaba fumando su segundo cigarrillo, observaba detenidamente el cuerpo de este, no por nada lo había secuestrado; siempre pensó que Tae tenía un cuerpo que lo hacía lucir virgen, eso fue lo que tanto hizo enloquecerlo.
Por otra parte Taehyung comenzaba a sentir muchísimo calor, sus mejillas estaban muy rojas, sus labios húmedos entreabiertos y su respiración algo agitada. Definitivamente el pelirosa lo había drogado con afrodisíaco. Se sentía demasiado excitado, estaba sumergido en la necesidad de quitarse la ropa y satisfacer su necesidad, bajó la mirada de un momento a otro y notó su miembro erecto intentando salir de sus pantalones ajustados.
Seokjin sonrió ampliamente poniéndose de pie sin perder el tiempo, metió su mano debajo de la playera del menor y acarició su abdomen mientras que con su otra mano apagaba el cigarrillo. Besó a Taehyung con lujuria, el beso era demasiado húmedo ya que el menor también había correspondido este. El mayor fue bajando lentamente por su cuello, besando, lamiendo y mordiendo su piel. Desató sus pies y lo tomó en sus brazos recostándolo en la cama, rompió la playera de este quitándosela por completo, realmente disfrutaba de la vista.
En una posición desprevenida Taehyung intentó escaparse pero le fue imposible porque Seokjin lo había atrapado con fuerza, el mayor sacó unas esposas de su bolsillo trasero y atrapó al menor uniéndolo al respaldo de la cama.
Sin vacilar quitó las últimas prendas de este con rapidez, sintió su miembro palpitar al ver como el miembro de Taehyung salía con fuerza y tocaba su abdomen de la excitación, acarició este dándole la satisfacción que necesitaba y lo miró contenerse pero sería imposible que pudiera perdurar tanto aguantando.

—¡Déjame! —gritó repentinamente el menor comenzando a removerse en la cama, impidiendo así que el mayor lo tocara.

—Deja de moverte, no me hagas atar tus pies. —reclamó Seokjin un tanto cabroneado al ver que no se detenía.

—¡Eres un mentiroso!

El pelirosa frunció el ceño sin aguantar, era de muy poca paciencia. Sacó un cigarrillo de la parte posterior de la oreja, lo encendió y metió en su boca apenas listo, necesitaba calmarse. Taehyung aún no se detenía, no se entregaría a tal imbécil —así le solía llamar en su mente— como si nada, tenía un novio y lo respetaba más que a nada.
Algo corto de paciencia Seokjin sacó el cigarrillo de su boca y puso la punta de este en el abdomen de Taehyung quemándolo fácilmente. El pobre gritó de dolor al sentir como quemaba su piel, sólo así que quedaría inmóvil, bajó hasta su entrepierna y también formó una pequeña marca de cigarrillo ahí, para finalmente agregar otra en su abdomen nuevamente.
Separó las piernas de Tae con algo de fuerza para así poder mirar detenidamente su intimidad, el pelinaranja estaba muy avergonzado y trataba de juntar sus piernas usando toda la fuerza que tenía.
No estaba acostumbrado a este tipo de cosas, nunca las había hecho exceptuando cuando perdió la virginidad con Hoseok. Era muy distinto, Hoseok le había hecho el amor y en cambio Seokjin sólo intentaba violarlo.

Pero el mundo da muchas vueltas, Kim Taehyung.

LOVE IN TRAGEDY ✒ VJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora