Capítulo 11

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Luego de un par de horas de viaje, de las cuales no me quejo porque iba escuchando mi playlist favorita por los auriculares, llegamos al famoso campamento de familias.
Con Jordy bajamos de la camioneta y abrimos el baúl para empezar a sacar las valijas. El señor Ochoa y Joaquín nos ayudan a llevarlas hasta el hotel en dos viajes.

Cuando finalmente nos encontramos todos con nuestras respectivas valijas al lado nuestro, la mamá de Joaquín va a hablar con la recepcionista y vuelve con las 5 llaves que intuyo que son la de los dormitorios: una para ella y su esposo, otra para Joaquín, otra para Roy, otra para Jordy y una para mí.
Estamos todos en el segundo piso excepto el señor y señora Ochoa que tienen su habitación en el primero.
Subimos al ascensor con nuestras maletas para el segundo piso.

-¿Y, ____? ¿Estás emocionada?- me pregunta Roy

-Sí, no sé qué esperar, en realidad- le respondo 

-La pasamos muy bien cuando estamos acá- me dice Jordy

Llegamos al segundo piso y cada uno entra a su habitación.
Al entrar recorro toda la habitación y es gigante.
Hay una cama de dos plazas, un Smart Tv, dos sillones individuales, una gran ventana con vista a la playa (la cual no me había dado cuenta que está frente al hotel), un armario grande y un escritorio.
Por otra puerta se encuentra el baño, el cual también es enorme.
Empiezo a guardar y ordenar toda la ropa en el armario y cuando termino salgo de mi habitación del hotel y voy a la puerta de la de Jordy.
Toco dos veces y me abre al instante.

-¿Viste lo grande que es?- le digo totalmente sorprendida

-Sí, nos quedamos en este hotel todos los años- me dice sonriendo

-Wow, yo no estoy acostumbrada a esto, Jordy- le respondo

-Yo tampoco lo estaba cuando empecé a trabajar en la familia Ochoa, todo son lujos y cosas caras que nunca se me cruzaron por la cabeza- me dice

-Sí, la verdad- le digo- Bajaré a la playa, ¿Venís?- 

-Me siento un poco cansada, luego te alcanzo allá- me dice, asiento con la cabeza y decido bajar por las escaleras al hobby del hotel

Cuando llego al hobby, visualizo que se abren las puertas del ascensor y sale alguien, es Joaquín. No se lo ve muy feliz.

-Joaco- le digo y me mira

-Hola- dice y esboza una sonrisa- ¿Ibas a la playa?-

Lo hice sonreír, me aplaudo mentalmente por eso.

-Sí- le respondo

-¿Te molesta si te acompaño?- me pregunta mientras salimos del hotel

-No tengo problema, mejor caminar por la playa acompañada que sola, ¿No?- pregunto y sonríe

Caminamos unos metros y de repente siento la arena bajo mis zapatillas.
Me las quito para poder sentir el tacto con la arena y Joaquín hace los mismo.
Empezamos a caminar por la arena mientras una suave y agradable briza acaricia nuestros cuerpos.
Como lo noto muy callado, y él no es así, decido romper el silencio:

-¿Está todo bien?- le pregunto

-Sí, es solo que Carolina me tiene de mal humor- me responde

-Pelearon- afirmo

-Ya venimos mal hace tiempo y me pregunto si sería una buena decisión cortar con la relación- me responde mirándome

-Oh, em... No creo que el amor te tenga que poner así, el amor te hace feliz- le digo y me corrijo al instante- Perdón, no me tendría que meter-

-Está bien, ____. Me gusta que hablemos- me dice y sonrío- También me gusta tu sonrisa-

-¡Basta!- le digo riendo y le doy un golpecito en el brazo

Oh por Dios, esos brazos fuertes bajo mi tacto. 

-Y lo que me contaste de esta chica...- le digo nerviosa

-¿Sí?- 

-¿Es temporal, me habías dicho, no?- pregunto deseando otra respuesta 

-No lo sé- responde y vuelve a ponerse serio- Dejemos de hablar de mí, ¿Cómo estás vos?-

-Bien- le respondo simplemente

-¿No tienes algún chico en tu antigua casa que te vuelve loco?- me pregunta sarcásticamente

-Noup- le respondo y me mira fijamente

Basta Joaquín, no me mires así, me vuelve loca.

-Tu mirada me intimida- le digo sincera

-¿Te intimido?- pregunta con una sonrisa picarona y sé que está disfrutando esto

-Algo- le respondo y me agarra de la muñeca para que frene el paso

Pone su mano fuertemente en mi cadera y hace que quedemos frente a frente.
Se acerca un poco y me sigue mirando fijo; yo no entiendo nada.

-La otra vez me dijiste que te ponía nerviosa, ¿Estás nerviosa ahora?- me pregunta y sonrío

-No- le digo aunque por dentro estoy estallando de nervios

Me acerca un poco más y hace que nuestros cuerpos se toquen.

-¿Y ahora?- me pregunta con esa sonrisa sexy de chico malo y me quedo sin aire

-____- escucho que gritan, me doy vuelta y es Jordy

Joaquín saca su mano lentamente de mi cadera y se aparta.

-¿Interrumpo algo?- pregunta Jordy y le tiro una mirada asesina

-Sí, Jordy, nos íbamos a besar apasionadamente- dice Joaquín en broma y ella ríe- Las dejo, vuelvo al hotel- dice y se va 

Cuando está suficientemente lejos, le pego a Jordy en el brazo.

-¿Qué acabas de hacer?- le pregunto enojada

-Perdón, interrumpí su momento romántico, pero parecía que te ibas a desmayar, ____- me dice riendo- Estaban muy cerca-

-Sí, este hombre me vuelve loca- le digo y caminamos por la playa un rato más hasta que nos cansamos y decidimos volver al hotel 

Ya en el hobby del hotel, nos sentamos en unos sillones y cada una revisa sus redes sociales.

Entro a Instagram y veo el inicio.

-Hola, chicas- dice un chico de nuestra edad acercándose a Jordy y a mí- Las invito, como huéspedes del hotel, a una fiesta a la noche luego de la cena familiar-

El chico nos da unos volantes y luego de sonreírnos, se va.

-____- dice Jordy mirándome con una sonrisa rebelde en su cara- Decime que vamos a ir, por favor-

-Jordy...- digo y me calla

-Vamos a ir, está decidido- dice y sigue con su celular

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No estes solo esta noche - Joaquín Ochoa y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora